A menos que...

—Él era muy lindo.  —Amelia juega con sus pies —. É-Él sí me quería de verdad. Él me iba a sacar de aquí, p-pero ella no q-quiso. 

Logan me mira incrédulo —. Uriah.

—Estaba obsesionada con él. —Amelia niega con la cabeza varias veces —. Él siempre venía aquí a verme. Y-Yo... —Sus mejillas se sonrojan y me mira con vergüenza —. Es la única persona que me ha tratado bonito ahí. —Apunta con la cabeza hacia la cama —. Y-Yao solo fue lindo conmigo cuando Azaria estaba aquí. —Señala su vientre.

—Un puto segundo. Uriah.  —Logan pone las manos sobre mis hombros. Amelia comienza a cantar la misma canción de cuna mientras se pasea por su cuarto —. ¿No entiendes lo que significa esto?

Trago saliva con dureza.

—Marina está demente, Uriah —dice en un murmullo —. Esos dos críos son hijos de Amelia. Azaria es de Yao —cuenta con los dedos —. Pero Alexei es de Charles. Se enamoró de Amelia, y Marina no lo soportó. Estaba tan obsesionada con él que decidió criar al niño como si fuera de ellos. ¡Está loca! 

—Amelia. —Llamo su atención. Gira sobre sus talones para verme —. ¿Quién es el papá de Alexei? 

Se pone de todos los colores.

—Charles —susurra demasiado bajo.

Logan me mira histérico —. ¡Está loca!

—Oh, más que eso.

Los dos damos un salto en seco cuando entra por la puerta cojeando. Tiene la mano izquierda contra la herida abierta que continúa sangrando, pero al parecer su adrenalina y rabia son mucho más fuertes que el ardor de tremendo corte. Su barbilla está manchada de rojo, y sus ojos azules son negros. Me entrega una sonrisa digna de estar en una puta película macabra. 

—Voy a tener lo que quiero. Por las buenas, o por las malas —replica. La manera en que su boca se mueve provoca que Logan tiemble a mi lado. Las expresiones en su rostro son vívidas —. Todo lo que siempre he querido es tener una familia. No me interesa el poder. Pero si es lo que se necesita para obtener lo que quiero, pues que así sea. 

Amelia, como un pequeño cachorro asustado, corre hasta el rincón de la habitación para hacer todo el esfuerzo de desaparecer. Marina ríe al verla, amando el poder que mantiene sobre la pobre chica, y ladea la cabeza con la mirada fija en ella. 

—Se interpuso en mi camino —sigue diciendo. Endereza la espalda —. Yo era una mujer feliz en una relación. Charles y yo éramos felices. Íbamos a tener una familia juntos.

—Él nunca te amó —me sorprende Amelia al hablar.

—¡Cierra el pico! —Marina le grita. Observo por el rabillo del ojo la forma en que el cuerpo de Andréi comienza a moverse —. Charles me amaba. No habría estado en una relación conmigo durante tanto tiempo si no lo hubiera hecho. Tú, como la pequeña zorra que eres, te interpusiste entre nosotros.

—Él siempre decía que estabas obsesionada con él. Yao le pidió como un favor estar contigo. —A Amelia le tiemblan terriblemente las manos —. P-Pero él me amaba. Yao también me amaba. No te gustó eso.

—¿De verdad crees que estás en la mentalidad correcta para decir algo? No eres más que una puta loca. Perdiste la cabeza hace años, y disfruté verte pudrirte en este lugar. —Marina se ríe —. Alexei es mi hijo, haya crecido dentro de mí o no. Él es mi bebé.

—¡No, no lo es!

Amelia espeta para mi sorpresa. Su colapso mental es lo suficientemente fuerte como para querer golpear a Marina. Envuelvo mis brazos alrededor de su cintura para evitar que se lastime. Aunque Marina se está desangrando, no dudo que sea lo suficientemente fuerte como para matar a Amelia en un abrir y cerrar de ojos.

Tinieblas Where stories live. Discover now