Aquel primer amor

Kickstart my heart

Al día siguiente, me desperté a las 12, ya que era sábado. Por la mañana no hice mucho, tan solo algunos deberes. Más tarde salí a comer con Lexie.

Esa misma noche, tendría lugar una fiesta en casa de algún jugador de fútbol y yo había quedado con mis mejores amigas para ir. Allá a las seis me empecé a preparar. Me puse un vestido negro corto y maquillaje sencillo, aunque me sentí bastante guapa y segura de mi misma. 

Martina<3 

Paso por tu casa en diez minutos.

Al leer el mensaje, me despido de mi madre y en el momento previsto llega Martina.

-Pero bueno, menuda belleza, hoy arrasas con todas -dice mientras hace gestos exagerados para alabarme

Yo me limito a sonrojarme y la abrazo. Pasamos a buscar a Julie, que lleva un vestido precioso amarillo. Después de los pertinentes halagos, nos dirigimos a la fiesta.

Al llegar, vamos las tres directas hacia donde está la bebida y empezamos con nuestro primer cubata. Veo que Maddy llega, tan guapa como siempre. Procedo a acabarme de una tirada lo que me queda en el vaso y procedo a ir a saludarla. Mis amigas parecen intrigadas con mi decisión. Ella me ve dirigirme a ella y sonríe.

-Hola bonita -me da dos besos.

-Hoola guapa 

-¿Ya has empezado a beber no?- me dice divertida.

-Aha, deberías ponerte a mi altura.

Ella ríe, me agarra la mano y vamos hasta la mesa de bebidas. Mis amigas me vitorean sin que ella se de cuenta. Nos sirvo una copa a ambas y brindamos. Nos quedamos ahí un buen rato y después de un buen rato bebiendo, ambas vamos un poco perjudicadas.

-¿Bailamos?

-Ann, casi que no nos aguantamos ni de pie -Maddy ríe.

Prácticamente la arrastro hasta la "pista" de baile y no sé si lo que hacíamos se podía llamar bailar, pero al menos estaba disfrutando. De repente Maddy se gira y empieza a bailar sensualmente conmigo yo no sabía que hacer. La aparto con cariño.

-Creo que necesito tomar un poco el aire, Maddy

-¿Estás bien?

-Un poco mareada.

Salgo fuera, ella se queda dentro. Me encuentro con mis chicas.

-Bueno bueno, has triunfado eh-dice Julie.

-De eso nada, me he puesto nerviosa y he tenido que salir -digo un poco triste.

Las chicas se miran y se sientan a mi lado. Intentan reconfortarme acariciándome la espalda.

-Venga, vuelve a dentro, seguro que está esperando, -Martina me intenta convencer

Me levanto de una y con ellas detrás, vuelvo a buscar a la latina. Al entrar, me encuentro una escena desagradable para mí. 

Maddy se estaba besando con un tío.

Mis amigas se apresuran a volver a fuera, nos sentamos donde antes.

-Es que, ya no sé ni para que me ilusiono. Es imposible. Ni siquiera le gustan las chicas y si así fuera, ¿por que he llegado a pensar que yo podría llegar a tener algún tipo de oportunidad?

-No digas eso, eres preciosa. Si ella no es capaz de verlo, ella se lo pierde.- dice Julie y Martina asiente.

-Es que la quiero. ¿Y si nunca dejo de hacerlo?

-Annie cariño, eso es imposible. 

-Necesito alcohol -sentencio.

Volvemos a dentro y Maddy ya no está. Probablemente haya subido a alguna habitación con ese chico. Intento borrar ese pensamiento de mi mente mientras prácticamente engullo otra copa, ya he perdido la cuenta.

Julie y Martina intentan alejarme de la mesa, llevándome a bailar. Encuentro a una chica rubia, bastante mona que no para de mirarme. Me acerco a ella y nos ponemos a bailar. Me han desaparecido los nervios.

De un momento a otro, la chica me besa y yo la sigo. Me parece ver a Maddy, mirándome ¿decepcionada? Será culpa del alcohol. 

Cuando la cosa empieza a subir de tono, busco una habitación con la chica, de la cual no sé ni su nombre. Lo pasamos bien, pero eso es una historia que me guardo para mí.

Cuando terminamos, bajo rápido casi sin despedirme en busca de mis amigas, que seguían bailando.

-Bueno fiera, ¿Qué tal ha ido?- pregunta Julie y Martina arquea las cejas

-Bien bien. ¿Nos vamos? ¿Queréis dormir en mi casa?

Las dos parecen conformes con la idea. Entrelazamos nuestros brazos y salimos de la fiesta, menuda noche.