Lo odio

52 9 2
                                    

Cuando eres niño te imaginas un mundo sin dolor, una vida feliz pero todo es una ilusión porque cuando conoces el mundo conoces el infierno.

Las películas nos bombardean con ser popular, con ser el chico perfecto, con encajar con los estándares de este mundo de eso depende nuestra felicidad en lograr aquellos estándares pero sino lo logras tu vida será un infierno

Los niños pueden ser crueles dicen pero realmente desde que nacemos traemos un poco de crueldad mientras, crecemos decidimos en aumentar o no la crueldad que tenemos con ayuda de la educación que recibimos de parte de la familia.

Cuando un niño sufre de violencia familiar. Nos volvemos más vulnerables y creemos aquellas palabras que son como apuñaladas que nos van destruyendo poco a poco. Cuando entramos a la escuela tenemos dos opciones:
1.- Ser la víctima o 2.- Ser el agresor. ¿Qué decides?

Pensaríamos que seria fácil decidir pero no es así la sociedad te dice que serás. Si encajas serás el agresor pero sino encajas eres la víctima.

Donde encuentran hasta el mínimo defecto para humillarte y a eso le aumentas el maltrato de parte de la familia. La cual uno cree que nos amarán sin importar nada pero no es así jamás será así.

¿Qué deberíamos hacer? ¿Vengarnos? ¿Matar a todos? ¿Torturalos?

Si cumplo con los estándares de belleza todo cambiaría. La gente bonita tiene una mejor vida y no tiene que pasar por humillaciones como los feos

—¿Debería cambiar?–

— Hazlo así serás feliz idiota –

Ah, ya me cansé de estar aquí en el manicomio no veo el día que sea liberado.

No eh hecho nada malo aún

— Jimin tienes visita — dijo aquella señora de bata blanca

— ¿Visita?–

— Hola hijo. Hace tiempo que no te veo — aquella voz que proviene de aquel hombre alto. Vestido de traje. Con una gran sonrisa en ese rostro que tanto aborrezco aquel que se hace llamar mi padre.

— Los dejo— dijo la señorita de bata blanca.

—No me deje con ese moustro porfavor— pensé 

— Mira al fin estas donde debes estar desde el momento en que naciste en un manicomio —

Que puedo decir. Sus palabras aún duelen igual como la primera vez

— Solo vengo a decirte que me encargaré de que tu inútil bueno para nada, estorbo y loco, me aseguraré de que jamás salgas de aquí.  Aquí me a vergüenzo un poco menos de ti loquito —

Ah, ¿por que caen las lágrimas? ¿Por qué vino? Lo odio

— Sabes que es lo gracioso es que nadie te extraña, a nadie le preocupas, sin ti somos libres pero eso ya lo sabias —

Ya, Porfavor cálmate corazón, ya no duelas

— Hoy me desago de la peor vergüenza y error de mi vida. Hasta nunca Jimin mi hijo loco —

Mis ojos no podían enfocar bien aquella persona que tanto daño me ha hecho.

— ¡Ahhh! — mi puño esta en mi pecho tratando de calmar el dolor — ¡Te odio! — por favor deja de llorar. — ¡Ahhh ya por favor!— me levante y tumbé las mesas — ¡Ahhh deja de doler !— mis ojos perdieron la visión en un abrir y cerrar de ojos.

Trastornos Mentales Unde poveștirile trăiesc. Descoperă acum