Tu y Yo En Paris [] Argentina x Francia

Conociéndose

Dentro de la nueva casa, específicamente en la sala de estar,  se veían a las malvinenses sacando sus cosas de unas cajas, el argentino traía sus cosas a la sala para ir sacando una por una, las hijas de Francia estaban sacando las ultimas cosas de la francesa, ella había traído vestidos de muy buena marca y bastante caros, habían alrededor de 50 o 70 vestidos, también algunas ropas elegantes y de buen diseño, en total trajeron entre 30 y 40 cajas de ropa, chicas, medianas y grandes, Argentina al ver esas cajas llenas de ropa se quedo impactado, sabiendo que el solo tenia como 15 prendas de vestir

Argentina: . . . vos me estas jodiendo. . .

Mexico: -Se le acerca también mirando la cantidad de cajas- Wey, ni yo tengo esa chingadera de ropa, mírame, uso la misma ropa de hace 9 días

Argentina: Ufff! el olor a culo que debe tener

Mexico: Pinche pendejo, por eso no tienes novia

Argentina: Ni vos tampoco gila

Mexico: Quizás pero puedo conseguirme uno rápido con este cuerpo -Con sus manos se agarra los pechos y los levanta un poco- Tu pareces estar algo gordito~

Argentina: -Se quita la remera que tenia dejando ver sus músculos-

Argentina: Estaré en la mierda y con presidente boludo pero estoy bien bueno -Haciendo que se noten los músculos-

México: -La mexicana solo se le quedo mirando mientras que su rostro se tornaba de un color rojo- No mames wey. . . ¿Qué comes y que haces para estar así de mamado?. . .

Argentina: Pura polenta y laburo mami~

Mexico: . . . (Obtendré todo eso si o si) -Mirándolo con la cara roja-

Australia: Oigan chicos ¿De que habl- -Mira a argentina- . . . No vi nada -Se da media vuelta y regresa por donde vino-

Mexico: Wey ya ponte tu camisa

Argentina: Ya voy, che pareces una amiga toxica que solo quiere este con vos -Se pone devuelta su remera-

Mexico: Pffff ¿Yo toxica? No digas mamadas Argentina

Argentina: Yo las digo pero tu las haces

Mexico: -Esta vez le da un rojo de enojo y toma una caja vacía para tirársela al argentino- Eres un pendejo