Mimosa - Nadie sabe que te quiero

｢Extra II｣ - Inmovilizarlo contra la pared y besarlo

La sola idea de intimidar a un Ji Xinglan como él casi hace que a Yan Qiu le sangrara la nariz. Estaba casi en las nubes de la emoción.

No había manera de que no le gustara Lan Lan cuando estaba así.

Pero junto con la emoción, también había curiosidad por saber por qué Ji Xinglan lo había llamado aquí.

Lógicamente, el actual Ji Xinglan no debería saber lo que había sucedido aquí en el pasado.

¿Podría ser que hubiera provocado un efecto mariposa por haber iniciado el contacto con Ji Xinglan y burlarse de él?

Tal vez Ji Xinglan ya albergaba esos pensamientos, y cuando se burló de él, Ji Xinglan decidió hablarle.

Yan Qiu no podía molestarse en pensar en la razón. Lo único que quería hacer era inmovilizar a Ji Xinglan contra la pared y besarlo.

Sólo había pasado un día desde que se conocieron y ya lo extrañaba mucho.

Ahora estaba oscuro. Yan Qiu evitó al profesor que patrullaba y se arrastró por debajo de la valla para escabullirse de la escuela.

El taxi se detuvo frente al bar. El conductor vio el uniforme de Yan Qiu y dudó un momento antes de hacerle un recordatorio: ―Eres un estudiante, es mejor que no bebas.

Yan Qiu se bajó del taxi y dijo superficialmente: ―Bien.

La noche era el momento más concurrido de los bares, pero él no había venido a beber.

Beber no era divertido. Lan Lan era la diversión.

Aceptar venir aquí hizo que Yan Qiu sintiera que estaba haciendo algo malo. Así que se bajó la gorra y cruzó la calle para llegar a la parte trasera del bar. Miró hacia el oscuro callejón, pero no pudo ver a nadie dentro.

Así que sacó su terminal para enviar un mensaje a Ji Xinglan.

[Yan Qiu: Estoy en la puerta trasera del bar.]

[Yan Qiu: ¿Dónde estás? ¿Estás jugando conmigo?]

En el momento en que terminó de enviar su mensaje, Yan Qiu levantó la vista y se dio cuenta de un coche aparcado en el lado opuesto de la carretera.

Le resultaba familiar la matrícula de ese coche. Era el coche de Ji Xinglan. 

Justo cuando entrecerró los ojos y quiso ver si había alguien en el coche, una mano se extendió por detrás de él y le cubrió los ojos.

Inicialmente aturdido, Yan Qiu pronto se calmó.

Olió la refrescante fragancia de la persona que estaba detrás de él. Era el aroma de Ji Xinglan. Mantuvo los ojos de Yan Qiu cubiertos y se pegó a su espalda sin moverse.

Incluso a través de sus ropas, Yan Qiu podía sentir claramente los latidos irregulares de su corazón.

Yan Qiu se rió y bajó su mano, luego giró su cabeza y dijo: ―Joven Maestro Ji, ¿no estás actuando como un niño? 

Al girar la cabeza, Yan Qiu vio efectivamente el rostro que anhelaba, y su sonrisa creció.

En cualquier caso, esto era un sueño. Así que Yan Qiu no tuvo que preocuparse por nada más. Decidió simplemente agarrar a Ji Xinglan y sin importarle ningún transeúnte, simplemente lo inmovilizó contra la pared y lo besó.

El actual Yan Qiu no era mucho más bajo que Ji Xinglan. Podía acercar su rostro con facilidad y, cuando apoyaba las manos en la pared, se veía dominante. Saboreó meticulosamente los labios suaves y ligeramente fríos de Ji Xinglan.

Yan Qiu sabía que Ji Xinglan estaba enamorado de él y pensó que debía dejar que se divirtiera un poco.

No estaba satisfecho ni siquiera después de haber robado el primer beso de Ji Xinglan. Yan Qiu comenzó a desnudarlo. Extrañaba los días en que podía abrazar a Ji Xinglan para dormir.

Mientras tiraba de su ropa, alguien pasó por allí. Yan Qiu se dio cuenta de que, aunque fuera un sueño, no era apropiado que empezaran a actuar de forma salvaje en la calle. Así que arrastró a Ji Xinglan de vuelta al coche.

En el momento en que cerró la puerta, el ruido del mundo exterior también se apagó. En el estrecho coche sólo quedaban sus respiraciones y sus latidos, junto con el creciente calor.

En el asiento trasero, Yan Qiu y Ji Xinglan ya eran un desastre de miembros. Sus ropas tampoco estaban en mejor estado. Puede que el actual Ji Xinglan no tenga ninguna experiencia, pero sigue siendo tan feroz como un cachorro de lobo. Tiró de la camisa de Yan Qiu, le chupó el cuello y le dejó marcas.

Aturdido, Yan Qiu sintió que el sueño avanzaba hacia el contenido R-18. Entonces empezó a preguntarse si estaba teniendo un sueño húmedo.

Cuando vio que Yan Qiu lo abrazaba por su propia voluntad, Ji Xinglan se sintió un poco desconcertado.

¿Por qué Yan Qiu era tan apasionado?

Todavía recordaba que Yan Qiu era bastante inexperto cuando lo besó ese día. ¡No tenía sus habilidades actuales!

... ¡¿De quién aprendió?! 

. . .

Cuando Yan Qiu fue inmovilizado, gruñó y sintió que algo iba mal.

No podía derrocar a Ji Xinglan en absoluto. Cuando lo besó hace un momento, fue para dejarlo probar, pero este tipo de repente se volvió imparable como una inundación. Parecía que quería tragárselo entero.

Era completamente diferente a la reacción de sorpresa que pensó que tendría.

En su aturdimiento, se dio cuenta de que ya no tenía control sobre la situación, y se sintió un poco frustrado por su posición pasiva. Oyó a Ji Xinglan preguntar: ―Bebé, ¿no bebiste? 

Cuando escuchó eso, Yan Qiu sintió de repente que había algo extraño en Ji Xinglan, especialmente cuando lo llamaba 'bebé'. El cachorro de lobo frente a él se superpuso de repente con el rufián experimentado que conocía.

La mirada de Yan Qiu cambió y se puso inmediatamente en alerta. ―¡Qué demonios! ¡¿Ji Xinglan?!