• last client • [Kooktae]

• Chapter II •

• • • • •

La intensidad entre ambos se podía cortar con un arma de doble filo, podían sentir sus respiraciones chocando entre sí, sus ojos fijos en los labios de contrario.

"Te lo daré solo si me complaces con mostrarme donde es tu segundo trabajo" susurró ronco entre ambos, Jungkook.

"¿Ah, si?" Con la última sílaba hizo que sus labios se rozaran por breves y suaves segundos. No había forma de mentir, se deseaban, tan simple como eso.

"Si, y te daré todo lo que tu desees, yo complaceré todas tus necesidades, todo lo que necesites o quieras yo te lo daré" miró a los ojos del rubio con una electricidad que erizó ligeramente su piel.

Su mirada tan oscura...

"Me encantaría señor Jeon" el rubio buscó algo en el bolsillo de su falda, sacando una tarjeta morada con letras doradas.

Club de Diamant
"Le spectacle de Vante"

El azabache la miró con atención y miró al rubio con complicidad antes de hablar.

"Ahí estaré" el azabache se levantó de su mesa en silencio, el rubio vio como se hacía más grande a su lado.

Pero nunca hubiera podido predecir lo que ocurriría.

El azabache lo tomó de la cintura y lo levantó ligeramente para sentarlo sobre la mesa. Abrió sus piernas y se metió entre ellas para atrapar los labios de rubio con hambre. Taehyung soltó un jadeo sorprendido que fue apagado por la intensidad de sus besos. Abrió su boca para interceptar la lengua del azabache, cosa que ocurrió al instante.

Jungkook lo abrazó colocando sus dos manos en la espalda baja del contrario y lo empujó contra su pelvis. El roce de sus caderas era tan caliente, se mecían juntos para friccionar sus intimidades, gemían entre besos, jadeaban cuando se separaban para volver a unirse en cuestión de segundos.

Eran adictos al sabor del contrario. A sus aromas que se entremezclaban en el aire dando como resultado un licor de durazno con menta bastante extravagante. Su unión era única en su clase.

Se separaron lentamente, dejando sus frentes juntas mientras intentaban regular su respiración, sin embargo, la cercanía corporal aún estaba ahí.

"Creo que tendré una adicción a tus besos dentro de unas semanas" murmuró el rubio, jadeando.

"Yo ya creo que soy adicto a ti, Taehyung" el azabache volvió a juntar sus labios en un beso corto, incluso hasta un poco dulce. "Tengo que irme a casa, dulzura. ¿Te veo mañana en el club?"

"Nos vemos mañana en el club" se miraron unos segundos más antes de separarse por completo, Taehyung se arregló un poco la falda que se había subido.

Poco después de eso, cuando dieron las doce, pues habían estado bastante tiempo jugando entre sí y tentando al destino, decidieron marcharse del lugar.

Jungkook esperó a que Taehyung cerrara el local con llave y candado la cortina que cubría la entrada del bar vintage. Luego se le acercó, tenía una tarjeta entre sus manos, parecida a la que el rubio le había entregado.

"Toma Taehyung, en caso de que necesites llamarme o quieras comunicarte conmigo, este es mi contacto" le acercó la tarjeta en negro con letras en plateado.

J.J.K. Industries
Número: **********

"¿No deseas mi número a cambio?" Preguntó con ojos brillantes a la luz de la luna. A Jungkook incluso le pareció un poco vulnerable. Se le hacía totalmente fascinante esa mezcla entre vulnerabilidad y atrevimiento.

"Supuse que, como trabajas en un club, prefieres mantener tu número solo para tus cercanos, por seguridad" Jungkook había supuesto bien, solo sus amigos tenían su número de teléfono.

"Es así, pero...¿tienes algún lápiz o papel?" Le preguntó otra vez, pudo ver un brillo especial en la mirada del alfa, pareció perderse en su mundo por medio segundo antes de reaccionar ante la mirada curiosa del omega.

"O-Oh, por supuesto" sacó de su bolsillo una tarjeta en blanco y un lápiz y se los entregó a Taehyung. El omega escribió algo rápido y se la entregó.

"Ahí está mi contacto, Jungkook" vio como el azabache guardaba la tarjeta en el bolsillo de pañuelo de su traje.

"Lo guardaré con mi vida, espera pronto algún mensaje" él le guiño el ojo a forma de juego y ambos rieron cortamente.

Su risa no puede ser tan adorable pensó el azabache.

Taehyung miró la tarjeta negra en sus manos y al pelinegro con extrañeza y cierta calidez. Le gustó saber que ambos estaban igual de interesados en conocerse. Le dedicó una sonrisa.

"Bueno Jungkook, debo irme a mi apartamento, queda por aqui cerca" comenzó una despedida el omega. "Nos vemos mañana"

"Nos vemos mañana Taehyung" el azabache se acercó con lentitud y agachadose solo un poquito, dio un beso en la frente del omega.

Poco después se subió a su auto y se marchó. Dejando a Taehyung con su lobo saltando de la felicidad dentro de él mientras caminaba hacia su hogar.

Mientras que Jungkook sonreía con ternura al leer la tarjeta.

Hiciste feliz a mi omega <3
Quiero más besos, veamonos más seguido.
Número: **********

• • • • •

• Venus •