1

522 27 16
                                    

Me encanta cuando me llamas señorita, desearía poder fingir que no te necesito, pero cada toque es ooh lalala es verdad, oh, debería estar corriendo, oh me haces seguir viniendo por ti...


- Basta hermana, vámonos, papá debe estar preocupado - comentó con inquietud el pequeño Hanma -.

- Estás bien hermanito, tienes miedo? - decía con sorna la mayor -.

- Vamos Tn, no me hagas reír, yo no tengo miedo a nada, pero papá quería vernos puntuales en el negocio... - mencionaba mientras ansioso, se mordía un dedo-.

- Tranquilo ya llegamos, solo necesito éstos medicamentos, vendas, gasas e inyecciones para mí curso...- en lo que comparaba el precio y la calidad de los productos en la farmacia -.

- No entiendo cómo esque aún papá no se ha dado cuenta que te metiste a un curso de enfermería - opinaba con cansancio, en lo que se detenía la cabeza agachado -.

- Sabes que casi no vemos a nuestro padre, así que, me es más fácil poder dar mi escape, y que tú seas un buen confidente Hanma kun - le acariciaba su cabeza, con su lindo mechón rubio, el infante se sonrojó -.

Narra Tn.

En lo que mi papá hacía esa aburrida bienvenida a un nuevo socio, Hanma y yo escapamos a la farmacia, teníamos algo de tiempo, así que confiamos en ello, vengo de ( tp) , si Hanma es adoptado, mientras que mi papá y yo, pasábamos cotidianamente, por un orfanato, siempre veíamos por las rejas, a un pequeño de 4 años deprimido y cabizbajo,me partió el alma, teniendo el dinero, y recursos necesarios, le pedí a mi papá adoptar a ese pequeño, como mi hermano, él ya no se sentiría solo, y yo tendría un hermanito que cuidar y proteger, poco a poco ese pequeño chico, cumplirá exactamente ese tiempo conviviendo con nosotros y así, fue cambiando, ya no estaba triste, al contrario, incluso mi padre lo trata bien.

La muerte de mi mamá nos llegó de golpe, mi progenitor se volvió más frío y exigente, quiere que sea parte de una de las compañías de seguros más reconocida de Shibuya " Seguros y préstamos (ta)" son muy solicitados y le va bien, el problema que yo no me quiero dedicar a eso, sino a ser enfermera, de procurar al necesitado, ayudar a los demás, pero mi padre no comprende eso, nisiquiera lo respeta.

- Ahmm disculpa Tn, ya podemos irnos? Enserio, esto me mata de ansiedad - en lo que cargaba una bolsa -.

- Si Hanma, ya vámonos - terminado de pagar los artículos - tienes mucho miedo a papá cierto? - acariciando la mejilla del menor -.

- Esque, no me gusta como te grita, yo siento feo, me dan ganas de llorar - el menor bajó la mirada triste -.

- No te sientas mal, ya te expliqué que solo le afectó la muerte de mi mamá, por eso la forma de ser tan calculadora...- mirando hacia abajo el pequeño que seguía deprimido - está bien, quieres un helado?.

- Sí! - exclamó con felicidad el niñito -.

- Muy bien, démonos prisa...- mientras que en otra parte...-

- Muy bien señores, démosle una bienvenida al señor Miyazaki, un nuevo miembro de esta valiosa corporación, un fuerte aplauso, sin su perseverancia no sé qué seríamos - vitoreó el padre de Tn aplaudiendo -.

- (En dónde estarán ese par de revoltosos) - se reclamaba a sí mismo -.

- Oye Enrique, y tus hijos no han venido, quedaste en presentarlos - mencionaba uno de los licenciados -.

- Tal vez tuvieron un percance, ya sabes ellos, la escuela, las tareas que no los dejan en paz - sonriendo nerviosamente, pero manteniendo la postura -.

- Oh de acuerdo, no hay problema.

- Bien, disfruta la fiesta...( Éstos demonios).

Pasó un largo rato, y no había señales de vida por parte de ellos en el edificio...

- Hermana, no quiero alarmarte pero, creo que ya no llegamos a la reunión - mientras se limpiaba su boca, el menor -.

- Oh rayos estoy frita...

- No, estamos fritos, yo estoy contigo, así que si papá te regaña, entonces también a mí me toca que me mate...- los dos callaron, para echar una carcajada - de acuerdo, vamos para la casa entonces...- llegando a la casa no se percataron de la presencia de su padre -.

- Hasta que al fin llegan, por cierto, dónde estaban? - golpeando el piso con la punta de su pie -.

- Oh hola padre, bueno, nosotros estábamos, ehmm - en lo que la chica pensaba como zafarse, le dio al pequeño la bolsa para esconderla -.

- Hanma, ve a tu cuarto si? Luego hablamos - susurraba la chica, con una sonrisa, para no angustiar al ojiámbar -.

- Si hermanita - agachándose, en lo que daba paso, con una leve voz -.

- Qué pasó contigo hijo, me sorprende de tí? - volteando hacia el pequeño, mientras negaba con la cabeza -.

- Déjalo, él no tiene nada que ver aquí, la única responsable aquí soy yo, aquí a quién tienes que castigar soy yo, con él no te desquites! - y así empezó otra vez, la discusión diaria, el pequeño Shuji, tapándose los oídos con una almohada, llorando y suplicando porque su padre no golpeara a su preciada hermana -.

- Estás consciente de la tontería que estás cometiendo? Y tu futuro qué no has pensado en eso, solo quieres ver la maldita vida color de rosa!. - vociferó su padre, mientras se tocaba la frente con fastidio -.

- Tengo derecho a dedicarme a lo que me gusta, no quiero ser una maldita abogada o socio, de esa corporación tuya, que te tiene el ceso tan absorbido.

- No me hables así y respeta, jovencita, allá fuera hay lobos y buitres que solo esperan que te descuides para agarrarte desprevenida, no seas tonta!.

- He tomado mi decisión padre, ya no me trates como niña pequeña, ya tengo 18 años.

- No me levantes la voz, niña! Y vete a tu cuarto!.

- Bien! - para así cerrar con impotencia la puerta de su habitación -.

- Por qué es así conmigo, otros padres apoyan en sus sueños a sus hijos, prácticamente me quiere en una burbuja, y tal parece que la vida me castigó dándome un padre que no me comprende y que es muy cerrado en su ideología, lo siento, pero no puedo pensar como él...

Eran las 2:00 de la madrugada, Tn con insomnio por la forma del trato de su papá, se sentó estresada e inquieta, quería salir a tomar aire, pero eso no del todo se pudo, ya que con el ruido que hacía despertó a su hermano menor...

- Mmm, Tn nichan, a dónde vas? - mientras se rascaba un ojo, hablando bajito -.

- Al parque a caminar, alrato llego.

- No, espera, quiero ir contigo - dirigiéndose a su dormitorio, para cambiarse rápido -.

- Está bien, pero quédate muy calladito - susurrando a su hermano -.

- De acuerdo - haciendo un ademán de que cerraba su boca con cierre -.

Al llegar al parque, escucharon unas voces provenientes, los hermanos, ocultaron su presencia entre árboles, pues les inquietaban los ruidos, a deducir, eran puros hombres.

- Hermana, vámonos de aquí, rápido. - jalando con pavor la sudadera de la chica -.

- Espera Hanma...

- Si, derrotamos a esos idiotas, que se lo piensen dos veces antes de ingresar al territorio de los black dragons! - exclamaba un peliblanco -.

- Prácticamente, les metimos la verga a esas putas - comentaba un pelilargo, en lo que le daba un trago a su cerveza y riendo estrepitosamente -.

- Y de paso están ebrios, huyamos Tn! - el pequeño Shuji ya temblaba -.

La chica, ponía atención en lo que decían aquellos hombres, hasta mirarlos con atención, observando un pelinegro de cabello corto en específico, la mujer quedó hechizada por él de inmediato...

Señorita (Shinichiro y tú)Where stories live. Discover now