[💉] 16. 𝚄𝚗 𝚒𝚗𝚏𝚘𝚛𝚖𝚎 𝚢 𝚞𝚗𝚊 𝚒𝚗𝚟𝚒𝚝𝚊𝚌𝚒ó𝚗

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Me levanto de la silla de golpe, no pudieron soportar la furia que se me agolpa en todos los rincones de mi ser. Tengo que obligarme a moverme por la habitación, terminando de hacer círculos dos veces antes de tomar un vaso de agua del escritorio y arrojarlo contra la pared. No contento con ello, mi puño impacta en la mancha acuosa y el polvo —además de una pequeña parte de la pared de yeso— caen al suelo junto a los cristales que crujen con mi bota.

Joker permanece plantado en su asiento, atento a todos mis movimientos, y agradezco que no intente calmarme. No podría. Estoy seguro que sabría cuál iba a ser mi reacción, porque no hay duda de que tuvo él la misma cuando recibió el informe por primera vez. Fijo mis ojos en el bote de basura al lado de su escritorio, hallando una lámpara tan deformada por golpes y pisotones que no me sorprende en absoluto. A cada uno de los hermanos este tema sobre el abuso nos altera, provoca en nosotros una reacción abrupta y mortal que necesitamos reprimir a nuestra manera.

Mi espalda se pone rígida e inclino la cabeza hacia atrás, respiro profundamente y trato de controlar mi temperamento para no transformar su oficia en un queso por los agujeros. Hay una diferencia entre mi reacción a esta noticia y la de Joker: Por mucho que no quiera admitirlo, para mí es personal. Lyrik no es mío, y no tengo derecho a él, pero eso no detiene la necesidad de vengarme en su nombre.

—¿Mejor? —cuestiona suavemente mi hermano.

La mirada que le lanzo es dura, aunque termino asintiendo un poco.

—Por ahora.

—Bien, porque esto no ha terminado aquí —confiesa y su mandíbula se aprieta.

—Joder... —exhalo—. ¿Qué más puede faltar en toda esta mierda?

Desenlazando sus dedos, se endereza en su asiento y coloca sus manos planas contra la superficie de la mesa. Su mirada se oscurece de mala manera, así que no es un farol o algo escaso.

 —Esa última vez que estuvo cara a cara con Petro Holder, lo sorprendió violando a una niña de doce años, violó a su hermana incluso estando inconsciente y él se ofreció a que lo violara si con ello permitía que las chicas no volvieran a ser tocadas por él.  —Cierra por un momento los ojos, antes de concluir con un—: Lo golpeó tan fuerte por detrás que tuvieron que hacer puntos en el recto, necesitó terapia intensiva para no mearse encima cada vez que cerraba los ojos, y de niño sufrió una androfobia tan intensa que se volvió errático. Su hermana fue el único pilar que lo sostenía cuerdo, y ahora ella está muerta.

Tan pronto como las últimas palabras salen de sus labios, pateo la silla en la que estaba sentado hace unos momentos. Se desliza por la habitación y se estrella contra un archivador con un sonido abrupto. Necesito todo en mí para no destruir todo lo que encuentro a la distancia. La ira, ardiente y cegadora, me deja temblando e hiperventilando. 

Necesito matar a ese cabrón con mis propias manos.

—¿En dónde está él ahora mismo? —le pregunto con los dientes apretados, apenas reprimiendo la locura que quiere consumirme hasta carbonizar mis huesos. Saber que ha sufrido tanto hace que se me revuelva el estómago.

—En la cárcel de Dallas, estará ahí hasta que puedan transferirlo a la instalación especial para presos que realizan violaciones múltiples con agravantes.

Me molesta tanto su respuesta que termino por gruñirle en un sonido lineal y bronco, porque eso significa que mis manos no pueden tocar a ese saco de mierda; y eso es algo que quiero hacer desesperadamente. Quiero torturarlo tan lento que ojalá pudiera alargar su agonía durante días sin darle ni el más mínimo trato "cordial". 

𝕯𝚛. 𝕽𝚊𝚐𝚎Where stories live. Discover now