One Night Stand

Capítulo 2

El Denny's... ¡Apestaba! Joder. No hay suficientes palabras para describir el horrible olor que ese lugar desprendía. El humo de los cigarros empañaba la poca visión que las torpes luces de la barra emanaban.

-¡Cam! – grito un chico de ojos azules y cabello negro. Alto. Bastante más alto que yo. Tomando en cuenta de que mi estatura no era más de 1.59. – Por aquí Bro, te hemos estado esperando...

Me detuve antes de acercarme más a esa mesa. No podía creerlo. ¿Cómo demonios esperaban que me quedara en este lugar mal oliente con 6 chicos desconocidos? ¡Qué demonios!

-Muy, muy bien – dijo Cameron una vez que estábamos frente a ellos – Chicos como ya saben ella es mi novia Anabelle y el tapón – recito burlón refiriéndose a mi altura- es Dylan mejor amiga y roomate de Ann. Cuídenla, conózcanla y.... bueno... me largo...

Giro sobre su eje jalando a Ann del brazo para llevársela con él. Le paro en seco.

-Espera, espera. – Dije exasperada – si me vas a dejar aquí, por lo menos hazme el jodido favor de decirme sus nombres... idiota.

Se rió estúpidamente posando una mano detrás de su cabeza.

-cierto – dijo - ¿Fui un poco rudo?

Arquee una ceja.

-Vale, vale – dijo – ahí va – si viro para ver a sus amigos – el de ahí es Jack... y ese de ahí también es Jack... el estúpido con una banda rosa sobre la cabeza es Matthew... el de pelo de niña es Nash y el de enseguida es su mini versión Hayes... Ah sí y el reprimido de la esquina es Aarón... disfrútalos. – y ahora si se alejó sin que pudiera objetar. 

-Ah... idiota – murmure.

-Disculpa Tapón – dijo el que parecía responder al nombre de Nash – puedes sentarte aquí si quieres.

-¿Eh? – dije sin entender.

-¡Estúpido! -  uno de los Jacks recrimino golpeándolo en la cabeza. – tienes que ser más dulce.

-¿Dulce? – Pregunto Nash – está bien – se acercó a mí de nuevo – Querida y dulce tapón, quiero decirte que bajo esa blanca y translucida playera puedo ver tu sostén bellamente negro y me encantaría que tomaras asiento junto a mí en esta bella mesa. – Giro orgulloso hacia el chico de antes – mejor ¿no? A que la derretí...

El Jack estampo su palma en la cara.

-IDIOTA. – Le soltó y después se acercó a mí – Hola ¿Puedo saber tu nombre?

Debo admitir que su voz era adictiva, sus cejas negras acorde con su cabello hacían verlo como modelo de revista.

-Dy – Dylan – tartamudee

-Hermoso – dijo – Yo soy Jack Gilinsky.

-Aja – asentí aun hipnotizada por sus ojos profundos resguardados por cejas imponentes.

Me guió hasta uno de los lugares vacíos de la mesa.

-Él es Jack Johnson – me introdujo a un chico más pequeño, quien a pesar de compartir nombre con el, parecía su exacto opuesto. Su cabello güero corto escondido debajo de una gorra gris y sus ojos verdes, lo hacían ver más pequeño de lo que era.  

-Hola – saludo Johnson. Me sorprendí al escuchar su voz era más... masculina... de lo que pensé.

Le dedique un saludo tímido acompañado de una sonrisa.

-Yo soy Aarón, Aarón Carpenter – saludo el chico de la esquina – y Él es Hayes, y el estúpido de ahí es Nash, son hermanos... así que ten cuidado la estupidez es hereditaria con los Grier. 

Repentinamente todos los de la mesa chillaron a carcajadas yo me les uní.

-Oigan, oigan – hablo Nash – Gracias "Reprimido de la esquina" por deshonrar a mi familia – le dedico una sonrisa asesina – Dice Shawn, que viene en camino.

Todos hicieron sonidos de felicidad incluso algunos aplaudieron.

-... Si... - dijo el de la banda rosada – Carter también está por llegar.

El alarde de mis compañeros incremento y yo solo pude quedarme ahí, paralizada, pensando.... ¡COMO DEMONIOS VOY A CONVIVIR CON OTROS 2 CHICOS! ¡AHG, DATE POR PERDIDA ANN!.... y tu Cameron... espera tu muerte....

-Por cierto – dijo el de la banda – soy Matthew, Mathew Espinoza. – me miro como esperando respuesta.... Y mi cara permanecía en blanco (...) (Cargando.... Procesando...) "¿Qué demonios está esperando este chico?" pensé.

-Hablo enserio – dijo – si quieres buscarme en Facebook, Twitter... estoy abierto a aventuras – me guiño el ojo.

-Ah – asentí torpemente – vale

Todos chillaron a carcajadas nuevamente y empezaron a hacer distintos comentarios... algunos obscenos... sin embargo conforme el tiempo pasaba lograba sentirme más cómoda alrededor de ellos. Como habían dicho, los otros dos chicos llegaron y tuve que presentarme.... Si fue igual de incomodo que antes.

-Soy Shawn Méndez – saludo – Es un gusto.

-Claro – sonreí – igual

- Carter Reynolds – dijo saludando igual de incomodo que yo, solo moviendo su mano de un lado a otro con una sonrisita casi igual de estúpida que la mía.

Estos tomaron asiento y empezaron a bromear. A veces incluso hasta sentía que se olvidaban que había una chica con ellos. Sus tonterías hacían que me riera como nunca me había reído... estos chicos de verdad estaban en otro nivel.

-Chicos, chicos – dijo Gilinsky, intentando tranquilizarlos – Sammy y Nate, estarán de tour aquí, acaban de llegar ¿Les digo que vengan?

-Pff daaa- dijo Nash – Hace dos meses que no veo a mis bebes, deben estar hartos de todas esas fans tirándose les encima... todas esas presentaciones... debe ser horrible sentir esa adrenalina todas la noches...- suspiro – solo diles que vengan... Mami los cuidara.

  Todos lo miraron mal.

-Solo diles que vengan – dijo Johnson – Amarramos a Nash en el baño después.

Todos volvieron a reír.... Bueno ¿Qué son dos chicos más? No puede ser tan malo...

10 minutos después dos chicos altos y bastante bien parecidos entraron por las puertas.

-Sam, Nate – grito Gilinsky – Por aquí chicos.

Los susodichos sonrieron automáticamente al vernos. Caminaron hacia nosotros. Uno de cabello cobrizo y otro de cabello negro alborotado.

-Hey bros – saludo el de pelo cobrizo – Todo Magcon reunido, que sorpresa.

Choco manos con todos, mientras que el de pelo negro solo dedico un saludo con la mano  hacia toda la mesa.

 -¿Quién es la belleza? – Pregunto el de pelo cobrizo una vez que tomo asiento junto a mí 

-Es el tapón – dijo Nash – es amiga de la novia de Cam.

-Ahh – dijo, para después mirarme con una sonrisa – Samuel Wilkinson, pero puedes llamarme Sammy - saludo

-Dylan – salude de vuelta.

Finalmente su acompañante se dejó caer pesadamente sobre la silla seguida a la de Sammy.

-Nathan, llámame Nate, como sea – dijo casi sin verme.

-Discúlpalo – dijo Sammy – estuvimos en un vuelo de 14 horas, no ha dormido bien.

-Ah- asentí torpemente.

 Y así inicio una conversación, en la que tenía poca interacción con aquel individuo, sin darme cuenta que eso podría llevar a algo más.