How To Safe A Life (Chris Evans)

Capitulo 5

-Espero que el desayuno sea de su agrado, supongo que ya sabra que en su estado actual hemos tenido que limitar su alimentación...bastante.-le avise sabiendo la bazofia sin sal, azúcar, ni cualquier otro tipo de aditivo que estaba por entregarle.

-Cualquier cosa que no sea suero intravenoso será de mi agrado, te lo aseguro- dijo entre risas.

-Me alegro que este de tan buen humor, aunque parece que si tengo que asegurarme que todo esta en orden así que si me lo permite voy a hacerle un chequeo.

-Claro -asintió

Vi su historial de constantes en el monitor, todo fue bastante bien exceptuando a las 4 y cuarto de la mañana que bajaron considerablemente, lo apunte en su historial para que el doctor Freeman lo estudiase.

-Y ahora necesito cambiarle la gasa y ver como van los puntos, así que si se puede incorporan levemente se lo agradecería.

-Violet, ¿no?-preguntó

-Así es...- asentí confusa

-¿te importa si nos tuteamos?

-No... claro que no me importa siempre que a usted... digo a ti te parece bien.

Sonrió y rápidamente se incorporo.

-Nononono- dije sujetandole por los brazos inconscientemente.

Cuando me di cuenta rápidamente tome distancias y explique mi comportamiento

-No debe hacer movimientos tan bruscos aún, ha tenido serias complicaciones con las lesiones y están muy débiles.

-Perdona, no tenía ni idea.- dijo levantando las manos cosa q me hizo sonreír inconscientemente

-Bueno he terminado por aquí, si necesita cualquier cosa pulse el botón que tiene al lado y yo o mi compañera vendremos en seguida.- finalize y me di media vuelta con intención de irme.

-Espera... ¿te importa quedarte? Ya que como has dicho la comida no va a ser buena al menos que la compañía si lo sea.

Me di la vuelta cuando asimile sus palabras y me demore unos instantes en deliberar una respuesta. Por una parte podía quedarme perfectamente ya que como el jefe dijo ya habría alguien cubriéndome pero por otra... veía un poco inadecuado el quedarme y mas si le añadimos lo de esta noche.

-Yo... no debería la verdad...

-Porfavor- suplico poniendo la típica carita de perro triste.

-Está bien.

Dije y me apolle en la pared.

-Por favor siéntate si quieres.-dijo señalando con la mirada la butaca donde había pasado la noche.

Fui hasta allí y me senté, mientras que el destapaba la cubierta de la bandeja que contenía su... adaptado desayuno.

-Vaya, si que es extraño- dijo

-¿que es esto?-me preguntó indicándome lo que asemejaba a ser una tostada.

-Una tostada sin levadura, gluten, sal, huevos ni derivados.

La mordió y delibero por unos instantes si le gustaba o no

-Pues la verdad que no esta tan mala como pensaba, felicite al cocinero de mi parte.

Sonreí inevitablemente por su reacción.

-Perdón por imbiscuirme pero no se como es capaz, una vez hice una apuesta con varios compañeros de turno y ninguno fuimos capaces de terminarnos la tostada. -dije temiendo a haberme atrevido a decirle algo sobre mi vida privada.