OMEGAS SALVAJES

CAPITULO 34: DOS MÁS AL VIAJE HACIA LA FRONTERA

- Quien te da el derecho de tratar asi a mi hijo He?! - dijo con coraje, el otro apenas y balbuceaba - Escuchame bien estupido intento de alfa bueno para nada... vuelve a insultar a mi hijo o a cualquier otro omega y lo último que verás en tu repugnante y asquerosa vida será mi espada atravezando tú mugrosa garganta!! - dicho eso solto al alfa que cayo como peso muerto quedando inconsciente y con los pantalones mojados, tomo unas cuantas respiraciones para calmarse y voltear a mirar a su hijo que consolava a los cachorros como toda una madre, miro a los plebeyos que rápidamente bajaban la mirada al sentir esos ojos azules posados en ellos, una vez ya mas calmado se dirige nuevamente donde su grupo - Continuemos... no perdamos más tiempo con estas pestes - dijo casi gruñendo sin asustar a los pequeños, los cuales uno de ellos fue cargado por Monoma y el otro por Izuku, el bicolor trago grueso y aclaro la garganta para apaciguar el ambiente

- Hay que seguir - los demás asintieron y siguieron su camino dejando una gran tensión en el ambiente

Los pequeños no decian nada estaban calmando los temblores de sus pequeños cuerpos aspirando el suave aroma maternal que desprendían los omegas, caminaron por un buen rato siguiendo al alfa bicolor, los omegas miraban de vez en cuando a los cachorros, se los notaba muy mal cuidados, sus omegas internos exigían cuidar a los pequeños y para ellos no era problema adoptar cachorros siempre y cuando los pequeños quieran estar con ellos. El sol empezaba a caer cuando llegaron a una posada, una casa sejante a una mansión mediana, se acomodaron en los cuartos los cuales habían cuatro camas para una persona, se acomodaron de dos omegas con dos betas o alfas. Izuku le tocaba comapartir cuarto con Denky, Kirishima y Katsuki aun así llevo a los dos cachorros con él. Ya dentro los pequeños se aferraban a él, tenian miedo de los dos alfas oji-escarlatas que estaban en el cuarto, Denky le ayudo a asearlos y vestirlos con ropa que le hicieron comprar a Katsuki, pero aun así no se le despegaron y ahora los tenía como pequeños koalas uno en cada brazo con sus cabezas escondidas en su cuello.

- Tranquilos pequeños - arrullo suavemente a los dos cachorros - Ellos no les haran nada... yo los protejo - la niña aun con duda lo solto un poco para mirarlo a la cara

- Porqué nos ayudaste? - pregunto de manera confidencial

- Porque ustedes son solo niños y no me gusto verlos sucios y desamparados - dijo dandole una pequeña sonrisa - Pero dime pequeña... cómo fue que terminaron en la calle? - miro como la cachorra puso una mirada de tristeza, se acomodó en el refaso del peliverde y puso su cabeza en el pecho ajeno

- Nuestra madre murió cuando eramos unos bebés, papá nos cuido por mucho tiempo pero por las deudas quedamos sin hogar, papá para darnos una vida mejor y poder dormir bajo techo se unió al ejercito para comprar una pequeña casa, pero - sus ojitos empezaron a lagrimar, el omega acarició su cabeza para calmarla - Pero un mes después se enfermo y murió... al no terminar de pagar la casa nos hecharon a la calle... desde entonces vivimos mal, sobreviviendo como podemos hasta que el señor de la panadería nos descubrió tomando sus panes - todos sintieron lastima por su situación

- Ya todo está bien pequeña - dijo abrazandola, aguantandose todas las ganas de llorar mares en ese instante - Ahora se quedaran conmigo deacuerdo? - el cenizo lo miró desconcertado pero la mirada severa del omega le hacia saber que no cambiaría de decisión, ambos cachorros lo miraron con ojos brillantes

- Lo dice encerio?... Usted nos cuidará? - pregunto el niño tímido mirandolo a los ojos

- Si... yo los cuidaré de ahora en adelante

- Deku - llamo el cenizo preocupado

- Ya dije Kacchan... estos cachorros necesitan alguien que los cuide como se debe así que, se quedan y seran mis cachorros... y tú, no me vas a llevar la contraria deacuerdo? - dijo sin pizca de duda en sus palabras, el alfa trago grueso y asintió, conocia bien al omega para saber que le bajaria el cuello si se comportaba hostil con los pequeños - Ahora oequeños díganme como se llaman?... mi mombre es Izuku Toshinori - los pequeños sonrieron en grande abrazándolo