➪𝑺𝑨𝑵 𝑽𝑨𝑳𝑬𝑵𝑻𝑰𝑵

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Asiento con mi cabeza ante la despedida de Foggy, observó como se marcha fuera de la tienda, después de unos segundos también yo salgo para caminar hacia las demás tiendas y observar las cosas que venden, entro a una tienda donde venden joyería y empezó a observar las joyas que tiene, aunque Matt suele quitárselas para su trabajo nocturno.

Me acerco a una vitrina dónde está una cadena con una placa que tiene alto escrito algo en Braille según la etiqueta que tiene al lado derecho, me acerco a uno de los vendedores de la tienda y preguntó que tiene escrito la cadena en la placa, según los vendedores lo que está escrito en la placa con Braille es la palabra "Sempiterno", significa que dure siempre; que, habiendo tenido un principio, no tendrá un final.

Compré la cadena y fui a otra tienda para comprar un moño de regalo y ponerme en la cabeza cuando Matt me diga que es muy linda, pero no puede usarla porque la macharia de sangre, se le caería, la robarían, la tiraría y miles de cosas por las cuales no debí comprarla, aún así la compre.

Al comprar lo necesario pedí un taxi, el taxi me dejó en el edificio del departamento que comparto con Matt, salgo del taxi no sin antes pagarle al conductor, le agradezco por traerme y cierro la puerta del taxi. Camino hacia el edificio, subo las escaleras hasta llegarar al piso número tres, saludo a unos cuantos vecinos y me detengo cuando estoy frente a la puerta de madera del departamento.

Suspiró al ver la caja aterciopelada que el chico de la tienda me dió por comprar el la cadena, entro al departamento y mis fosasas nasales se inundan de un rico aroma a pasta. Una sonrisa se forma en mis labios de forma inconsciente mientras cierro la puerta detrás de mi.

—Cariño —la voz gruesa y suave de Matt me llama con ese apodo cariñoso que le encanta usar—. Es tarde.

Camino para llegar a la sala de estar, giro sobre mis talones observando a mi novio en la barra con dos platos de pasta y albóndigas, dos copas de vino y un regalo a lado del plato que tiene frente a él. Me encamino hasta llegar a la butaca, tomo asiento frente a él.

—Perdón cariño terde un poco en el centro comercial —explico observando el hermoso rostro de Matt, sus lentes ocultan sus ojos avellana que me encanta ver, pero para muchas personas son incómodos, sus labios están formados en una sonrisa, sus mejillas un poco ruborizadas por el repentino calor de la sala.

—Antes de comer quisiera que abrieras tú regalo —dijo con un tono alegré que pocas veces puedo escuchar.

Asiento con la cabeza, tomo el regalo que está en vuelto en un papel rojo con una tarjeta que dice feliz San Valentín, para mí chica.

—Karen me ayudó a envolverlo —comento al notar que aún no abro el regalo.

Sonrió para después arrancar el papel, mi corazón late con ternura al observar que es uno de los libros que había pensando comprar en este año para poder leerlo, levantó mi mirada del libro para observar la sonrisa de Matt, esa maldita sonrisa que hace que mi corazón se acelere mas.

—Feliz San Valentín mi amor —toma mi mano y la entrelaza contra de ella.

—¿Karen reviso mi lista de libros? —preguntó divertida sabiendo que no le había dicho a Matt sobre comprar el libre de: asesinó de brujas. Sin borrar esa sonrisa asiente con la cabeza, levantó nuestras manos. Me levanto de la butaca, camino hacia el sin soltar su mano, me siento sobre él, su mano derecha encuentra mi cintura—. Eres un ángel caído del cielo Matt Murdock —el suelta una casta risa—. Me alegro de conocerte, te amo.

No solo lo digo por el regalo, Matthew es un caballero, siempre me hace sentir cómoda, me trata bien y hace que me sienta bien, suele hacerme reír hasta que mi estómago duele, además que es un maldito ángel tallado por lo dioses aunque él suele decir que es todo menor un ángel. Él hace que tenga una razón por la cual me levanté cada mañana.

—Tú me haces el hombre más feliz de la tierra te mereces esto y más —dejo un beso tierno y dulce en mis labios, yo sigo el ritmo lento y suave para después separarme de él al darme cuenta que aún tengo la bolsa donde está su regalo.

—Yo también te compre algo —digo llamando la atención de mi novio. Saco la caja aterciopelada de color rojo, dejo de tomar su mano y la extiendo para dejarle la caja.

—¿Qué es cariño? —pregunta curioso con esa sonrisa pequeña que se forma en el lado izquierdo de sus labios. Abro la caja aterciopelada y él suelta mi cintura para tocar la cadena, desliza sus dedos hasta llegar a la placa y empezar a tocar las letras en Braille quedando un poco sorprendido.

—¿Sempiterno? —pregunta al terminar de leer lo que la placa tiene.

—Significa que no habrá un final o dura para siempre —murmuro acariciando su cabello castaño enhge mis dedos—¿Te gustó?

—Si mucho...

Antes de que me dijera una razón por la cual no la usaría lo calle colocando mi dedo índice en sus labios, saco el moño rojo y coloco sobre mi cabeza, toma la caja junto con la cadena y la dejo sobre la isla, toma sus dos manos y una risa nerviosa sale de sus labios cuando empiezo a deslizar sus dos manos sobre mi cuerpo.

—¿Qué haces? —rie un poco apretando mis senos provocando que reprima un jadeo.

—Se que me dirás que no puedes ponerte la cadena porque la vas a tirar, la macharas de sangre, te la romperán y entonces idealice un plan b, tú otro regalo soy yo —murmuro con una risa divertida que él sigue.

—Te iba a decir que me la pusieras, pero me gusta mi segundo regalo —deja de tocarme para llevar sus manos a mis mejillas y acercarme a él para darme un suave y lento beso que yo sigo con gusto.

—¿Entonces si la vas a usar? —pregunto con una pequeña emoción que el nota muy bien.

Matt pasa sus manos peinado los pequeños cabello que están en mi rostros y colocándolos atrás de mi oreja.

—Si cariño, la usaré —me dió una sonrisa que muestra sus dientes blancos—¿Ahora puedo disfrutar de mi segundo regalo? —preguntobcon un tono seductor que hizo que me sonrojara.

—¿Y la comida?

—La podemos calentar después.

—Bueno está bien disfruta de tú segundo regalo.

Como si Matt fuera un pequeño niño de cinco años su sonrisa se hizo más grande y fue directo a mi cuello dejando besos húmedos en el trascurso para después meter sus manos sobre mi suéter y llevarlas sobre mis senos para tocarlos.

—¿Te gustó tú regalo? —pregunte divertida por notarlo desesperado.

—Me encantó cariño.


×××
Holaaaaaaa, espero y hayan tenido un bonito San Valentín con sus amigos o pareja (si no tienen ninguna de las dos como su servilleta espero que hayan tenido un día tranquilo y bueno). Feliz San Valentín por cierto <3

Aquí les tengo otro One shot de Matt, espero y les guste.

Nos leemos pronto <3

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