Capítulo 40. Juntos de nuevo

Start from the beginning
                                    

Axe y yo acompañamos a Hammer a su cabaña, el lugar huele fuerte, huele a Hammer y a ese gamma que sale corriendo quitándonos a nuestro alfa de las manos, pero que gime complacido cuando esa criatura lo abraza y riñe.

Miro a este coso, sin duda no es lo que me esperaba, no es como esos dos que he traído casi a rastras, no tiene miedo, no lloriquea, y sostiene a un alfa que le dobla el tamaño y que se acurruca contra él confiándole su vida por lo que parece.

Miro a Axe y él solo sonríe, pero sonríe de verdad como hace tanto que no le veo sonreír.

—Vámonos, te aseguro que no quieres ver lo que van a hacer ahora —me dice Axe lanzándoles una mirada a la pareja, mirada que el gamma le devuelve oscura, pero que finalmente agradece con una voz impertinente.

Y entonces lo reconozco, es el gamma al que Axe casi mata aquella mañana después de la unión, el que nos mandó a la mierda.

Abro los ojos aún más, y Axe me saca de aquella cabaña.

—Sí —me dice agarrándome por los hombros, haciéndome caminar.

—¿Pero?

Él se encoge de hombros, pero sonríe, dos sonrisas seguidas en medio de esta locura.

—El amor —reconoce Axe—, nunca se sabe en dónde va a surgir, ¿verdad?


Le miro, le miro de verdad, y no hay ese dolor que siempre le acompaña en su voz, menos hablando de un tema así.

Y entonces olvido la pelea que he frenado esta tarde, olvido a los gammas que he traído conmigo, y al que duerme con mi Primero, olvido todo y solo veo a Axe.

Sí, el amor aparece en cualquier lugar, hasta en los que no debe ser. Yo amo a Axe, siempre lo he hecho, y nunca ha sido incapacitante, nunca ha dolido y nunca me ha hecho sentir más ni menos de lo que yo soy. Y sin embargo, sé que le quiero.

—Ven conmigo —le digo acercándome más a él, le deseo tanto que le tiraría sobre esa entrada, pero nuestras cabañas están solo a unos pocos pasos.

Puede olerme, solo de mirarle, de verle sonreír, de volver a tenerle cerca, estoy excitada, y le necesito muy fuertemente.

Él me mira, y vuelve a ser el alfa roto de la frontera, sigue siendo lo que yo quise reparar y sé que no va a venir conmigo.

De acuerdo.

Aprieto su hombro en señal de despedida, en realidad estoy cansada del viaje, he querido llegar lo antes posible, y siento que no es solo por volver con los míos, por traer a ese enigma gamma.

Ha sido por este alfa, por lo que siento por él, y porque como ya sabía, no es para mí.




Axe


Veo a Saw irse, y reconozco que cuando la he visto he sentido que por fin estaba completo.

No pensaba que la echaría tanto de menos, solo unos días de separación.

Pero lo que ella siente es tan fuerte, tan invasivo como lo que yo he hecho con Dagger, y tiene a nuestro omega mirándome como si quisiera matarme aún.

Ella me hace sentir bien y mal al mismo tiempo, y veo mi rechazo en sus ojos oscuros, en sus labios abiertos cargados de deseo.

Ella se va, sin ningún tipo de espectáculo, lo acepta, se la ve cansada, pero es la alfa más fuerte que yo he conocido nunca, su determinación lo es todo.

Cuando cierra la puerta de su cabaña a sus espaldas y dejo de verla, me doy cuenta de una cosa, de que tengo que dejar de relacionarla con Dagger, de lo que éramos antes.

Esa parte ha muerto, eso nunca será y de algún modo, la confrontación que tuve con mi líder me ha hecho sacar el pie de ahí. Verlo desde fuera, eso nunca más será, nunca más.

Y Saw sí, Saw siempre estará a mi lado, lo sé, como sé que la quiero, que la quiero de un modo que nunca me supo a bastante; que la necesito, que sin ella me falta una parte de mí, una que no tiene que ver con Dagger, por primera vez.

Que no se merece un alfa roto por algo imposible, que yo no me merezco ser ese alfa.

Mis pasos me han llevado hasta su puerta que se abre bajo mi mano, que ella me mira sentada cansada delante de mí. Que llego hasta ella, y sus ojos oscuros no saben qué esperar de mí.

Y le sonrío, le sonrío dándole la bienvenida, porque aunque no me despedí de ella, nunca dejé de esperarla.

La puerta suena cerrándose mientras yo me acerco a ella, paso cada una de mis piernas sobre las suyas quedando sobre su regazo.

—Me alegro de que estés aquí, Saw —le digo cuando bajo agarrando su nuca para besarla.

Y es la pura verdad, me alegro que ella esté ahora aquí, me alegro de tenerla conmigo, me alegro de besarla y sentir sus manos por todo mi cuerpo.

Ella está excitada, y yo lo estoy por ella.

Meto mi mano dentro de su pantalón de cuero, está húmedo entre sus pliegues, resbaladiza, y meto mis dedos con fuerza allí haciéndola gemir, con la otra mano acaricio su clítoris completamente hinchado.

Ella se levanta llevándome consigo, no soy ligero, dudo que algún alfa sea un peso ligero, pero ella siempre ha podido conmigo y me tira sobre su cama. Arrancándome la ropa, gimo de placer cuando toma mi erección firmemente, y noto como se empala sobre mí.

La siento cálida, húmeda y resbaladiza, y aunque soy yo el que la taladro es ella la que domina.

Le ofrezco mi cuello y me corro cuando ella me muerde, sé que ha llegado a su propio climax porque se retuerce sobre mí, sus dientes tienen mi sangre, su interior mi semen, y por primera vez en mi vida la aprieto al punto de meterle mi nudo.

Ella grita, y ahora soy yo el que muerdo su cuerpo, haciéndola correrse de nuevo completamente llena de mí.


¡¡Hola!! No, hoy no es domingo pero mañana me voy de viaje y será imposible publicar

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

¡¡Hola!! No, hoy no es domingo pero mañana me voy de viaje y será imposible publicar.


Me gustan estos dos alfas juntos, me gustan mucho.


También os quería decir que me voy a tomar una semana de vacaciones, la historia va, pero le quiero dar una vuelta a algunas cosas para que encajen bien, sin prisas.

Así que nos volvemos a ver el martes 19, espero que también paséis buenos días si tenéis festivos.

Gracias por seguir conmigo en esta aventura.

Nos leemos.

Besos

Sara

GammaWhere stories live. Discover now