El omega de los haitani

Único

Takemichi se despertó en su habitación y se estiró un poco aturdido antes de deslizar sus pies en sus pantuflas. Miró el reloj que marcaba las 10:00 am. Caminó hacia el baño y se paró frente al espejo. Miró su cabello desordenado y trató de alisar parte del cabello despeinado y enredado. Se detuvo después de un rato y agarró un cepillo de dientes. Mientras Takemichi se cepillaba los dientes, pensó en lo que debería cocinar hoy. Ran comía cualquier cosa que hiciera, incluso si era veneno y Rindou criticaba algo de la comida que preparaba, pero a pesar de todo se la comía. Sus vecinos le dieron unas berenjenas que no necesitaban, así que tal vez debería usarlas antes de que se estropearan.

Luego, de repente recordó algunas palabras que Rindou le dijo hace dos noches.

Antes de que estuviera a punto de prepararse para dormir, Rindou comentó sobre su olor y cómo está bastante seguro de que su celo está a punto de acercarse. Ran, que caminaba cerca, comentó que debería despejar su agenda para la semana antes de que Rindou lo pateara para que se callara, pero aseguró a Takemichi que los llamara si llegaba su calor y arrastraba a Ran. Takemichi sudó al verlo y asintió antes de irse.

Eso hizo que Takemichi se preguntara por un momento si debería pedir un supresor de calor de buena calidad con las tarjetas de crédito de su marido. Gorgoteó un poco de agua y la escupió antes de irse a limpiar la casa y el jardín. Primero fue a limpiar el mostrador desordenado que tenía algunas cosas cuestionables de cuando los hermanos estaban haciendo su propio desayuno. Sobre la mesa se leía que los hermanos iban a la casa de su amigo Sanzu a destrozar el lugar con la firma de Ran en la parte de abajo. Takemichi era lindo Rindou también fue arrastrado allí en contra de su voluntad.

Luego fue a lavar los platos mientras pensaba en los supresores de calor. Dijeron que consiguió lo que quería, pero quería ensuciarse con ellos. Los supresores de calor podrían prevenir su calor y una espalda rota, pero está bastante seguro de que Ran se pondría furioso y se enfurruñaría porque se follaría a un Takemichi en celo.

Se secó las manos después de terminar los platos y sus pensamientos y fue a barrer las hojas de su jardín. Caminó hacia la puerta trasera y salió para ser recibido por el mundo otoñal. Una brisa fría se deslizó a su lado cuando se apresuró a recoger las hojas y luego regresó a su cálida casa. Cuando terminó de rastrillar las hojas del jardín a medias, sintió una pequeña chispa en su interior.

Lo restó importancia y pensó que era solo su mente antes de irse a terminar su trabajo. Luego de unos minutos, tuvo que arrodillarse en el suelo luego de sentir una intensa sensación en él que lo hizo gritar de dolor. Rápidamente se apresuró a regresar a la casa y fue a buscar su teléfono. Cerró la puerta trasera, no te preocupes.

Corrió escaleras arriba a su habitación y arrebató su teléfono celular. Jadeó mientras abría su teléfono y buscaba la letra "R". Presionó uno de sus nombres y sostuvo el teléfono cerca de su oído y esperó a que la otra persona contestara. La voz de Rindou se elevó.

"-¿Mitchy? ~ ¿Qué pasa? ¿Estás en tu calor"-.

Takemichi podía escuchar a un Sanzu ahogado ya un Ran gritando en el fondo pero no le importaba.

"-Dense prisa con lo que sea que estén haciendo y regresen a casa en 30 minutos. Eso es todo lo que les daré, hijo de puta, antes de que consiga a alguien más".-

Rindou inmediatamente terminó la llamada, probablemente para atrapar a un Ran hiperactivo y conducir rápidamente de regreso a casa. Takemichi lo tomó como una señal de que no estaba cagando y se arrastró hasta su cama y se acurrucó. Intentó no moverse mucho y tratar de equilibrar su respiración. Sintió un poco de resbaladizo y sudor manchando sus pantalones y lo tomó como una señal para quitarse los pantalones del pijama. Luego fue a desabotonarse la camisa y sacarse el pecho para tomar un poco de aire. Se retorció y su mano bajó hasta la suya, hasta su polla palpitante. Se estremeció un poco con el primer agarre antes de frotar la punta. Su mano volvió a recoger un poco de saliva en su mano antes de volver a la polla.

Se movió hacia arriba y hacia abajo tratando de tener la sensación de que se acercaba un orgasmo. Su otra mano bajó a su entrada y se retorció en su dedo hacia adentro. El resbaloso regate de él le facilitó empujar otros dos. El ritmo se aceleró y pudo sentir que se acercaba una liberación. Las lágrimas picaron en sus ojos mientras gemidos entrecortados salían de su boca. Cuando estaba a punto, la puerta de su habitación se abrió de golpe. Ran apareció en la visión de Takemichi antes de que Rindou lo empujara y saltara sobre Takemichi. Ran gimió un poco en el suelo antes de meterse en la cama con Takemichi y Rindou. Rindou estaba besando con lengua a Takemichi y Ran se arrastró detrás de él y le dio pequeños besos en el cuello a Takemichi.

Takemichi se alejó de ambos con ojos enojados y un puchero en su rostro.

-"¡Idiotas! Estaba cerca antes de que ustedes irrumpieran". Takemichi dijo enfadado. Ran sonrió y besó a Takemichi-.

-"Lo siento amor. Además, tú fuiste quien nos apresuró a llegar a casa. Solo pensar en que otro alfa te joda me enoja-". Ran dijo mientras presionaba su nariz sobre las glándulas odoríferas de Takemichi. El omega interno de Takemichi ronroneó ante la posesividad que le dio su alfa. Rindou chasqueó la lengua y tiró de Takemichi frente a él sobre su estómago. Observó el agujero arrugado por un momento antes de golpear el trasero, ganándose un grito de su omega. Dio unas cuantas palmadas más y admiró su obra de arte. Ran miró fijamente el culo redondo y rojo con lujuria.

Rindou de repente empujó tres de sus dedos en Takemichi, sin molestarse en ser amable. Takemichi podía sentir que un manojo de nervios era atacado implacablemente, pero salió de su aturdimiento cuando una mano lo agarró del cabello y algo lo abofeteó en la mejilla. Ran quería algo de atención, así que presionó la punta de su pene en los labios de Takemichi, dándole una pista sobre qué hacer. Takemichi agarró temblorosamente la polla de Ran tratando de no concentrarse en los dedos que le follaban el culo. Takemichi tragó 2/3 de la polla y comenzó a usar su lengua, con cuidado de no tocar los dientes. Rindou luego sacó sus dedos, lo que hizo que Takemichi emitiera un pequeño gemido.

Rindou luego sacó un condón de la nada y se lo puso en la polla. Takemichi miró un poco hacia atrás y vio a Rindou preparándose para entrar. Balanceó un poco sus caderas para provocar a Rindou, pero Ran vio esto y agarró el cabello de Takemichi con más fuerza y ​​empujó su pene más profundamente en la boca de Takemichi, presionando contra su garganta. Takemichi se atragantó un poco antes de agarrar su pulgar izquierdo en un puño, suprimiendo su reflejo nauseoso. Las lágrimas escocieron sus ojos nuevamente y Takemichi comenzó a frotarse contra las sábanas.

"-Prepárate princesa"-. Rindou dijo mientras envainaba su miembro en el agujero de Takemichi. "-MMHPH-" Takemichi se estremeció ante la familiar plenitud que sintió. Ran todavía estaba jodiendo su cara ahora Rindou estaba jodiendo su culo. Ran agarró el cabello un poco más fuerte cuando sintió que se acercaba su liberación. Ran soltó el cabello de Takemichi cuando finalmente se corrió. Takemichi sintió el líquido tibio fluir por su garganta mientras un poco goteaba por su boca. Ran contuvo un poco el aliento antes de acariciar al omega en la cabeza.

Pero Takemichi aún no puede descansar. Rindou todavía estaba detrás de él, destrozando el culo demasiado. El agarre de Rindou en sus caderas le dijo que Rindou se estaba acercando. Y él también. Las manos de Rindou instantáneamente fueron al cuello y lo estrangularon. No mortal, solo lo suficiente para someterlo por completo. Rindou agarró un poco más fuerte mientras se corría. Lentamente salió de Takemichi y dejó que Takemichi tomara un pequeño descanso.

Takemichi tosió un poco y alivió un poco su garganta. Rindou se quitó el condón que goteaba del resbaladizo de Takemichi. Lo ató y lo tiró a la basura. Entonces Ran y Rindou miraron a su hermoso omega de cabello negro. Los ojos azules de Takemichi estaban aturdidos y sus mejillas estaban rosadas con lágrimas en ellas. Ran luego puso a Takemichi en su regazo, sorprendiendo a Takemichi. Rindou se arrastró hacia él y apoyó su nariz en el cuello de Takemichi.

-"No te duermas todavía Mitchy".- Ran dijo mientras bombeaba su polla.

-"Es hora de la segunda ronda, princesa"- vio a Rindou mordiéndose el lóbulo de la oreja.

Pobre Takemichi. Tal vez los supresores de calor fueron una buena idea.