💕YOU ARE MY LIFE💕

💕CAPITULO 42💕

El cielo se vuelve cada vez más oscuro, la puesta de sol cubre todo el cielo y el sol poniente del oeste tiño el cielo de rojo.

Xiao Zhan colocó el ramo frente a la lápida, se arrodilló y limpió la fotografía que había en el monumento con su manga. La foto en blanco y negro muestra a una mujer que se parece mucho a él, vestida con un suéter de cuello alto, con ojos largos y estrechos, la boca fruncida y sonriente, luce gentil y digna.

— Mamá, vine a verte.

Xiao Zhan tocó el rostro de su madre en la foto y sonrió.

— Sigues siendo tan joven después de tantos años, yo tengo treinta años ahora, estás a punto de convertirte en mi hermana, jaja.

Sonrió con fuerza, sus palabras se ahogaron en su garganta, no sabía cómo continuar.

— ¿Cómo estás? ¿Es suficiente dinero? Pensé en comprarme un suéter como el tuyo, pero no tuve tiempo de volver. No te preocupes, estoy bien. Sí, he estado haciendo una fortuna fuera estos siete años, así que no te preocupes por mí.

— Oh, por cierto, he dejado la casa Xiao ahora. No me preguntes por qué. De todos modos, me siento cómodo lejos de ellos. Sé que entiendes lo que quiero decir, así que no hagas preguntas en mis sueños.

El viento sopló las hojas e hizo un crujido, el ramo colocado frente a la lápida se balanceó. Yibo se paró detrás de él y no habló, en silencio encendió dos varillas de incienso y las colocó frente al monumento, luego se hizo a un lado.

— No te vayas.

Xiao Zhan tomó su mano, le dijo a la lápida.

— Mamá, traje a un amigo para verte esta vez. También sabes que me gustan los hombres, entonces, ¿Quién es él? No necesitas preguntar. ¿Te gusta lo que ves? Espero que te parece agradable a la vista, es tu nuera.

El viento continuó soplando y el ramo se balanceó cada vez más feroz, algunos pétalos volaron y cayeron sobre Yibo, como si lo estuviera saludando.

Los padres de Wang Yibo murieron demasiado pronto. Había estado en la compañía del hermano Zhou desde que eran pequeños. No recordaba a sus padres. Ahora, al ver a Xiao Zhan hablando con la lápida, su corazón está triste y ligeramente feliz.

Caminó y se puso en cuclillas lentamente, tomó la mano de Xiao Zhan y entrelazo sus dedos.

— Tía, mi nombre es Wang Yibo. He escuchado de ti muchas veces, pero al fin pude conocerte. Espero que sea agradable lo que ves. A pesar de que no soy tan guapo como tu hijo, al menos no soy feo. Si miras detenidamente, veras que hacemos una buena pareja. Me acercaré más a ti para que puedas ver mejor.

Wang Yibo dijo que realmente avanzó unos pasos, su rostro todavía tenía una mueca de desdén y la atmósfera era relajada.

No quería que el ambiente fuera demasiado triste, no quería que Xiao Zhan llorara. No se habían visto durante años. Entonces, ¿por qué deberían llorar cuando se veían? Deberían disfrutar de la compañía mutua.

Xiao Zhan se quedó estupefacto por su actitud, levantó la mano y le dio un golpe en la cabeza.

— ¿Qué te pasa? Te dije que te pusieras serio. ¿Cómo puedes saludar así a mi madre?

— Silb... ¡me duele! Me duele, Zhan, debes dejarme algo de cara frente a la tía. Es la primera vez que nos vemos, ¡debo dejar una buena impresión!

— Una buena impresión mi trasero, mi cara está perdida por ti.

Xiao Zhan se secó las lágrimas que se habían formado en sus ojos por la risa y continúo golpeando la cabeza de Wang Yibo mientras sonreía. Wang Yibo lloró pretenciosamente y se rio mientras lo golpeaban.