-Paremos por unos minutos. - Sungjae dejó ir la mano de su prometida y tras recibir una botella de agua y un par de pañuelos por parte de uno de sus guardias, rápidamente decidió acercarse a ese pequeño que efectivamente había comenzado a llorar. - En el norte los manzanos no tienen dueño. - sonrió amablemente. - Es algo que nos proporciona la naturaleza y por lo tanto nuestra gente puede servirse de ello siempre que devuelvan a cambio el doble de lo que toman.

Mientras el líder norteño hablaba, Jungkook giró su cabeza hacia la zona en la que un par de minutos atrás había sido capaz de localizar al hijo de los Kim. Este continuaba sentado sobre una inclinada roca mientras charlaba con su mejor amigo y algunos lobos que él no había llegado a conocer en sus anteriores visitas al norte.

Taehyung alzó una de sus manos cuando percibió la conocida mirada de Jungkook, quien estaba situado en la primera parte de la fila de personas que se encontraban recorriendo por primera vez los montes del norte de los que él y su gente tan orgullosos se sentían.

-Puede tomar cuantas quiera, solo tiene que asegurarse de lavarlas bien antes de llevárselas a la boca. No falta mucho para que lleguemos al primer poblado, en el campamento de la guardia del norte hay algunas tiendas en las que podrán encontrar cestas o bolsas para llevarlas de vuelta al sur cuando la excursión se termine. - Yook Sungjae se agachó y poniéndose de cuclillas llevó su mano hacia una de las manzanas todavía frescas que habían caído sobre el suelo. - Debes escoger bien, aquellas que han caído hace poco son adecuadas para que las consumas pero las demás pronto se estropearán debido a las altas temperaturas del verano. Toma solo esas que vayas a comer, especialmente las que podrás usar antes de que terminen pudriendo.

-¿Qué pasa con el resto de manzanas? - el niño preguntó, todavía con un puchero mientras se abrazaba a las piernas de su madre.

-Aquellas que queden atrás servirán de abono para el suelo, la naturaleza se alimenta a sí misma y crece con gracia cuando se lo permitimos. Si además de eso le ayudamos un poco, todo aquello que ves ahora perdurará en el tiempo.

El niño asintió levemente y tras dedicarle una mirada a su madre volvió a acercarse a esas manzanas que momentos atrás su progenitora le había obligado a dejar en el sitio en el que las había encontrado.

Yook Sungjae no tardó en ponerse de pie para regresar al lado de Jeon Joy, quien por costumbre estiró su mano para tomar la de su prometido.

-¿Los manzanos no tienen dueño? - preguntó confundida. - ¿Cómo se ganan la vida los lobos del norte entonces? ¿Acaso no hay comercio?

-Lo hay, pero aquello que de por sí nos regala la Luna no es algo a lo que podamos o queramos ponerle precio. Las personas tienen sus casas, huertos y terrenos. Aquello que cultivan por sí mismos puede ser vendido en los distintos poblados del norte, hay plantaciones que necesitan más cuidado que otras.

Jeon Joy y Jeon Jungkook parecieron asentir a la par, en realidad aquello no distaba demasiado de lo que el hijo de los Kim le había explicado al sureño. El padre de Taehyung tenía un variado huerto en la parte trasera de su casa, de donde extraía multitud de hierbas medicinales para su labor de sanador. Estaba seguro de que este creaba y vendía infinidad de ungüentos naturales a juzgar por el modo en el que siempre parecía estar cocinando infusiones o creando cremas para sarpullidos y heridas en la cabaña del territorio neutral. Lo había visto trabajando en gran cantidad de ocasiones cuando terminaba sus entrenamientos y entraba en la casa de los Kim en busca de agua fresca.

-Hay tiendas en el poblado de guardianes. - mencionó Jungkook, recordando aquello que solo un día atrás él había podido comprobar. - El señor Kim le ha pedido a su hijo en un par de ocasiones que le ayude a obtener hierbas medicinales y he podido verlo con mis propios ojos al acompañarlo. El norte no es el sitio prehistórico del que nuestros senex nos han hablado tantas veces. - Jungkook sonrió, envolviendo los hombros de su prima con uno de sus brazos. - Aunque no podemos culparlos, hasta hace poco incluso mirar hacia el norte por demasiado tiempo podría ser considerado como un acto de traición.

Alpha War [Taekook] - #SBATAEKOOK23Where stories live. Discover now