Diecinueve- Andrea Zuñiga

155 9 1
                                    

Narrador omnisciente

Era martes por la tarde cuando editaba un vídeo que subiría a nuestro canal principal de YouTube, recetas famosas de tiktok, las probaríamos para ver que tan ciertas eran.

Ya teníamos todo acomodado en la superficie de marfil, el editor estaba con la cámara lista.
Terminamos de grabar tras unas fallas enormes, resulta que no todo lo que ves en Internet es real y eramos conscientes de ello. De 10 hacks, sólo quedaron cuatro bien. Llegó la comida que encargamos de Rappi, nos sentamos las cinco personas que estábamos presentes.

Una vez acabando de comer miré como mi hermoso novio no paraba de jugar con sus manos.

—Oye, Chinos –lo llamé preocupada por su comportamiento– ¿todo bien?

Él compartió miradas con Diego.
— Si mi vida, no pasa nada.

Si como no, igual traté de no poner mucha atención en el caso. Pero he de admitir que en el fondo me preocupo mucho por él.

— Quedé llenito —Diego se tocó la panza en señal de que de verdad había acabado su porción– me voy un rato a ver una serie ¿vienes Sof?

Sonreí.
— ¡Si! hoy hay nuevo capítulo, ¿vamos Jorge?

— Eh, no.. ahorita voy a salir —se levantó de la mesa buscando sus llaves— pero ustedes véanla y me cuentan lo que pasa

— Pero ¿a dónde vas? –mi ceño mostró una ligera confusión, solo me contestó que "a un pendiente"– voy contigo

—No quiero que te la pierdas Sof, anda ve con Diego.

Accedí dirigiéndome al cuarto de Yeyo.
Diego salió detrás de mi, frenando en la cocina para agarrar una bolsa de botana.

Narra Yeyo

Toqué mi barriga, la comida estaba realmente buena. Cuándo escucho a Chinos encubriendo una de las excusas más baratas. "Un pendiente"
No puedo creer que todavía Andrea esté obsesionada, sólo espero que Sofia no esté sospechando de esto, es mucho más lista que él. Lo apoyo convenciendo a Sofia de ir a ver nuestra serie. Iba a meterme al cuarto cuando recuerdo que había frituras de vegetales secos, subo unas botellas de té helado.

— ¿Ya pusiste el Netflix Sof?

Abro la puerta y no veo la veo por ningún lado.

— ¿Sof..? ay no..

Narra Sofía:

Jorge conduce como loco saltando algunos baches ¿que lo tiene tan apurado? estar callada en la cajuela no es tan fácil como respirar.
Protejo mi cabeza con mi antebrazo mientras suena la radio.

— ya llegué.. –se escucha como habla con alguien al teléfono– si si, apúrate que no quiero perder mi tiempo contigo -cuelga.

¿Me es infiel? está molesto como para estarme engañando.

De pronto un freno en seco, haciéndome jadear en bajito.
Se escucha como una chica empieza a hablar.

—Jorge cuánto tiempo –sonríe– te he extrañado mucho, cariño

—Hola Andrea, ¿por qué me pediste venir?

Enamorado de una Rulér- Jorge Anzaldo [Chinos]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora