Capítulo 12

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[TN]

Habían pasado ya unos días desde que lo que sea que teníamos Milo y yo, comenzó. Una relación, no, claro que no podía ser llamada así, más que la siempre hemos tenido y que estaba cansada de saber cuál era. Cansada de repetirlo en mi mente en cada uno de nuestros encuentros. Porque después de eso, nada era diferente, terminaba de tocar mis labios con los suyos, me sonreía, acariciaba mi mejilla, tomaba mi mano y nos íbamos del gimnasio.
Él iba a los brazos de Mariam y la besaba con un sentimiento diferente.

Amor...aquello que yo alguna vez espere.

Y si, cada que los veía, me sentía mal por ella y por mi, porque era imposible que de repente la palabra «traición» rebotara en mi cabeza. Pero, ¡Joder! cuando estábamos los dos, sin nadie más a nuestro alrededor, era inevitable no caer entre sus labios y sus manos acariciando mi cuerpo. Haciendo que entre momentos lo odiara para luego mi cerebro me recordara:

«Sabes que no lo odias, no te engañes. Tú lo quieres, lo...amas» «y por eso eres tan estúpida»

— ¿Cómo va ese remordimiento querida?

—Gracias Andy—sonreí falsamente y agradeciéndole de la manera más sarcástica que existía—tu siempre tan tierno y haciéndome sentir bien.

—No tienes nada que agradecer preciosa, para eso estamos—me beso.—uy, cierto. La exclusividad—se burló.

—Idiota.

—Pero sexy—me guiño un ojo— ¿Cómo es que lo permites? Te van a regañar y a castigar—movió sus cejas—o es que acaso quedaron de acuerdo en que serviría para aparentar.

—Mirá, no hemos sacado ese tema, aunque la que debería de hacerlo soy yo. El día en que me dijo eso, no procese sus palabras. Exclusividad mi trasero, es obvio que no hay eso. Además, no es como que me ande besando con cualquiera, esto es algo que tú haces y que haga lo que haga, se que no podré quitarte esa costumbre. Igual te vale y te valdría mierda esa palabra.

—Bueno, mi hermano saldría perdiendo en ese tema, tú lo has dicho. Es obvio que no la hay, al menos de parte de él. Tiene novia, no lo veo como algo justo.

—Yo pensé lo mismo cuando caí en la cuenta—suspire.

Con tristeza y frustración.

No había querido hablar de ello con él, porque se que de alguna manera terminaría peleando con Milo, y no quería. No quería arruinar esto que hacíamos, aunque una parte sabía que que podía ser la mejor opción.
Era injusto, claro que lo era. Él tenía novia, yo no, pero, había una persona que estaba un poco tonto y tenía la costumbre de besarme, así lo golpeara.
No tenía derecho en prohibirlo, porque no éramos nada, nuestro título no era más que el de “Amigos. Mejores amigos”. Y aún así, no decidía con quién podía darme un beso, aunque era claro que tenía razón en algo.

Los únicos que beso que yo anhelaba, eran los de él y nada más.

La exclusividad venía quedando como una sobra entre nosotros. Pero era tan tonta, que lo podría cumplir. Hubo unas veces en que se lo dije a Andy, él solo se reía y negaba con su cabeza, a veces burlándose como su comentario anterior y volvía hacerlo y la verdad, ya era igual. Una parte de mi, me gustaba hacer enojar a su hermano, sobre todo cuando esos pensamientos venían a mi.

"Amigo" [Milo Manheim Y Tú]Where stories live. Discover now