𝐛𝐥𝐮𝐞 𝐞𝐲𝐞𝐬 - 𝐣𝐞𝐫𝐞𝐦𝐢𝐚𝐡 𝐟𝐢𝐬𝐡𝐞𝐫

1 | Comienzo

Me encontraba terminando de guardar mi ropa en la maleta, ya que dentro de poco entraría mi madre a avisarme que ya nos vamos.
Todos los veranos vamos a Cousins, ahí está la mejor amiga de mi madre, Susannah, es como mi segunda madre, lo que suena raro siendo que uno de sus hijos me trae loca desde siempre.

Termine de empacar y me acosté en mi cama mientras tarareaba la canción que sonaba, enchanted de Taylor swift, cuando de repente siento como se hunde una parte de mi cama, al levantar la cabeza me encuentro a una Taylor sonriente.

— Cuanto te voy a extrañar Brina -dijo sonriendo mientras me miraba.

—Taylor, nos vamos a ver en unos días, recuerdas? es mi cumple -dije acomodándome a su lado para verla.

—Oh claro que lo recuerdo, 16, vamos a poder ir a festivales solas, por fin -gritó riendo.

—Cállate -dije
contagiándome de su risa y tapándole la cara.

Taylor era mi mejor amiga, bueno, también era amiga de Belly, mi melliza.
Taylor y yo nos conocimos un poco antes y nos hicimos mejores amigas al instante, Belly se unió a los pocos días.

Mi melliza entro a mi habitación con una sonrisa.

—Mamá dice que ya nos vamos -dijo y empezó a tararear la canción que había de fondo mientras se sentaba en el suelo.

—Estoy lista -mire a Taylor por última vez y la abracé.

—Nos vemos pronto -dijo y abrazó también a Belly.

❀ ❀ ❀

Estábamos ya en el coche de camino a Cousins, Belly y yo contábamos a todo pulmón , mientras Steven, nuestro hermano mayor nos decía que nos calláramos, lo cual no iba a ocurrir, Belly y yo amábamos cantar en el coche, era por así decirlo nuestro momento de cantantes.

—Este año quiero que ayudéis un poco en la casa, ya sabéis, recoger los platos y no solo el tuyo Steven, también el de tus hermanas, lo mismo os digo —dijo mamá mirándonos, yo solo me dediqué a asentir al igual que Belly.

—Mamá, tienen gente que limpia en la casa para que necesitas que- fue interrumpido por mi madre que le pego desde el asiento trasero, lo cual nos hizo reír.

Hicimos una parada en una tiendita, Belly y yo fuimos rápido a las papas, las abrimos y comimos un poco, el dependiente se quedó mirando a Belly, cosa que me hizo sonreír y darle un codazo para que se diera cuenta.

—Hola — dijo el , yo mire a Belly y le guiñe un ojo mientras le daba mis papas y volvía al coche.

un rato después volvió con mamá y entraron al coche, mire a Belly intentando deducir por su cara que había pasado pero ella solo me hizo un gesto de que después me contaba a lo que yo sonreír y mire por la ventana.

Habíamos llegado, estábamos en casa, sentí el aroma de la playa y crema solar, el mejor olor del mundo, nada se puede comparar al olor de la crema solar.

Al primero que vi fue a él, Jeremiah Fisher, el chico que cada verano hacía que me gustara más y más.
Lo vi saludando a Steven pero apenas se alejó de él me miro con sus tan preciosos 𝗼𝗷𝗼𝘀 𝗮𝘇𝘂𝗹𝗲𝘀 y sonrisa perfecta.

—Hola —dije con una gran sonrisa mientras lo tenía delante.

—Hola? —contesto mientras me abrazaba y me daba vueltas, los dos reímos, lo había extrañado, mucho, demasiado se podría decir.

—Sabri no sabes cuanto te extrañe — dijo mientras caminábamos hacia Steven y Belly, que estaban saludando a Conrad.

—Deja de llamarme así, sabes que no me gusta — le dije tapando su boca.

Nos acercamos y abrace a Conrad, siguió el abrazo mientras me despeinaba, cosa que siempre hacía.
Cuando nos separamos mire a Steven que estaba susurrándole algo a Jeremiah, sabía perfectamente que era, mire a Belly intentando decirle que saliéramos corriendo pero fue muy tarde.

—Yo creo que es hora del chapuzón de las hermanas B —dijo steven mientras nos agarraba de los brazos a mi y a Belly.

—No Steven por favor ya estamos mayores —decía Belly mientras Conrad sujetaba sus pies.

—No creo que estemos tan mayores —rio Jeremiah mientras hacía lo mismo con mis pies y nos llevaban a la piscina para tirarnos.

❀ ❀ ❀

Había subido a mi habitación después de intentar secarme todo el pelo pero fue un fracaso, al entrar vi a Jeremiah acostado en mi cama mirando al techo, reí al verlo así, era la imagen mas tierna que he visto hasta ahora.

—Estas aquí, por fin, vamos a la playa — dijo agarrando mi mano y acercándome un poco a él.

—Jer tengo que ordenar y muchas cosas que — me interrumpió poniendo su mano en mi boca mientras negaba con la cabeza.

—Llevo esperando mucho para ir a bañarme contigo, por favor —dijo alargando la o y haciendo un pequeño puchero, cosa que hizo que me derritiera y aceptara.

—Bien, bajo en 5 minutos —el asintió y se fue con una sonrisa de mi habitación. 

Al llegar a la playa Jer y yo hicimos una carrera, obviamente gane ya que me adelante pero eso no es lo importante, lo importante es que pase tiempo con Jeremiah, el y yo, y nadie más, disfrutamos de nuestra compañía y la de las olas.
Era divertido estar con el, me hace sentir bien y feliz.
Describir como me hace sentir Jeremiah es fácil, Paz, una increíble y preciosa Paz.

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