Scarabound | Kazuscara |

.｡•[ Capítulo 4 ]•｡.

El viento soplaba como hace rato, todo era muy agradable, tal vez se sentía así porque estaba con el.

Puede que lo que fuéramos a hablar me sacaría de las nubes, pero tenía que disfrutar este tranquilo momento a su lado.

Cuando estábamos lo suficiente lejos se detuvo y yo hice lo mismo, el fue el primero en hablar.

–Perdón, siento que te oblige a algo que no querías hacer.–dijo viéndome con una mirada indescifrable.–

–Ah... Esta bien, acepto tus disculpas, no te preocupes por eso, no me obligaste a nada.

Suspiró aliviado, ahora se veía más tranquilo.

–Fui muy impulsivo y apenas nos conocemos.

–Todos cometemos errores, no pasa nada.

Trate de restarle importancia a la situación, la verdad no me esperaba un disculpa, lo mejor sería hacer como que nada paso.

–Para mi no fue un error, quiero que sepas que no me arrepiento sobre lo que hicimos.

–¿Oh? –me iba a quedar callado pero decidí hablar.–No se que decir, esto me ha tomado por sorpresa.

Rió un poco ante esto, tenía una risa muy linda.

–No necesitas decir nada, solo déjame decirte unas palabras.

Yo solo asentí y lo deje hablar.

–Tus ojos reflejan misterio, hacen que despierte mi curiosidad, hacen que me pierda en ellos, tu piel que parece de porcelana y tu hermoso cabello asombran mis ojos.

Su mirada se veía determinada, se veía seguro de lo que estaba diciendo, ¿Es una especie de confección?

Baje mi cabeza avergonzado, no sabía que decir, sentía que mi corazón se iba a salir, es una extraña sensación, entonces sentí su mano tomando mi mentón para que lo mirará.

–Eres hermoso, tu belleza no tiene comparación, me gustaría conocernos mejor, quiero descubrir todo de ti.

Su poesía barata me había puesto nervioso.

–Tu también eres muy hermoso... Y lo de conocernos mejor podemos hacerlo. –el sonrió como respuesta.–

–Tu expresión ahora mismo es realmente linda, me dan ganas de besarte... ¿Puedo? –dijo acercándose lentamente a mis labios, pero sin llegar a tocarlos.–

–Antes lo hiciste sin permiso, ¿Que te impide hacerlo ahora?

Sonrió tomando esas palabras como respuesta a su pregunta anterior, juntando sus labios en un pequeño beso, pero al separarse sintió que el otro lo jalaba para volverlo a besarlo.

Colocó su mano en el cuello del contrario como si tratara de juntar más sus labios, esta vez el beso era más largo, más profundo, más intenso.

Estuvimos así unos segundos, beso tras beso, pero el aire empezaba a fallar, puse una mano en su pecho separado el beso con lentitud, no lo quería soltar.

–Tengo que irme, el sol está empezando a caer.

–Me gustaría poder acompañarte.

–No, así estoy bien.

–Ahí esta tu expresión seria de nuevo.

–¿Ah?

–Ahora una confundida, eres muy expresivo.–dijo con una sonrisa ladina.–

–¿Por que lo mencionas?

–Es solo que... Me gustaría ver todas tus expresiones.

Se acercó a su oído para susurrarle algo.

–Te verías realmente lindo sonrojado y agitado, sería una buena vista, ¿No lo crees?

Me di la vuelta tratando de ignorar el comentario, pero mi cara sonrojada me delataba.

–¿No dirás nada más? –hablo mientras el otro se alejaba.–

Me detuve aún sin mirarlo.

–Dile a tu grupito raro que gracias, sus estupideces hicieron que fuera una buena tarde.

–Si, si, ¿Pero que hay de mi?

–¿De ti?, Déjame pensar...–se detuvo colocando su mano sobre su mentón.–Que adiós y nos vemos mañana.

–Esta bien... Nos vemos mañana.

¿Se rindió?, Entonces parece que yo gane.

Después de eso me fui a mi departamento, pero antes pase por una tienda para comprar la cena, había sido una buena tarde, una muy buena.

Cuando llegue prepare la comida, vi televisión un rato y luego me fui a dormir, esta vez no hubieron pesadillas.

Al día siguiente fue lo mismo, levantarse temprano y seguir con mi rutina, lo único diferente era que Kazuha me espera en la entrada de la escuela para entrar juntos.

Así fue por el resto de la semana, en los descansos había uno que otro beso, pero nada comparado con lo del primer día.

En esos pocos días me fue integrando a su grupo, se podía decir que eran mi amigos, pero seguían siendo algo molestos.

A la hora de la salida Kazuha me acompañaba a mi casa, a veces iba también con Aether, pero hasta ahora no los he dejado entrar.

Era viernes, último día de la semana, había sido lo mismo que los demás días, lo único diferente era que Kazuha no me acompañaba a casa, tuvo que irse antes con su madre.

Cuando me estaba llenando escuché la voz de Aether, supongo que solo el me acompañaría o eso pensaba hasta que escuche una segunda voz, era Venti.

Voltee encontrándome a los dos chicos.

–Kazuha nos pidió el favor que te acompañaramos.–hablo el rubio.–

–Es lindo que se preocupe por ti, ¿Ya son novios? –ahora hablo el de trenzas.–

–Aun no, ya hemos hablado de eso y dijimos que primero nos íbamos a conocer mejor.

–Ya veo, Pero eso no impide que se besen.

–No... No lo impide. 

Ellos solo rieron.

–Quien diría que fueras así.

–Tiene razón, detrás de toda esa imagen que tienes se esconde un hormonal.

–Cállate Venti, no lo soy.

–Si lo eres.

–¿Fuentes?

–Miami me lo confirmó.

–Deja tus ridiculeces.–fruncí el ceño ante esto.–

–Bueno ya, lo que le veníamos a decirle.–dijo cortando la pequeña conversación.–

–Ah, es cierto.

–¿Que me iban a decir?

–Es una larga historia, en resumen hay una fiesta mañana por la noche, ¿Quieres venir?

–No lo sé, no suelo acostarme tarde y no me gusta que hayan tantas personas.

–Kazuha va a ir.–dijo con una sonrisa el alcohólico.–

–Lo voy a pensar.

–Eso fue fácil.

–Dije que lo iba a pensar, no tiene nada que ver con que el vaya.

–Aja, supongamos que te creemos.

–En fin, pasamos por ti a las ocho.

–dije que lo voy a pensar.

–Si, si, a las ocho nos vemos.

¿Yo en una fiesta?, Es una mala idea, ¿Pero que podría salir mal?

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*.✧Continuara✧.*