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                            Sarada

La noche antes de la tormenta.

Eran cerca de las 11 de la noche, por más que daba vueltas en su cama no podía conciliar el sueño y más a un desde que supo que sumire estaba con kawaki.
Estiro su mano para tomar su celular y marcó un número que se sabía de memoria, espero pacientemente a que tomaran la llamada.

- sucede algo señorita sarada?- respondio una voz adormilada.

- juugo prepara el auto saldremos -. Dije finalizando la llamada.

Me levante de mi cama, estaba molesta con ese chico y más aún cuando el ni siquiera le había mandado mensajes ni llamado.

¿ Que hacía con esa chica? No se supone que estaba desaparecida?

¿Debería decirle a boruto?
No eso si que no, acusaria a kawaki.

Lo mejor era que yo fuera investigar y saber que intenciones tenía ella con kawaki y boruto. No me parecía que ella se metiera entre kawaki y yo, ni que jugará con los sentimientos de boruto.

Le molestaba mucho ese tipo de gente, que creía que podía hacer lo que quisiera. Me cambie mi pijama por otra ropa y me coloque los tenis, en mi bolso de mano heche gas pimienta, por si acaso.

Abrí las puerta de mi habitación muy despacio, no quería hacer mucho ruido para así evitar que mis padres se despertaran. Juugo era muy leal a mi padre, pero también era leal a mi así que no creía que me fuera a traicionar.

Baje por las escaleras, todo estaba en silencio y las luces apagadas. Abrí la puerta y note que las luces del auto estaban encendidas, subí.

- a donde vamos niña sarada?-. Pregunto el hombre de cabellos naranjas.

- iremos a la casa de kawaki -. Dije mientras miraba mis uñas.

- a esa zona?-. Pregunte el hombre con sorpresa, salimos de mi casa.

- si, espero contar con tú silencion-., dije sería.

- ya sabe que si señorita sarada, pero déjeme darle un consejo-. Dijo mirándome por el retrovisor.
Lo mire.

- tenga cuidado, tiene poco de conocer a ese joven. No siempre todo es lo que parece-. Dijo el.
Lo mire sorprendida era la segunda persona que me lo decía en este día.

- tendré cuidado, aun así siempre llevo el gas pimienta que me regalaste -. Dije sonriendo, esperaba que con eso se  tranquilizara.

Note como las calles estaban vacías, al entrar ya en la zona donde kawaki vivía las calles estaban completamente oscuras, me empezaba a poner nerviosa quizás no había sido buena idea ir a buscar a kawaki, no tenía que hacerlo.

- esta muy oscuro -. Dijo juugo.

- si esta zona es algo así-. Dije.

- señorita, siempre que quiera venir avíseme -. Dijo juugo, mientras giraba en una calle.

Empeze a reconocer las calles, estaba cerca de su casa. Saque mi celular para ver la hora de nuevo eran las 11:40 pm.
Me recarge en la ventana, mientras esperaba pacientemente que llegáramos.

- hemos llegado-. Dijo juugo estacionando el auto.

- espera aquí juugo -. Dije mientras tomaba mi mochila y salía del auto.

Cruce la calle y note el edificio donde el vivia, esperaba que por el bien de el sumire ya no estuviera. Subí las escaleras mientras iba ensayando lo que le diría, pero no dejaba de pensar lo estúpida que era, iba a buscarlo siendo que el ni siquiera había intentando buscarme después que me molestara.

Mi Error (Kawasara)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora