Extra: Elliot y Nessa

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Llegamos a dónde Nessa y me senté a su lado, abrazándola.

—Es un maldito ese Catalino, eh —ella gimoteo en mi pecho, asintiendo —¿Quieres que demande la novela? —pregunte divertido.

Ella lloro mas de la cuenta y se tapó la pancita con su cobija de Mitsuya. Últimamente no la soltaba, incluso prefería dormir con esa cosa a qué conmigo.

—¿Mamá ya está por venir? —pregunta.

—Si, dijo que vendría en una hora.

—Nessita, deberías comer tu pollo ese frito —dice Adam, acariciando su vientre —. ¡Oh, dime quién será tu tío favorito, ¿quién?! ¡Cuchi, cuchi, cuchi!

Los tres reímos por causa de Adam, fue en ese momento cuando tocaron el timbre. Escuché a mi antigua niñera, Amanda, ir a abrir la puerta.

—Joven Elliot, sus hermanos están aquí.

—¡Elliot-ta! ¡Mi hermanito! —Elian me dió un beso en el cabello y me apartó para acostarse en el sofá junto a Nessa y acariciar su estómago —. Ay que cosita tan bonita, soy yo, tu tió favorito.

—¡¿Que?! ¡Eso sí que no! —alega Adam.

—Idiotas, yo seré su tío su favorito —interrumpe Erick.

El menor de un manotazo apartó a Elian de ahí y se recostó en el pecho de la pelirroja, haciendo una mueca de comodidad y poniendo una mano en su estómago.

—Tengo dieciséis, soy el bebé de la familia —dijo con una sonrisa pícara y mirándome muy retador.

Solté un gruñido y le aventé un cojín en la cara. Yo sabía bien que el muy ingrato tenía un crush con Nessa, y se aprovecha de ser el "menor" para abrazarla cada que puede y ponerme de malas.

—¡Ya cumpliste diecisiete!.

Nessa soltó una carcajada y acaricio el cabello castaño de Erick.

—Dejalo, aún es un bebé —replica con una voz melodiosa.

—Maldito —escupo, irritado.

Empezamos a alegar entre todos por causa de Erick, que no nos dimos cuenta de algo.

—Elliot...

Volteé a ver a Nessa, quién tenía un rostro perplejo.

—¿Te sientes bien, pecosa? —me acerqué a ella rápidamente.

Erick a su lado la ayudo a incorporarse al igual que Adam. Un líquido se escurrió del sofá; Levantamos la vista lentamente hacía el estomago de Nessa, entonces nos dimos cuenta de algo.

—¡AHHHHHH, EL BEBÉ YA VIENE! —gritaron Adam y Erick, agarrándose el rostro con ambas manos.

—¡¿Cómo te sientes?! —Erick la tomo de la mano y la ayudo a sostenerse.

—Siento... Siento que se mueve —respondió asustada.

—TRANQUILA, NO TE ASUSTES —le dije a ella, tomándola de los brazos.

El amor es Gris [Libro #1 Completa ✓]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora