💕YOU ARE MY LIFE💕

💕CAPITULO 39💕

— ¿Quién... quién vino a una luna de miel contigo? Vine para comprar semillas.

Las orejas de Xiao Zhan estaban rojas, pero su rostro todavía estaba tranquilo.

— Está bien, entonces tú saliste a comprar semillas y yo vine a mi luna de miel. Yo no interferiré con tu compra, tú no debes interferir con que tome la mano de mi pareja.

Mientras decía esto, Yibo, sostuvo su mano con firmeza, sus ojos oscuros se entrecerraron, dejando en claro que no había lugar para la negociación.

«¿Podría este tipo ser más bribón?»

Xiao Zhan puso los ojos en blanco, pero esta vez no retiró su mano. Levantó la barbilla y dijo.

— Está bien, puedes sostenerla si quieres. Debo recordar lavarme las manos al regresar, tengo que poner jabón en ambos lados. ¿Conoces al apestoso Khan?

Wang Yibo se divirtió con la arrogancia del pavo real, ignorando a las personas a su alrededor, agarró la cabeza de Xiao Zhan y besó su frente.

— Claro, incluso tus uñas serán lavadas. ¿Qué más lavaras?

Xiao Zhan no habló, las comisuras de su boca estaban hacia abajo.

Las dos personas deambularon durante más de dos horas. Xiao Zhan había preguntado por algún campesino que se dedicara al cultivo de la houttuynia cordata, finalmente lo encontró viviendo en la ladera de la colina. Debido a que el clima de la ciudad Y es muy adecuado para el cultivo de houttuynia cordata, las plantas crecen mucho más fuertes que las de Qingyuan y el precio es muy bajo. Xiao Zhan eligió durante mucho tiempo y finalmente compró miles de plantas y cientos de semillas. Una vez que acordaron el precio, estuvo listo para hacer una transferencia bancaria.

Donde se encontraban estaba lejos del lugar donde se suponía que pasarían la noche. Wang Yibo le rento un carro a un granjero para poder volver. Tenía un mal presentimiento, pero no sabía cómo decírselo a Xiao Zhan, así que no menciono nada, pero su cara se veía diferente a la que había tenido mientras subían la montaña.

Xiao Zhan pensó que estaba cansado, así que no dijo nada más. Cuando llegaron a un banco, le dijo.

— Espérame aquí un rato. Transferiré el dinero y regresaremos al hotel.

El corazón de Wang Yibo latía cada vez más rápido, entrecerrando los ojos y mirando a su alrededor, estaba muy alerta.

Ha estado en diferentes situaciones a lo largo de su vida y su sentido del peligro es muy bueno. Observó atentamente a los peatones que iban y venían por la calle lateral, con la boca apretada.

«Algo anda mal»

Aunque la calle todavía está llena de gente, no es normal que haya tanta gente frente a un banco. Son las 8 de la noche, no debería haber gente pues solo los cajeros automáticos están funcionando.

Su corazón dio un brinco, en el momento en que Xiao Zhan salió del auto, casi instintivamente lo jalo.

— No te vayas, vayamos a otro.

Xiao Zhan no entiendo lo que pasa.

— ¿Por qué? Solo hay un banco aquí. ¿A dónde más iría?

Yibi no sabía cómo explicarle a Zhan. Su corazonada siempre era precisa y justo ahora le decía que ¡Xiao Zhan no debía salir del auto!

— No preguntes tanto, salgamos de aquí primero. ¿Has visto a la gente del otro lado? Algo no están bien, tenemos que irnos.