𝙶𝙷𝙾𝚂𝚃𝙱𝚄𝚂𝚃𝙴𝚁𝚂 𝚆𝙸𝚃𝙷𝙾𝚄𝚃 𝙰 𝚁𝙴𝙰𝙻𝙸𝚃𝚈

𝐏𝐫𝐨𝐥𝐨𝐠𝐨 ⁽ˢᵉᵍᵘⁿᵈᵃ ᵗᵉᵐᵖᵒʳᵃᵈᵃ⁾

Raymond Stanz, mejor conocido como Ray Stanz. Era un amante de lo paranormal, desde joven se había interesado en fantasmas, demonios y cosas por el estilo.

Desde la muerte de sus padres, Raymond se había unido aún más al mundo paranormal, había estado convencido a que podría comunicarse con ellos... Nunca pudo.

Pero no por eso abandono el mundo paranormal. Entro a la universidad, conoció a Peter Venkman en una clase que ambos compartieron y luego Peter le presento a Egon.

Al momento de graduarse, Ray comenzó a trabajar en la universidad junto a Peter y Egon, años después fueron despedidos, Ray junto a las personas que consideraba sus mejores amigos iniciaron el negocio de los cazafantasmas.

Luego conoció a Winston, a Janine, a Louis, a Dana... Incluso aunque no le agradara a Walter Peck.

El negocio iba bien, fueron demandados... Sí, pero el asunto se resolvió. Los cazafantasmas eran conocidos por toda Nueva York, algunas personas los consideraban héroes y otras no.

Todo iba tan bien, hasta aquella noche, en aquella cena en la presidencia. El primer ataque de los salvadores.

La maldita noche en la que Louis y Peck murieron. Aunque no le agradaba Peck, Ray sabía que no merecía morir así.

Ni él y Louis.

Ray solía ser una persona positiva, era un hombre con bastante energía... Pero los sucesos que lo llevo a estar en un mundo falso.

Sentado en su propia cama, sintiéndose abandonado, con miles y miles de recuerdos que le llegaban a su mente.

El más repetido de ellos, el cayendo a un vacío, lograba sentir el dolor de la caída. Estuvo consiente por algunos minutos hasta que vio como Michael llegaba. Le ordenaba a algunos encapuchados a que lo levantaran con cuidado.

"Estarás bien Raymond", Michael le sonrió, "Todo mejorara"

En ese momento, cayo inconsciente.

Y cuánto tiempo había pasado en aquel falso mundo, no lo sabía. Lo único que sabía era que aquel hombre completamente feliz y emocionado.

Se había ido, Ray era consciente de que ya no era aquel hombre, ya no quedaba ningún Ray contento.

¿Cuántos días había pasado desde que había decidido quedarse en aquel mundo falso?... Quizás tres o cuatro días.

Y eso lo sabía por qué Michael había puesto un calendario en donde indicaba aquello. En esos momentos Ray estaba solo.

No tenía ninguna comunicación con Peter y no lo intentaba.... Peter tampoco intentaba hablar con él.

La única conversación que tenía era con Michael, conversaciones que no quería tener pero su cuerpo no lo obedecía.

Michael se acercaba a él. Aunque lo intentara... No podía levantarse, no podía dejar de contestar las preguntas de Michael.

Su cuerpo no lo obedecía, aunque una parte de él quería irse de aquel lugar. Otra parte de él quería quedarse ahí.

No quería imaginarse el cómo estaría el mundo real. El mundo real estaría infectado de fantasmas y no quería enfrentarse a más fantasmas.

Solo quería esconderse y no volver a salir del mundo.

De aquel mundo falso.

-Doctor Stanz- Michael estaba en la entrada del cuarto compartido- le traje algo de comer

Michael dejo una bandeja de comida al lado de la cama de Ray.

-Estas envenenando el agua, ¿Verdad?- Ray pregunto- no soy un idiota

-Sé que no lo eres- Michael sonrió- tú y Peter solo son parte de mi táctica

Ni siguiera sabia donde esta Peter.

-Peter tampoco es un idiota- Ray susurro

-Eso ya lo sé doctor- Michael sonaba tan confiado- pero como ya lo dije, ustedes dos son parte de mi táctica, ahora... ¿Por qué no comes y luego los tres nos ponemos a jugar las cartas?

-Diga lo que diga... Haga lo que haga, lo terminare haciendo porque tú tienes el control- y Michael parecía más que satisfecho con escuchar aquella respuesta

Michael sonrió, se empezó a alejar de Ray.

-No sabes cuánto te odio- algunas lágrimas comenzaron a caer por las mejillas de Raymond

-El corazón de los cazafantasmas no puede odiar a nadie- Michael estaba por salir de aquel cuarto compartido- coma doctor Stanz, nos espera una sección de poker

Y ante su voluntad, Ray comenzó a comer.