Karla, la amiga de mi hermana.

El entrenamiento

"Estoy lista" escucho antes de tan siquiera abrir los ojos. Es Karla, reconozco su hermosa y femenina voz.

Abro los ojos y pregunto: "Lista?"

"Si, ya quiero que me enseñes todo sobre el calzoncillo chino" dice ella muy emocionada y algo excitada.

"Bueno, pero no te emociones tanto, tenemos mucho que hacer antes que eso" le explico.

Ella se pone triste. "Anda, ¡tenemos que hacerlo hoy, y ya!" dice ella forzándome a levantarme. 

No me quiero levantar, ya saben porque. Tengo una erección mañanera. No quiero que se de cuenta.

"Bueno pero, primero ve a traerme algo de desayunar" Le digo tratando de hacer que se aleje.

"No voy a hacer eso, ¿Por qué estas tan nervioso? ¿Es porque tienes una erección?" dice ella para mi sorpresa.

"¿L-lo sabes?" le pregunto sonrojado.

"Si" ella ríe. "Tengo hermanos y duermo en su cuarto. Se que es normal para los hombres despertarse así" dice ella.

"Joder, pero que sexy" digo en mi mente. "Bueno, pues gracias por entenderlo."

"Si quieres masturbarte solo dime y me voy."

Yo me pongo más rojo, no se que decir.

Ella suelta una carcajada "Jajaja es solo una bromita, pero pues si tu quieres hacemos eso cuando tengas ganas."

"Ganas no me faltan." digo en mi mente de nuevo, muy avergonzado para decir algo.

"Pero bueno, mejor alístate!" ella dice levantándose de la cama. Es hora de empezar con su entrenamiento.

Yo me levanto y me quedo en mi trusa. Ambos estamos en el cuarto y ella solo me mira soltando una risita. "Imagino que vas a ser la victima de las demonstraciones."

"Si, usa mi calzoncillo para entrenar." Le digo estirando y soltando el elástico de mi trusa blanca.

"Perfecto, ahora a comenzar."

"Bueno, el calzón chino normal es cuando sujetas el calzoncillo del elástico por la parte de atrás. Lo jalas para arriba con fuerza."

"Ok" Dice antes de tomar mi calzón y jalar para arriba sin previo aviso. la tela se incrusta en mi trasero y partes nobles. Me retuerzo y muevo mucho al no estar preparado.

"¡Oye! ¡Yo te tengo que avisar!" Grito con voz chillona.

"Jajaja Lo sé, pero no sería lo mismo si estas preparado. Ya se como funciona. Jalas la ropa interior y le duele el trasero y sus partes privadas al chico." Pone su mano en su cintura y se mira las uñas en señal de aburrimiento. "Lo he visto mucho, creo que será mejor algo más avanzado."

Me acomodo mi calzón. "Esta bien. Intentemos el calzón chino frontal."

"Eso suena interesante."

"Solo jala mi trusa desde la parte de adelante, pero no demasiado fuerte."

"Esta bien, tendré cuidado, no quiero dejarte sin hijos." Me da una sonrisita y toma la parte de adelante de mi ropa interior. Estuve a punto de tener otra erección pero tuve que contenerme.

"1... 2... ¡3!" En cuanto conté hasta tres, el dolor intenso invadió mis testículos. "El calzón chino frontal, o melvin, es muy doloroso, especialmente en hombres." Dije con muchos problemas pues aún estaba lleno de dolor en mis bajos.

"Eso es divertido." Dijo Karla soltando el elástico una vez más.

"Ahora, vamos por el atómico."

Karla agarró la trusa por la parte de atrás. "Creo que lo he visto, ¿tiene que llegar hasta la cabeza, verdad?"

"Cierto, tienes que jalarlo con fuerza. Eres mujer, así que no creo que puedas a la primera pero podemos hacerlo muchas ve-" No pude terminar cuando ella estiró el calzoncillo muy por encima de mi cabeza.

"¿Que decías de que era mujer o algo así?" Dijo levantando el calzón por arriba de mí e incluso me levantó del piso con el jalón. Después dejó que el elástico abrazara mi frente. Completando así el famoso calzón chino atómico. Una técnica poderosa.

"Creo que fue todo por hoy." Digo con mi espalda curvada hacía atrás y con el calzón en mi frente.

Karla solo soltó una risita burlona y salió del cuarto, no sin antes decirme una última frase. "Lindo sombrero, trusito." Se rio otra vez y cerró la puerta. Dejándome solo y con la trusa estirada hasta la cabeza.