💕YOU ARE MY LIFE💕

💕CAPITULO 32💕

Al inicio, el perseguirse el uno al otro era solo un juego. El objetivo había sido cazar a Wang Yibo para lograr sus propios fines, pero ahora el cazador le había dado su corazón a su presa. En esta larga apuesta, Xiao Zhan había perdido.

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Los dos estuvieron afuera de la casa de la familia por mucho tiempo. Cuando volvieron se podía apreciar en sus caras un poco de incomodidad. Zhoucheng noto esto y en su cabeza se formaron muchas preguntas. Cuando estas dos personas habían salido, parecían como perros y gatos, nadie se atrevió a interponerse en su camino por miedo a salir lastimados, pero ahora que habían regresado después de mucho tiempo ¿Por qué parecía que eran una pareja?

El señor ya había tomado una decisión importante. Apretando los dientes y plantando sus pies firmemente en el suelo le entregó el cheque por 100,000 yuanes a Wang Yibo

— Esto... Señor Wang, estuve pensándolo y decidí devolverle el dinero. No le venderé mi tierra. El dinero va y viene, pero puede no haber otra oportunidad para pagarle a este benefactor. Si quiere llevar este caso a la corte, yo lo aceptaré y tomaré la responsabilidad.

Yibo miró a Xiao Zhan. Al mirarlo aún avergonzado, con sus orejas de un rojo brillante, se sentía muy feliz. Después volteo a ver al anciano y le dijo

­— Abuelo, deberías pensarlo bien. El ir a la corte no es barato, su nieto y usted deberán trabajar toda una vida para pagarlo.

— Venderemos nuestro hígado y riñones si es necesario para pagarla ¡no se preocupe! Ahora tomé el dinero, le venderemos la tierra a mi Zhan-ge.

Un indignado Zhoucheng se puso de pie de un salto e inmediatamente se puso en una posición para proteger a Xiao Zhan. No quería seguir hablando con Wang Yibo. Yibo se acercó al anciano y le devolvió el cheque, después sonrió y le dijo

— Abuelo, tenga la seguridad que ya he llegado a un arreglo con el señor Xiao. Lo compraré yo y usted no tendrá que pagar ningún daño.

El anciano y Zhoucheng estaban sorprendidos. Los dos voltearon a ver a Xiao Zhan. Este miro a Wang Yibo, después volteo a ver al anciano y le dio unas palmadas en el hombro a Zhoucheng

— Señor, cuando ayudé a A'Cheng nunca pensé en pedir nada a cambio. Además, aunque usted quiera venderme esté lugar, nunca podría pagar los 300,000 yuanes que le ofrecen. No puedo pedirle que renuncie a ese precio. Además, ya negocié con el señor Wang y llegamos al acuerdo de que le pagare un alquiler cada mes. Él me prestará la tierra, de esa manera usted y A'Cheng no tendrán problemas.

Wang Yibo observó como Xiao Zhan mentía sin que la sonrisa de sus labios desapareciera. Dios sabe que estuvieron afuera por más de dos horas, pero en ningún momento hablaron de cosas relacionadas con la tierra. Eso de que habían llegado a un acuerdo en donde le pagarían un alquiler no tenía sentido. Los había engañado.

Xiao Zhan sintió la mirada de Yibo y se sintió un poco avergonzado. Pensando que había vuelto a mentir enfrente de él, deseaba encontrar un hoyo en el suelo para esconderse en él. Pero no importaba que tan incómodo se sintiera en su corazón, en su rostro no se reflejaba. Unas cuantas palabras lograron persuadir al anciano. Este limpio sus lágrimas y guardo el cheque que estaba en su mano. Cómo se sentía muy agradecido los invito a cenar.

Durante la cena, Zhoucheng sentía que había algo extraño en la situación, pero después de ver la cara de Xiao Zhan, no era capaz de descifrar lo que era. A'Hao estaba comiendo sin importar lo que pasará a su alrededor. El anciano estaba muy borracho y ya no podía notar nada extraño, solo Zhoucheng sentía que algo estaba raro. Miro secretamente a Wang Yibo y logro ver cuando este tomaba un trozo de pollo y lo colocaba en el plato de Xaio Zhan mientras decía