La oportunidad de estar contigo

Capitulo 1

Mi nombre es Megan Lawrence Young, tengo 19 años y vivo en Dallas, TX.
Mi hermano mayor Ethan me llamó para decirme que iríamos a una fiesta que habría en un lugar poco más adelante de Dallas. Pero ya eran las 8:30pm y él aún no llegaba de trabajar. Hacía rato que me había maquillado. Un rato más tarde llegó y nos fuimos para la fiesta. Al llegar una de mis amigas fue por mí. Por su parte, mi hermano se fue por una bebidas y había quedado con sus amigos.
Estaba tocando una banda, no era de mi agrado pero sin embargo podía escucharla. Sarah, esa amiga mía estaba algo ebria, así que llegaron por ella y yo me quedé sola hasta que me encontré a una conocida, vivía cerca de mi casa y a veces nos reuníamos.
—¿Te está gustando la fiesta? - Le preguntó a Hannah.
— Si, hace tiempo que no venía a una fiesta y a ti también tenía mucho sin verte - dice ella sonriendo.
— Lo sé, mi trabajo me consume por bastante tiempo. Pero ya se acercan las fechas navideñas y tendré vacaciones.
Volteo hacia el frente y veo pasar a un chico alto, tiene el cabello largo y bastante lindo, quedo embobada al punto que dejé de escuchar a Hannah. Varias veces miré a ese chico, pero él sólo pasaba, creo que ni siquiera notaba mi presencia.
Ya era tarde y fui a buscar a mi hermano para regresarnos a casa. Llegamos y de inmediato me fui a dormir.
A la mañana siguiente desperté y recordé a aquel chico con cabello lindo, las dudas paseaban por mi mente, ¿Quién será? ¿Cuál es su nombre? ¿En dónde vive?.
Dejé ese tema y me dediqué a ayudarle a mi madre con el desayuno.
— Megan, ¿a qué hora llegaron? – Pregunta mi madre.
— Llegamos temprano – Respondí. Aunque eso era mentira, llegamos casi en la mañana.
Me fui a mi habitación para evitar todas esas preguntas de mi madre. Coloqué mis audífonos y puse algo de My Chemical Romance.
La pasé en casa todo el día, en la noche salí con mis amigas, Alice, Delilah y Jade.
Regresé temprano a casa porque mañana debo ir a trabajar. A veces es aburrido ir a supervisar a los demás empleados de la tienda, pero es mi trabajo.

Al día siguiente me levanté a las 7:00am, me maquillé y busqué la ropa adecuada. Salí de habitación, mi mamá dejó el desayuno preparado antes de irse a trabajar, mi padre, Ethan y Robbie también se habían ido a trabajar. Robbie es el hermano de en medio, es con quién más peleo, pero es un buen hermano al igual que Ethan.

Llegué a la tienda, con artículos de papelería. Dejé mi bolso y me puse un mandil para comenzar a trabajar.
El día había sido aburrido pero al menos se me pasó rápido. Regresé a casa, me bañé, cené y después me fui a dormir.

La semana se fue en un abrir y cerrar de ojos, era domingo, mis amigas y yo estábamos invitadas a una fiesta de Halloween, busqué en mi armario algo para vestirme de bruja. Muchas veces recibía comentarios de que no necesitaba disfraz porque ya parecía bruja. Quizás y tenían razón, mi forma de vestir era diferente, pero realmente no me importaban los comentarios.
A las 5:00pm llegaron Jade y Alice por mí. Jade llevaba un disfraz de coneja y Alice de la novia de Chucky. Ambas de veían muy bien.

Al llegar a la fiesta nos encontramos con otras chicas, todas se veían increíbles. Al principio se me hizo aburrido, me tomé una cerveza y luego otra. Al poco rato me sentía mareada. La música comenzó y todos bailaban, yo no era amante de bailar así que me dediqué a cuidar los bolsos de mis amigas. Alice traía un vaso con tequila, sin pensarlo le di varios tragos y comencé a sentirme borracha, al extremo de ponerme a bailar. No sé cómo no me caí o resbalé por las zapatillas altas que traía. Jade me presento a un chico, ni siquiera sabía su nombre pero estaba bailando con él.
Se acerca Jade.
— Meg, ya nos iremos. – dice gritándome por la música.
— ¿Quién nos llevará?
— Nos llevará Dylan. – Responde ella. Dylan es un chico con el que Jade sólo se besa.
Para mi sorpresa Dylan se llevó al chico con el estaba bailando. Al ir en el camino el chico se me acercó y comenzó a besarme, a lo que yo le respondí el beso.
Llegué a mi casa, todos estaban dormidos, me puse la pijama y caí a la cama.