💕CAPITULO 44💕

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— ¿Tienes evidencia para decir que lastime a alguien? ¡Ni siquiera sé quién eres!

Yibo sonrió, con una expresión sombría en su rostro

— Si no tuviera evidencia, ¿crees que atraparía a tu familia? Aunque pensaste que eras muy inteligente al usar un auto sin matrícula y vidrios polarizados, olvidaste que es fácil dejar pistas. Revise todos los videos que hay en la carretera y te atrape antes de que la policía lo hiciera, solo para poder divertirme contigo. A'Hao, trae esas cosas aquí.

Yibo agitó la mano y A'Hao le entregó una carpeta, la carpeta fue arrojada frente a Chen San, de ella se cayó una gran pila de materiales.

— Chen San, cuyo nombre real es Chen Dawei, es el tercer hijo de su familia. Es de la ciudad Y. Se unió a la banda Kun hace tres años. Hace un año, lo enviaron en secreto a la ciudad S para estar al acecho, fue contratado para asesinar a alguien, ¿verdad?

Yibo desenterró toda su información, Chen San estaba un poco asustado.

— ¿Cuál pandilla Kun? No sé de qué estás hablando.

La paciencia de Wang Yibo se agotó por completo, y lentamente se puso de pie, pateó su barbilla con los dedos de los pies.

— Bueno, ¿no quieres decirlo? Está bien, parece que Li Bowen te ha dado muchos beneficios. Eres realmente fiel a él, parece que tienes bastante coraje, pero... ahora estoy de mal humor, así que seamos francos. Vamos a empezar con este juego, voy a contar hasta tres, puedes elegir continuar callado o a tu esposa y a tu hijo. 

— ¡Tú!

Los ojos de Chen San se agrandaron, saltó hacia adelante para intentar agarrarlo, pero fue arrastrado por la gente detrás de él, pateando en el suelo y vomitando algunos bocados de sangre.

— 2... Está bien, A'Hao, llámalos para que lo hagan.

Wang Yibo ni siquiera contó 3, así que dio la orden.

A'Hao recibió la orden y se fue. Chen San estaba tan asustado que inmediatamente se levantó de un salto y abrazó la pierna de Yibo.

— Yo... ¡Lo diré! Aunque pertenezco a la Banda Kun, soy alguien sin importancia. En la pandilla, es imposible subir rápidamente, ¿Cómo tendría la oportunidad de hablar con el hermano Li Bowen?

Yibo entrecerró los ojos.

— A'Hao, hazlo.

— ¡Estoy diciendo la verdad! ¡En serio! El hermano Li Bowen no tiene idea de lo que hacemos en privado. Todavía está ocupado destruyendo y saqueando en la ciudad Y, ¡así que no puede preocuparse por personas como nosotros! Es un desastre aquí, así que prometí ayudar a otros en este tipo de negocios perversos. ¡Realmente no me atreveré la próxima vez! ¡Por favor déjeme ir!

— ¿Oh? Dime, ¿quién te contrató para este tipo de negocios perversos?

Wang Yibo lo miró con una sonrisa, sus ojos no mostraban ninguna emoción, la daga en su mano giraba alrededor del cuello de Chen San, si no prestaba atención, ¡perforaría directamente su aorta!

— Yo... no sé... sólo sé que es rico...

Chen San se estremeció de pánico.

— Él, él, él... no apareció nunca, solo me dijo que encontrara una manera de desaparecer a Build Jakapan, luego me dio cincuenta mil yuanes, ¡realmente nada más!

— ¿Ibas a quitar una vida por cincuenta mil yuanes?

Yibo se burló y la daga se acercó más.

— Realmente no tengo la paciencia para escuchar tus tonterías. Si no lo dejas claro, no me quites el tiempo. Ahora, tu esposa y tu hijo también te seguirán.

Una vez terminada esa oración, la daga apuñalo el dorso de la mano de Chen San, penetró en la carne y la sangre brotó instantáneamente.

— ¡Ah!

Gritó Chen San desesperadamente pidiendo piedad.

— Lo que dije es cierto. El hombre no salió del auto, pero pude vislumbrar el auto. Era un auto negro con el nombre de una familia, no puedo estar seguro si era Xiao o Diao...

Los ojos de Wang Yibo se encogieron instantáneamente.

— ¿Estás seguro de que pudo ser Xiao o Diao?

— ¡Yo estoy seguro! Debe ser uno de estos dos, pero realmente no recuerdo cuál es, ¡pero recuerdo como era! Puedo dibujarlo para ti. ¡Te ruego que me dejes ir!

Al final de la oración, los ojos de Wang Yibo se entrecerraron con severidad, sus puños estaban apretados y la daga fue pateada con fiereza, dicha daga término en el muslo de Chen San.

Con un grito doloroso ante él, Yibo se dio la vuelta y encontró un pañuelo blanco, se limpió las manos y le hizo una seña a A'Hao

— Encárgate, pero no lo mates.

A'Hao asintió y estaba a punto de hacerlo.

De repente, sonó el celular de Yibo, miró la pantalla, caminó rápidamente y respondió la llamada con entusiasmo.

— Hola, Jian Sun.

— ¡Oh, Wang Yibo! ¡Tu boca es demasiado estricta! He analizado el cabello que me enviaste junto con la sangre del pequeño. ¡Son padre e hijo! Ese niño es tu hijo. La compatibilidad del ADN es del 99.99% ¡tienes que enviarme un sobre rojo! Jajaja...

Tan pronto como dijo eso, Wang Yibo quedó atónito. Ya no podía escuchar el grito de Chen San detrás de él, sus dedos temblaron y el teléfono cayó al suelo.

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Gracias por leer😊😊 disculpen cualquier error.

ACTUALIZADO: 27-06-2022

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