"JACINTO PÚRPURA..."
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UNA ADVERTENCIA
-Esto puede contener blasfemias, spoilers, sangre, angustia, sangre y gramática incorrecta.
No soy dueña de esta historia, es propiedad de Ken Wakui. tampoco me pertenece la historia o los oc eso le pe...
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Ayer, el chofer de los hermanos haitani llevó a rena junto a su madre.
Ella estaba llorando sin parar. Rogando a su madre que la devolviera con sus dos hermanos mayores.
Por suerte la mujer haitani, consoló a su hija, diciéndole que todo iba a estar bien. Y que Ran y Rindou pronto la recogerian.
Justo como antes. Pero esta vez, es imposible que Ran y Rindou vuelvan a recoger a su hermana pequeña.
Rena no podía entender por qué sus dos hermanos mayores cambiaron tan repentinamente.
Cuando la dejaron, por lo que rena podía recordar, ran y rindou tenía la sonrisa más brillante que jamás pudo ver.
Le dieron muchos besos por toda la cara y le dieron el abrazo más fuerte que pudieran dar.Cómo pueden cambiar y dejar de amar a Rena tan fácilmente. Como si sus recuerdos felices no fueran nada para ellos.
¿Cómo pueden abandonar a su preciosa hermanita que significaba el universo?
para ellos antes?...
Y ahora acostada en su cama. Rena miraba sin pensar hacia el techo mientras su corazón se apretaba cada segundo que pasaba.
"¿Señorita?" Una repentina voz suave dijo.
Rena se quedó mirando la puerta esperando que la persona que la estaba llamando la abriera. A diferencia de antes, ella siempre respondía en un tono muy suave y educado.
Después de unos segundos. La puerta de Rena se abrió lentamente, revelando a una sirvienta con una pequeña sonrisa plasmada en su rostro.
"su mamá le está llamando. Dijo que ya tiene que desayunar"
La criada habló en un tono muy suave y tranquilizador.
Rena solo asintió con la cabeza en respuesta y lentamente se levantó de la cama.
Siguió a la sirvienta por detrás sin mirar directamente y solo bajó la cabeza con su expresión hosca.
Está cansada, pero en el fondo, todavía tiene esperanza y todavía quiere luchar por sus dos hermanos mayores que ya la abandonaron.
Lentamente estaba matando a rena, no solo mentalmente sino también físicamente.
Sin embargo, Rena siempre se decía a sí misma que estaba perfectamente bien y que aún podía continuar, tratando de recuperar lo que ya quedó en el pasado.
"¿Queriño?" Dijo una voz femenina.
Rena miró lentamente hacia la dirección de la voz y vio a su madre con una expresión de preocupación.
"Toma tu desayuno ahora" agregó la madre de Rena a lo que la pequeña asintió con la cabeza y fue a sentarse al lado de su madre."¿Puedo salir, mamá?" Murmuró Rena, preguntándole a su madre sin mirarla una sola vez mientras desayunaba.
