Mimosa - Nadie sabe que te quiero

C071 - Caso resuelto

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Esa noche, mientras Ji Xinglan no estaba, Xie Yu finalmente tuvo la oportunidad de estar a solas con Yan Qiu. Se sintió como si fuera un humilde vecino de al lado que sólo podía engañar tranquilamente a su amante casada mientras su marido no estaba en casa. Ahora que por fin tenía la oportunidad, quería estar junto a Yan Qiu.

Yan Qiu movió sus libros y se sentó en el escritorio vacío al lado de Xie Yu, diciendo que quería estudiar juntos. Sin embargo, sólo hablaron entre ellos durante toda la sesión de autoestudio. Su papel del examen de prueba estaba en blanco, y ni siquiera escribieron sus nombres.

Sun Mang no vino a observarlos hoy, así que todos hicieron sus deberes, jugaron a las cartas o charlaron. El ambiente era tan animado que estuvieron a punto de destrozar el local y notificar a su maestro de clase.

―¿Quieres jugar al póquer chino? Me faltan dos jugadores.

Bai Yuanyuan había terminado felizmente de maquillarse. Pensó que Yan Qiu se había acercado porque quería jugar con ella, así que sacó una baraja de cartas del cajón de su escritorio.

Los naipes eran cartas que se distribuían en las calles. Había un anuncio impreso en la caja y, por lo que parece, faltaban algunas cartas.

Pero estaban matando el tiempo, así que algo era mejor que nada.

Una vez que Yan Qiu aceptó jugar, Bai Yuanyuan barajó la baraja y distribuyó las cartas mientras hablaba con Yan Qiu y Xie Yu. Había oído hablar de una nueva historia de fantasmas, así que se lo contó porque sabía que él era tímido.

Parecía que en todas las escuelas había rumores de que la escuela estaba embrujada.

Bai Yuanyuan se desvió del tema y dio una vívida descripción de un secreto en el dormitorio de las chicas.

―¿Sabes por qué sólo hay siete dormitorios en nuestra escuela? 

―¿Por qué? ¿No son suficientes siete dormitorios? ―Xie Yu no sabía que estaba contando una historia de fantasmas. Simplemente apoyó el codo en la mesa y se inclinó hacia adelante. Su expresión de curiosidad mostraba que estaba siendo un buen público.  

Los árboles fuera de la ventana se ocultaron en una noche interminable y se convirtieron en una sombra aterradora, y aullidos silbantes y extraños ruidos de llanto. El susurro de las hojas y las sombras oscilantes de los árboles insinuaban como si hubiera algo escondido en la oscuridad.

Yan Qiu tomó el vaso de su mesa y tomó un sorbo mientras miraba las cartas en su mano, escuchando su conversación.

―No es un problema si hay suficientes dormitorios. Sabes cómo se distribuyen nuestros dormitorios, ¿verdad? ―Bai Yuanyuan golpeó la mesa con los nudillos y puso una expresión profunda. ―Los niños se distribuyen en función de si son alfas y omegas, y viven en los dormitorios 2, 4, 6 y 8. Las niñas se distribuyen en los dormitorios 3, 5 y 7.

Cuando dijo esto, Yan Qiu descubrió que algo andaba mal.

Las niñas y los niños podían ver los dormitorios de los demás. La última vez, tanto Xie Yu como Yan Qiu se quedaron en el Dormitorio 2. Sin embargo, frente a ellos estaba el Dormitorio 3, un dormitorio de niñas.

Los dormitorios 3, 5 y 7 se organizaron en secuencia, pero mientras que un lado del dormitorio 3 era el dormitorio 5, el otro lado era una cancha de baloncesto.

Menos de la mitad de la clase se quedó en la escuela para la sesión de autoestudio, por lo que muchos de los asientos en el aula estaban vacíos, dejando el aula desolada.