Este es el segundo año de Raquel en hogwarts la escuela de magia y hechicería. Paso su primer año y conoció a sus nuevos mejores amigos Harry y Hermione. Este curso abra un nuevo misterio... ¿Que crees que pasará?
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Aquella noche, Raquel y Harry se quedaron despiertos después de que todos se fueran a dormir. Raquel estaba en el sofá de la sala común intentando componer una canción nueva con su cuadernito y su ukelele mientras el pelinegro ojeaba el diario.
—Esa canción es preciosa —Dijo Harry cerrando el diario y mirando a la chica —se te da genial componer.
—Bueno, gracias, lo intento...
En ese momento Harry pudo ver que en el diario de Raquel estaba la foto que Hermione les hizo en navidad.
—¿Y esa foto? —Dijo Harry agarrando el cuaderno —no sabia que me observabas mientras componías.
El chico rio, pero Raquel se quedó callada sin saber qué decir.
—Al final no me diste una copia ¿tienes otra? —le preguntó el pelinegro mirando la foto con una sonrisa.
—N-no, solo tengo una pero puedo conseguir otra... —Raquel cogió el cuaderno y siguió con su canción.
Desde que había confesado sus sentimientos hacia Harry con Hermione le daba pena estar con él a solas, o hablarse y tratarse de la manera que lo hacían antes. Harry se extrañó de la actitud que tenía Raquel.
Harry bajó la mirada al cuaderno de nuevo, frunciendo los labios, sin estar muy convencido.
—He estado pensando una cosa...
—¿Qué piensas?
—Antes, cuando se me cayeron todos los libros, por culpa del enano, todos los libros y hojas que tenía se me mancharon de tinta. Pero este fue el único que no...
Raquel dejó el ukelele y se sentó más cerca de Harry, cogiendo el diario y analizándolo extrañada.
—¿Me dejas probar una cosa?
—Claro.
Raquel cogió la pluma y la tinta que estaba utilizando para componer la canción.
—Voy a escribir algo...
—Escribe como si fueras yo —contesto Harry rápido —aunque si supiera cual es mi letra no se lo creería.
—Vale.
Raquel cogió la pluma, la mojó en tinta y comenzó a escribir:
«Mi nombre es Harry Potter.»
Las palabras brillaron un instante en la página y desaparecieron también sin dejar huella. Entonces ocurrió algo.
Rezumando de la página, en la misma tinta que había utilizado él, aparecieron unas palabras que Harry no había escrito:
