💕YOU ARE MY LIFE💕

💕CAPITULO 37💕

En solo unos días, Darren perdió peso rápidamente, su rostro estaba lleno de barba y lucía mucho mayor. Su apariencia vigorosa fue reemplazada por el uniforme gris de prisión. Esos ojos que una vez lo miraron con una mirada suave estaban desenfocados, ya no era ese Darren que solía conocer.

— Solo vine a verte.

Darren abrió la boca y le temblaban los dedos. Intentó con todas sus fuerzas que Xiao Zhan lo mirara en igualdad de condiciones por una vez. Quería estar a la misma altura y no sentirse inferior frente a su amante. Pero al final todavía estaba avergonzado y en una mala situación.

— Me están incriminando, créeme Zhan, ¡Xiao WenHan está mintiendo!

— Um

El rostro de Xiao Zhan estaba tranquilo como de costumbre.

— Te creo, pero los demás no te creen. ¿Todavía crees que diga que está mintiendo? ¿Crees que te vendrá a ver?

Esas palabras dejaron a Darren sin palabras, se cubrió la mitad de la cara avergonzado y luego dijo con voz ronca.

— Sí... tienes razón, debería haberlo visto antes, solo me odio a mí mismo por estar ciego. Al final, me odio a mí mismo por qué te dejé atrás...

— ¿Lo odias?

— ¡Lo odio!

Darren apretó los puños con fuerza.

— ¡Si es posible, realmente desearía estrangularlo y preguntarle por qué me trató de esta manera!

Xiao Zhan sonrió

— Si te encuentran culpable, no podrás salir por un tiempo. Te traje algo de ropa gruesa. Recuerda usarla cuando haga frío.

Darren miró fijamente el grueso abrigo en la bolsa y no pudo decir una palabra durante mucho tiempo.

Acarició la bolsa una y otra vez con el dedo, a través del cristal le temblaron los labios y las lágrimas cayeron por un buen rato.

— El único que quiere verme al final eres tú...

Xiao Zhan lo miró fijamente y frunció la boca.

— No vine a verte específicamente, pero no me alegraré si sé que no lo estás haciendo bien.

Mientras se levantaba lentamente, finalmente miró al demacrado Darren y dijo en voz baja.

— Me voy Darren. De ahora en adelante, ya sea que esté vivo o muerto, no quiero encontrarnos. Tengo algo que hacer. Me voy.

— ¡Espera un minuto!

Mirando que se alejaba de él, Darren sintió un dolor agudo en su corazón, deseando estirar la mano y agarrarlo, pero el maldito vidrio bloqueó su camino.

— ¡Zhan! Quiero pedirte una última cosa.

— Si me pides que te ayude a encontrar una salida, no tienes que hacerlo. No puedo ayudarte como un ciudadano cualquiera.

— No, quiero que me traigas algo, es lo último que te pediré.

Darren lo miró de cerca, sus ojos ardían como si estuviera decidido a hacer algo.

Xiao Zhan giró la cabeza y arqueó las cejas.

— ¿Qué quieres?

Darren dudó durante mucho tiempo, miró a su alrededor y descubrió que la policía no los estaba mirando y luego dijo con voz tranquila

— Solía ​​pensar que WenHan era una persona de buen corazón, así que creí todo lo que decía, pero no soy un tonto. Hay algo que te puede ayudar.

Respiró hondo y calmó sus emociones,

— ¿Recuerdas el accidente del Sr. Xiao hace siete años?

Al mencionar los eventos de ese año, Xiao Zhan inmediatamente se puso alerta.

— ¿Qué quieres decir?

— Al principio, recibí una llamada de Xiao WenHan pidiendo ayuda y fui directamente a su casa. En ese momento, tú y el Sr. Xiao fueron llevados al hospital. La policía estaba en el sitio inspeccionando. Vi a Xiao WenHan escondiendo un teléfono celular, cuando hablé con la policía no lo mencioné.

— ¡¿De qué estás hablando...?! ¿Teléfono celular?

Los ojos de Xiao Zhan se abrieron de repente.

— Sí, es un teléfono móvil.

Darren asintió con una expresión solemne.

— Estaba confundido por sus acciones en ese momento. Creía todo lo que decía y no lo cuestione. La policía lo envió al hospital. Cuando fui a acompañarlo por la noche, accidentalmente me topé con él quemando algo en el balcón. En cuanto me vio, tiró el contenido del brasero a la basura y se quejó de que le dolía la pierna y me pidió que se la frotara. Todos mis pensamientos estaban en él en ese momento, no le presté atención a lo demás. Al día siguiente fue a visitarlo. La enfermera que limpió el cuarto se acercó a mí y me dijo que había un teléfono móvil medio quemado en la papelera y me preguntó si lo quería conservar. Vi que era el que había escondido en ese momento, así que lo tomé.

— ¿Qué pasó después?

Le preguntó Xiao Zhan con calma. Darren sonrió con amargura.

— En ese momento, el teléfono móvil estaba roto y no se podía usar en absoluto. Traté de encontrar a alguien que lo arreglara, pero no lo arregle. Originalmente quería tirarlo, pero cuando pensé en lo nervioso que estaba Xiao WenHan por él, pensé en usarlo en un futuro. A tu familia no le agradó y pensé que podía usar ese teléfono para pedirle dinero a tu padre. ¿Quién hubiera pensado que la fiesta de su cumpleaños se volvería un desastre? Antes de que pudiera ir por él, Xiao WenHan ya me había puesto en el centro de detención.

— ¿Dónde está el teléfono ahora?

Xiao Zhan lo miró por un momento, sus palmas estaban empapadas de sudor.

— En la caja fuerte del banco, todavía hay varios planes de negocios y libros de cuentas que obtuve de Xiao WenHan. Siempre quise hacer mi propio camino, pero ya no importa.

Darren se rio de sí mismo y se sintió tan tranquilo por primera vez frente a Xiao Zhan. Este sentimiento le recordó su estado de ánimo cuando lo persiguió por primera vez, pero ya era demasiado tarde para todo.

— Sé que el Sr. Xiao te amó desde la infancia. Lo lastimaste por error y debes culparte en tu corazón, así que debo devolver este objeto a su dueño original, es mi última compensación para ti. Lamento haberte dejado, Zhan.

Xiao Zhan nunca pensó que las cosas llegarían a este punto, al ver a Darren escribir la contraseña de la caja fuerte del banco en el cristal, casi se le caen las lágrimas.

«Si no hubiera venido a ver a Darren hoy, ¿me hubiera perdido lo último que mi abuelo me dejó en vida?»

Darren lo había lastimado, pero decidió ayudarlo en el último momento.

Al irse, Darren no lo miró, no tenía rostro para pedir perdón.

Xiao Zhan respiró hondo y salió del centro de detención.

Afuera brillaba el sol y Wang Yibo lo estaba esperando en el auto. Cuando salió, estiró las manos y sonrió.

— Pavo real, ¿por qué eres tan lento? Te he estado esperando durante mucho tiempo.

«Quizá si haya luz en la oscuridad»

Xiao Zhan respiró hondo, sonrió, se acercó y abrazó al hombre frente a él con fuerza, sabía que este era un nuevo comienzo.

Debes apreciar a la persona que tienes delante, la persona a la que amas siempre te cuidará en silencio y te bendecirá.

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Gracias por leer😊