13.-

147 11 44
                                    

Nota: (Se incluirán cosas que son creadas por mi y no van con la realidad o lo que se cree sobre algunas criaturas)

—¡Ramiro, Ramiro!— Gritaban a la vez que trataban de hacer que el muchacho reaccionara. Los ojos del pelinegro se habían puesto completamente blancos.

—¡Aléjense de el!— Exclamo ____ apartando a todos los amigos del pelinegro —¡Ramiro! ¡Despierta, maldita sea!

El joven callo al piso y parecía convulsionar, el miedo crecía ¿Qué pasaría con el? ¿Qué tal si ese era el ultimo día de todos los presentes?.

—No se queden ahí parados como idiotas, necesito sus velas y sal— Mando Alejandro. Los demás les pasaron sus velas mientras Ethan iba a buscar algo de sal en alguna caja de el piso de abajo.

—¿Qué vas a hacer?— Pregunto la de vestido oscuro hacía Alejandro con temor. Ethan llego con la sal y Alejandro empezó a colocarla en un círculo alrededor de su amigo. Después tomo las tres velas y formo un triangulo con ellas.

—Ofrecerle mi cuerpo al demonio ¿Tú qué crees?— Respondió sarcásticamente —Camilo, ven, necesito que lo sostengas antes de que despierte.

El llamado hizo lo que su amigo le indico.

—Demonio ¿Estas ahí?— Pregunto el ojiazul.

—Buenas tardes, el señor demonio fue al baño ¿Gusta dejarle algún recado?— Contesto el pelinegro.

—¿Quién esta ahí?

—Habla Yadira, su asistente personal del demonio, pero como le comentaba. Por el momento no le puede atender ¿Le puedo ayudar en algo?

—¡Sal de ahí!

—¿Si tiene cita para hoy? ¿Cuál es su nombre?

—¡Yo vengo en nombre de Yisus!

—Yisus... A ver, déjeme lo rectifico. No, pero si tenemos espacio disponible para mañana ¿Lo acomodo?

—¡Sal Lucifer!

—No, no,  no me grite, no me tiene que gritar. Estoy trabajando nada más, nos estamos hablando bien.

—Le voy a decir algo, vas a salir de este cuerp-

—¿Sabe que? Mejor lo transfiero con servicio a clientes.

Todos estaban aterrorizados, no sabían si reír o llorar, que demonio más simpático.

—Buenas tardes, servicio a clientes.

—Eeh— Tartamudeo el ojiazul —Buenas tardes, mi nombre es Alejandro García. Tengo un pequeño problema, estoy tratando de sacarle el demonio a alguien pero no me esta saliendo.

—No, no, no, no puedo ayudarle con eso, eso es del departamento de quejas. Lo transfiero...— Hizo una pausa —Buenas tardes departamento de que— Fue interrumpido por un golpe que le dio Camilo —¡¿Qué te pasa imbécil?!

—¿Ramiro?— Pregunto alegre el de rizos.

—Pues si, ni modo que el demonio... ¿Porqué estoy en un círculo de sal?— Pregunto con desconcierto.

—Larga historia— Respondió el Madrigal.

Gruñidos se hicieron presentes nuevamente, el verdadero demonio había vuelto.

—¿Porqué no sirvió? La sal aleja a los demonios— Se pregunto a si mismo el García.

—¡Porqué es brujería satánica!— Exclamaron los Dumont al unísono. Los demás los miraron.

El Don De La Magia [Camilo Madrigal X Tú]Tahanan ng mga kuwento. Tumuklas ngayon