capitulo XVIII: Plan Cupido (Parte II)

Beginne am Anfang
                                    

Pues... eso era lo que esperaba, no había vuelto a verla desde nuestra reunión en el bar. Así que solo esperaba que su actitud para con Thomas cambiara.

—Por supuesto —respondí notando que intentaba preguntar más pero se  que se avergonzaba de hacerlo.

—Bien, eso es genial.

—Si, genial —pronuncio. 

—Entonces... —carraspea.

—Ya dime que es lo que quieres saber exactamente —expreso mirando directamente a sus ojos.

—Ella —suspira—, ella ¿se arrepiente de lo que sucedió en Río? —pronuncia. 

—Claro que no, es... es solo que ella tiene algunas cosas personales que resolver.

Lo cual no es del todo mentira, no podía contarle sobre los problemas que tenía nuestra amiga, es algo que no me correspondía a mi. Por lo tanto esperaba que ella lo contara lo antes posible, ambos eran mis mejores amigos y no quería que ninguno de los dos saliera lastimado.

—Ya, está bien.

—¿Puedo hacerte una pregunta? —interrogué—. Además de esta claro.

—Siento que me voy a arrepentir de tu pregunta —dijo mientras jugueteaba con su botella— pero claro, adelante.

—Okey, seré directa —giré mi cuerpo hacia él para enfrentarlo—. ¿Tu estas enamorado de ella? —pregunté sin darle demasiadas vueltas al asunto.

—Vaya, eso fue demasiado directo—comenzó a quitar la etiqueta a la botella mientras pensaba en su respuesta—. Lo estoy —responde tocando su cabello—, estoy completamente enamorado de esa mujer

—¡Ya lo sabía! —expresé con una sonrisa complacida—. ¿Desde cuando?

—Desde el primer día en que la vi—admite con sinceridad—. ¿Lo recuerdas?

—Claro que lo recuerdo, nunca lo olvidaría —sonrío recordando aquel día.

Flashback:

—Oye Thomas, ¿salimos a divertirnos esta noche? —pregunté.

—Claro cariño —respondió acercándose a mi, mientras me pegaba a la pared y colocaba un brazo al lado de mi rostro.

Genial —sonreí— te presentaré a mi mejor amiga, es nueva aquí y no conoce mucho.

Está bien, pasaré a buscarlas. ¿Tienes clases ahora?

No, ¿por qué? ¿tienes algo en mente? pronuncié colocando mis manos en su pecho.

Tengo varias cosas en mente interesantes que podría...

—¡Sophia! —gritó Sanem mientras sacudía su mano llamando la atención de todos.

Venía corriendo hacia nosotros, pero no vio el letrero que decía que no se podía cruzar porque el suelo estaba mojado, entonces resbaló y cayó de culo.

Fin del flashback.

—Eso debió doler —dije—. Fue gracioso como acabó en el suelo.

—Seguro y nos acercamos a ayudarla a ponerse de pié — expresó sonriendo—. Entonces, cuando crucé mi mirada con la suya lo sentí, sentí que ella llegaba para cambiar todo mi mundo.

Sonreí por su confesión, no entiendo como no lo había notado antes, estaba ciega.

—¿Por qué nunca lo dijiste? —pregunté —Es decir, ¿por qué no hiciste nada?

—Porque ella no corresponde mis sentimientos y además, por un momento creí que le gustaban las mujeres y que estaba enamorada de ti.

Solté una carcajada, definitivamente tengo dos idiotas como mejores amigos. 

—¿Es en serio? somos mejores amigas Thomas, eso nunca sucedió y tampoco sucederá— expresé riendo.

—Las vi besarse varias veces en mi cara, demasiadas diría yo —sonríe—. Luego la vi con un hombre y supe que era bisexual, pero ya había iniciado una relación rara con él y me di por vencido. Necesitaba olvidarme de ella de alguna manera y sé que es una estupidez pero desde ese momento estuve recorriendo las camas de varias mujeres que luego no recordaba ni sus nombres.

—Te comportaste como un completo imbécil y aún así no lograste olvidarla.

—No y no sé si algún día logre hacerlo.

—Lucha por ella, dile lo que siente, has algo —sugerí.

—¿Qué?

—Eso, lucha por ella, conquistala, sé que podrás, confía en mí. Es más, yo tu mejor amiga —me señale—, te ayudaré.

—Estas demente, no funcionará.

—Lo sé, igual me amas y si funcionará.

—No sé como pretendes que la conquiste si ni siquiera me dirige la palabra y no la he visto desde que regresamos de nuestro viaje a Río porque ha estado evitándome.

—Volverá a hablarte, solo necesita tiempo —bebo un trago de mi cerveza—. Tú mientras tanto ve pensando qué harás para conquistarla y yo también pensaré en algo.

—De acuerdo jefa —expresó realizando un saludo militar—. Ya es tarde debería irme.

—Claro, te llamaré para terminar el trabajo.

Se puso de pie y tomó su abrigo. Observó todo el espacio sorprendido, Sanem no era la única que no estaba enterada de mi mudanza. 

—Por cierto ¿desde cuando vives aquí? —preguntó curioso.

—No lo sé, un mes o dos meses tal vez.

—¿Y por qué no lo sabía?

—Tal vez sea porque me ignoras idiota.

Todo había pasado tan rápido que ni siquiera mis mejores amigos se habían enterado de mi mudanza. Pero en mi defensa, fue porque ellos se dedicaron a ignorarme luego de nuestro regreso de Rio.

—Lo siento Nix.

—No te preocupes.

—Quiero conocer a tu nueva amiga.

Arquee una ceja al oir aquellas palabras.

<<Ni lo sueñes Thomas, sólo concéntrate en Sanem>> pensé.

—No es para meterme entre sus piernas, solo quiero saber quien es Nix.

—De acuerdo Thomas, luego te la presentaré.

—Bien, te veo luego —besó mi mejilla.

Lo acompañé hasta la puerta, nos despedimos con un abrazo y se marchó.

Presentía que no sería demasiado fácil ese trabajo.

Una parte de Mi (Libro 1)Wo Geschichten leben. Entdecke jetzt