EL GIRO DE LA VENGANZA

Capitulo 110

Esperanza: se nota, tus ojitos están bien brillantes de la pura felicidad.

Regina: ¿ sabes? le pedí a Daniel que fuera esta noche al departamento así que empaca tus cosas nana porque hoy mismo nos regresamos.

Esperanza: ¡pero claro que si mi niña!

Daniel estaba concentrado viendo la construcción cuando una de las paredes de la nada se desplomó y cayo sobre él dejándolo inconsciente.

Los empleados que estaban en el lugar fueron testigos del incidente y se acercaron para ayudarlo, uno de ellos llamó a Ximena para darle la noticia, esta les ordenó que lo llevaran a la cruz roja por que estaba más cerca, que ella de inmediato los alcanzaría.

Llamaron una ambulancia y se llevaron a Daniel de urgencia.

Eran más de las 5 cuando Regina, Esperanza y Miranda llegaron al departamento.

Esperanza: yo siento mucho abandonar a tus papás, pero extrañaba horrores este lugar.

Daniel llegó a la cruz roja gritando del dolor, las enfermeras tomaron sus cosas, antes de que entraran a revisarlo pidió que le avisaran a su familia que llamaran de su teléfono.

Una enfermera tomó su teléfono y le marcó  a su madre.

"Alicia: ¿Daniel? Hijo que alegría escucharte.

Enfermera: disculpe es que su hijo acaba de llegar a la cruz roja muy lastimado.

Alicia: ¿Qué le pasó?

Enfermera: tuvo un accidente, pero pidió que le avisáramos a sus familiares, ¿es usted la mamá verdad?

Alicia: si señorita, por favor dígame en donde tienen a mi hijo."

Ximena llegó a la clínica y fue a recepción a preguntar por Daniel.

Ximena: ¿disculpe aquí trajeron a un hombre que tuvo un accidente en una construcción?

Enfermera: si señora, en este momento le están inmovilizando la pierna.

Ximena: ¿es grave?

Enfermera: estará bien.

Ximena: ¿puedo verlo?

Enfermera: solo pueden pasar sus familiares.

Ximena: yo soy su esposa.

Enfermera; en ese caso podrá verlo cuando terminen de atenderlo, espere aquí, en unos minutos vendrán por usted para llevarlo con él.

Ximena: gracias.

Alicia iba muy angustiada en un taxi hacia la cruz roja, no dudó en avisarle a Regina.

"Regina: ¿Qué dice? ¿pero como esta?

Alicia: no lo sé hija voy camino a la cruz roja.

Regina: ya salgo para allá, gracias por avisarme"

Esperanza: ¿pasa algo mi niña?

Regina: Daniel tuvo un accidente en el trabajo y tuvieron que llevarlo a la cruz roja.

Miranda: ¡mi papito!, ¿se va poner bien mamita? - dijo muy angustiada-

Regina: esperemos que si mi amor, quédate con Esperanza yo voy a verlo.

Miranda: pero quiero ir contigo- dijo agarrándose de su pierna-

Regina: es que no dejan entrar niños mi amor, te prometo que en cuanto sepa algo de tu papà te llamo.

Miranda: ¿Lo prometes?- dijo con sus ojos llenos de lágrimas.

Regina: si, te lo prometo.

Regina salió corriendo del departamento hasta su camioneta, entró en marcha tenía mucha prisa.

Enfermera: adelante puede usted pasar.

Ximena: gracias.

Ximena entró a ver a Daniel, aunque estaba consciente se sentía mareado por los analgésicos que le había puesto.

Ximena: ¿Cómo te sientes?

Daniel: muy adolorido, ¿te puedo pedir un favor?

Ximena: si claro.

Daniel: avísale Regina, quiero verla.

Ximena: no tengo su número.

Daniel: dame algo para anotar.

Ximena sacó un bolígrafo y un papel, Daniel anotó el numero de Regina con un poco de dificultad. 

Aquella petición pareció no gustarle a Ximena, y aunque asintió para hacerle creer que lo haría no tenía ninguna intención de hacerlo.

Regina llegó a la cruz roja y se encontró con Alicia, quien angustiada esperaba noticias de su hijo.

Alicia: ¡qué bueno que viniste!

Regina: ¿se sabe algo de Daniel?

Alicia: solo me dijeron que lo inmovilizaron por que tuvo una fractura en su pierna, pero no me dejaron pasar por que alguien esta adentro con él.

Regina: ¿alguien? ¿quién?

Alicia: no lo sé.

Regina se acercó a la recepción.

Regina: señorita vine a ver a Daniel García hace poco ingreso con una fractura en su pierna.

Enfermera: si, lo recuerdo, yo lo recibí.

Regina: ¿podemos verlo?

Enfermera: lo siento, pero solo puede ingresar una persona por paciente, en este momento su esposa se encuentra acompañándolo.

Regina: ¿su esposa?

Regina sintió muchísimo coraje.