💕YOU ARE MY LIFE💕

💕CAPITULO 35💕

— Yibo-ge, todavía creo que este asunto es un poco arriesgado, en caso de que se descubran que el polvo blanco proviene de nosotros...

Antes de que terminara de hablar, fue interrumpido por un fuerte golpe en la puerta afuera.

Wang Yibo frunció el ceño y miró su reloj. Ahora eran las tres de la mañana y todavía estaba lloviendo mucho afuera.

«¿Quién estaría aquí a esta hora?»

¡Boom, boom, boom!

El golpe en la puerta se hizo cada vez más fuerte, la puerta temblaba con cada golpe.

Yibo guiñó un ojo y A'Hao se acercó para abrir la puerta, de un vistazo vio el cuerpo de Xiao Zhan empapado en la entrada.

— ¿Dónde está Wang Yibo?

Xiao Zhan interrumpió en la oficina y miró a su alrededor sin decir una palabra. Cuando Yibo escuchó el movimiento, salió de su estudio, cuando vio al recién llegado sus cejas se levantaron por la sorpresa.

— ¿Por qué estás aquí ahora?

¡Plop!

El fuerte sonido de una bofetada se escuchó en la habitación. Yibo no estaba preparado y fue abofeteado en la cara, con la boca abierta permaneció en su lugar, no podía moverse.

Los ojos de Xiao Zhan estaban rojos, se mordía el labio con fuerza, mirando a Yibo sin explicar ni una palabra, pero sus dedos estaban temblando.

Yibo presionó su lengua contra la mejilla herida, sus ojos eran profundos y miro a A'Hao.

— No hay nada para ti aquí, sal de aquí.

— Sí... Yibo-ge, yo...

A'Hao quería decir algo, sus ojos se dirigieron a Yibo y se quedó mudo. Salió apresuradamente de la habitación, no se olvidó de cerrar la puerta con fuerza.

Yibo miró a Xiao Zhan de cerca, con una expresión muy fea en su rostro. Durante tantos años, nadie se atrevió a abofetearlo en la cara. Si la persona frente a él no fuera Xiao Zhan, definitivamente le haría algo malo y feo a esa persona.

Tratando de contener sus emociones, respiró hondo y sin preguntar ningún motivo, tomó su mano y dijo

— Estás todo mojado. Entra primero.

Xiao Zhan obviamente estaba muy enojado. Levantó la mano y la tiró. Cuando vio el rostro indiferente de Yibo, su voz era inestable y dijo

— Wang Yibo, ¡¿estás loco?! ¿No planeabas contarme que habías hecho algo tan grande, hasta que la policía te torturara?

Yibo arqueó las cejas, sin expresión en su rostro

— ¿Lo sabes? ¿A'Hao te dijo?

Xiao Zhan se secó la lluvia de la cara, con los ojos inyectados de sangre, dijo.

— Si no fuera porque él me llamó por miedo a que pasará algo malo, ¿planeabas morir solo? Yibo, no seas así, los rencores que tengo con Darren y Xiao WenHan los resolveré yo mismo. ¿Por qué te mezclas en estos asuntos de esta forma?

Del cuerpo de Xiao Zhan goteaba agua, solo llevaba una pijama y pantuflas en sus pies. Después de unos minutos de estar parado en la puerta, un gran charco de agua se acumuló debajo de sus pies, sus labios comenzaron a tornarse morados por el frío, pero aún los mantenía apretados y miraba intensamente a los ojos de Yibo.

Yibo no podía verlo así, extendió la mano para quitarle la ropa, pero fue empujado.

— No importa si estas en la mafia, ¡quien toque drogas morirá! ¿Has pensado que en lugar de lograr incriminar a Xiao WenHan, seas atrapado tú? Ya fuiste un prisionero, ahora te mataran, ¿lo sabías?