Capítulo 17: Aire

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Estuve horas mirando el techo blanco luego de que Luke se fue. Aunque tal vez solo fueron unos minutos. De cualquier forma me parecieron eternos. No podía generar un idea completa porque comenzaban a llegarme imágenes de Luke sonriendo, Luke haciendo un mojín, Luke mordiéndose el labio, Luke besándome, Luke... Acababa de irse y yo ya lo estaba extrañando. Pero él tenía razón. Necesitaba centrarme, pensar, formar algo coherente en mi cerebro.

Suspiré y decidir bajar a la cocina porque estaba casi muriendo de hambre. Salí al corredor luego de ponerme la ropa y hacer un rollo con las sábanas (que llevaba en mis brazos).

En la cocina estaba Calum, sentado en la mesa y con una taza de café en la mano.

—Oh—soltó cuando me vio.

Medio sonreí hacia él y puse las sábanas a lavar. Cuando volví a la cocina, me senté frente a él. Calum había servido una taza de café para mí. Mi amigo tenía el pelo demasiado revuelto y no llevaba camiseta. Rodé los ojos antes su común liberalidad.

—Ya tiene azúcar—comentó.

Asentí y di un trago. Envolví mis manos en la taza, aunque no hacía frío yo me sentía congelado. También puse la capucha de mi hoodie en mi cabeza, cubriendo mi desordenado cabello ya algo descolorido.

En un momento me di cuenta de que Calum estaba mirándome en silencio y con mucha atención.

—¿Qué pasa?

—Eso quiero saber yo—respondió.

Tomó una tostada que había en la mesa y la untó con mermelada.

—¿Qué piensas que tienes que saber?

—Michael, no seas idiota, te estoy hablando de Luke.

—Oh—solté yo esa vez.

Calum metió toda la tostada en su boca y masticó ruidosamente, mientras asentía hacia mí como si estuviera hablando, pero en realidad no estaba generando ningún sonido más que el de la tostada contra sus dientes.

—Sé que está pasando algo entre ustedes—dijo cuando tragó.

—No está pasando nada.

Tomé otro trago del café para terminar con la conversación. No quería hablar sobre eso, me hacía sentir extraño.

—Claro, y yo no me acosté con Pía.

—¿Te acostaste con Pía? ¿Por qué siempre te eliges a las más estúpidas?

—Son las más fáciles-—contestó simplemente, encogiéndose de hombros. Calum podía llegar a ser muy hueco con respecto a las chicas—. Pero no estamos hablando de eso, los vi besarse en el la puerta de la habitación de invitados anoche, luego no los vi más hasta hoy. Luke no durmió en ninguna de las otras habitaciones, salió hace un rato caminando muy rápido y no fue capaz de saludarme o agradecerme por el polvo de anoche.

Suspiré sabiendo que no habría forma de escaparse de eso, Calum había atado muy bien los cabos, además ya sabía lo que me sucedía con él.

—Nos...besamos...

—Si, si, si, ya supongo todo lo que hicieron, pero quiero saber qué está pasando en el nivel sentimental.

Me pregunté de dónde había sacado Calum esa manera de hablar mas no era importante en la conversación. Debía soltarlo en ese momento porque luego ya no iba a encontrarme apto para hacerlo.

—Nos dimos un tiempo-sonó a pregunta.

—¿Cómo? ¿Ya estaban saliendo?

—No, no. Solo... vamos a dejar todo quieto por un tiempo.

Never Underestimate A Blonde «Muke»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora