Capítulo 11

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-¿Seguro que sabes lo que haces? -Pregunté a Elliot por milésima vez.El ruido de los motores alistándose para la carrera,todos perfectamente alineados ... Me ponía más nerviosa de lo que debería.


-Deja de preocuparte tanto -Respondió éste,también por milésima vez.No se notaba irritado a pesar de mi insistir.Sin previo aviso colocó una de sus manos sobre las mías,perfectamente entrelazadas en mi regazo,y les dio un ligero apretón.


Al notar mi fuerte rechazo ante su acto la quitó con lentitud,para no lucir brusco,y me dedicó una sonrisa.Ese fue el último momento que pasó lento de esa noche.Entonces una chica al costado de la carretera movió la bandera que tenía en sus manos y el impacto de la rápida salida me arrojó con fuerza sobre el asiento.Por un pequeño segundo agradecí que,a pesar de todo,le haya hecho caso a Elliot y me haya colocado el cinturón de seguridad.


No sabía muy bien qué esperar,qué hacer.Me sentía distante a aquel lugar,a pesar de estar viviéndolo en carne propia,era como si todo lo estuviera observando cual narrador omnisciente detrás de un cristal.Observaba a Elliot con el ceño fruncido prestar atención a la carretera,el velocímetro subía de forma consideradamente veloz,y yo solo me arrinconaba en el asiento,cerca de la puerta,deseando que todo pase.Como un pequeño bebé dentro de una pesadilla de la que es incapaz de salir.


Me quedé allí algunos minutos,con mi mente en blanco,solo observando la negrura que se extendía en los extremos de la carretera,oculta de los faros de los vehículos.Luego un gran estruendo sacudió el carro desde la parte trasera y algo dentro de mi se despertó.Miedo.Adrenalina.Todo junto en una sensación que nunca sería capaz de describir.


Estaba segura de que íbamos primero ya que los faros de nuestro auto no alumbraban la parte trasera de otro.Observé por el retrovisor qué había sucedido con respecto al golpe que acabábamos de recibir,¿era eso algo normal? Quizás si aquí,porque Elliot ni siquiera se inmutó al respecto.


-¿Qué fue eso? -Pregunté,lo más tranquila que pude.


-Solo quieren que perdamos la delantera,no es nada.¿Qué vehículos ves?


Volví a girarme para observar el retrovisor y le dije tanto como lograba observar.Un auto rojo que lucía como un clásico luchaba con una camioneta azul para ver quién nos quitaba la delantera,y aún más atrás,lograba ver algo que lucía como un Mercedes amarillo canario.


-Lo estás haciendo bien,no te pongas nerviosa -Intentó tranquilizarme el castaño de gran sonrisa a mi lado,que aún no quitaba la vista de la carretera.Mejor para mi. -Busca dentro de la guantera,allí debería haber un mapa.


Tal como me lo indicó lo obedecí,sin tardar en encontrar lo que me había dicho.Ya no tenía miedo,mis manos apenas temblaban y hubiera jurado que era por la emoción del momento.Era extraño,nunca me había sentido así.Era un sentimiento incontrolable de excitación,libertad y adrenalina infinitos.


-Muy bien,nosotros estamos en el camino rojo ... -Recitó,de memoria,ya que ni siquiera le había dirigido una mirada al mapa -Dime más o menos por dónde crees que estamos.


-Comenzamos en el kilómetro 23 -Comencé a decir,más para guiarme a mi misma que para comunicarle algo al oji-miel -Según me dijo Drew,esto termina en el kilómetro 145,sin embargo el camino en su completo tiene casi 300 kilómetros hasta que desemboca en una clase de barranco.Si vamos a 230 kilómetros ... ¡Lo tengo! Vamos por el kilómetro 65.

God help the girl (CLATO)Tempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang