Entrevistando a Jimmy Garoppolo

Parte 5: Visitas

No había nada interesante en la televisión, estuve cambiando de canal por unos segundos pero nada que llamara mi atención, al final deje un programa de concursos. A pesar de llevar tres días en el hospital parecía que tenía toda una vida acostada en la camilla, los días se pasaban bastante lentos, cosa que no me agrada. Lo único bueno que me había pasado desde el accidente era el regalo de Jimmy Garoppolo, es extraño ya que las rosas blancas son mis favoritas.

Las visitas son cada vez más frecuentes, no solía ser una persona popular, pues son pocas las personas a quienes puedo llamar amigos, pero tras el accidente muchas de mis amigos que no veía en años pasaron a desearme pronta recuperación. Emma, una compañera del trabajo entra

—Hola Sidney, perdona que no hubiera venido antes pero fui a Seattle para entrevistar a Russell Wilson, probablemente deje a los Seahawks

—Descuida, sé que estas muy ocupada

—Supe que no pudiste entrevistar a Jimmy G, lo siento mucho, sé que era tu sueño conocerlo

—Sobre eso, adivina quién me mando ese ramo de rosas

Emma mira de reojo el ramo de rosas sobre la mesita y luego me mira sorprendida

—Si me dices que las envío Jimmy no te creeré

—Sí, fue él

Emma se para para leer la nota, luego regresa a sentarse en el sofá a un costado de mi cama sorprendida

—Supongo que le diste lastima y por eso te las envío

Me quedo callada, ella me sonríe incomoda, ahora que recuerdo Emma odia los hospitales, especialmente la sala de urgencias

—Alexa nos asustó a todos cuando nos dijo que un camión te atropello y falleciste, dios fue tan extraño, te imaginas que hubieras muerto, luego el intendente nos dijo que sobreviviste y todos de ¿En serio? Dios debo confesar que hasta había escrito mi discurso que diría en tu funeral, ¿Quieres oírlo?

—No creo que sea buena idea

—De todas maneras te lo diré

Emma saca su celular y se queda unos segundos mirando la pantalla

—Aquí esta—Se aclara la garganta y comienza a hablar—Sidney Jones no solo era una empleada más en la empresa para la que trabajo, también era mi mejor amiga, un extraordinario ser humano que... Aquí haría una pausa para llorar y limpiarme las lágrimas con un pañuelo, después me disculparía con el público y seguiría hablando... Era un extraordinario ser humano que siempre se preocupaba por el resto, nunca podré conocer a otra persona como ella, que dios la tenga en su santa gloria

No sé qué decir, en realidad Emma y yo no somos grandes amigas, apenas si tenemos como cuatro meses de conocernos, por lo que creo que es un poco exagerado, aunque por experiencia sé que la gente se vuelve algo hipócrita cuando uno fallece o le pasa algo malo.

—¿Qué opinas?

—Es bueno —digo— Algo dramático

—¿Tú crees?

Observo de reojo el televisor, al parecer uno de los concursantes tuvo un ligero accidente y tuvo que recibir primeros auxilios, pero nada grave ya que luego se pone de pie y sigue caminando.

—¿Cuándo vuelves a trabajar?

—No lo sé, espero pronto

—Bueno, pero si quedaste bien verdad, el otro día vi en Greys Anatomy que Mark Sloan parecía estar bien tras el accidente de avión y de pronto se murió como si nada.

—Espero y no sea el caso

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Ya paso una semana desde que estoy en el hospital y mi paciencia está por terminar, mi espalda esta entumecida y mis piernas suelen dormirse hasta cinco veces por día. Lo único que me mantiene cuerda además de las rosas de Jimmy que ya están comenzando a marchitarse es el libro que mi madre me regalo, Los hombres que no amaban a las mujeres, de Stieg Larsson, voy en la página doscientos ochenta y cada vez se pone mucho mejor. Mi madre está dormida a un costado mío, ha sido difícil para ella pues desde el primer día ha estado conmigo. Observo en mi celular las últimas noticias sobre Jimmy, siguen los rumores sobre su traspaso a otros equipos, principalmente a Washington, recientemente llamados los Commanders, aunque personalmente preferiría que se fuera a los Saints o Steelers de no quedarse en San Francisco, lo que es muy poco probable.

Revisando mi instagram me llega un mensaje de un número desconocido, no dice mucho, solo un Hey Baby, ¿Cómo estás?