轻狂
Qing kuang
Reckless
Sinopsis:
El capitán de baloncesto, Huo Ran, aparentemente conocido por su mal temperamento y el rumoreado rey de las peleas, Kou Chen, se habían enfrentado en la cancha de baloncesto, pero, inesperadamente, ambos quedaron e...
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Cuantas más personas haya, era más sencillo comer.
Kou Chen, Xu Chuan y Wei Chaoren han comido aquí muchas veces antes, pero nunca había sido capaz de comer de esta manera como hoy.
Cuando sonó el teléfono mientras estaba de pie al lado de la carretera esperando un taxi, ni siquiera quería contestar el teléfono, sentía que le faltaba el aire.
—Hermana —Contestó el teléfono.
—Yo, ¿acaso te han golpeado? —la voz de Kou Xiao provino desde el otro lado: —¿Debo llamar al 120 por ti?.
—Acabo de terminar de comer en tu restaurante —dijo Kou Chen: —Comí demasiado.
—Excelente —dijo Kou Xiao: —¿Le preguntaste a tus compañeros qué se debe llevar?, Lao Yang y yo iremos por tiendas para el aire libre el fin de semana, así compramos todo de una vez.
—Te lo diré mañana —Kou Chen miró a Huo Ran: —Esta persona es una experta, estoy negociando para que nos lleve directamente. Tú y Lao Yang compartirán una tienda, y sin él, ustedes dos se quedarían dentro de su tienda, mientras que yo...
—Tú te quedarás vigilando afuera, en medio una tierra salvaje, ¿siempre debe haber alguien que cuiden, no? —Dijo Kou Xiao.
—¿Puedes repetirlo? —dijo Kou Chen: —¿Quieres que muera?
—Si se lo estas pidiendo a tu compañero de clases, a que nos guíe, él tiene que estar dispuesto a a hacerlo. Será mejor que se prepare con dos manos, y más con novatos como nosotros —El pensamiento de Kou Xiao sobre esto es racional y claro: —Mientras no le debas dinero, dudo que esté dispuesto.
—No te preocupes por eso, ¿hay algo que no haga bien? —dijo Kou Chen.
—No hay nada que no puedas pasar por alto —dijo Kou Chen: —Está bien, esperaré tu carta, cuelga.
—Mm —Kou Chen colgó el teléfono.
Huo Ran tenía una gran boca y era de mal genio, pero a simple vista es un buen conversador. Kou Chen sintió que no debería ser un problema para él llevarlo, el problema era que durante este período de tiempo, tenía que complementar sus conocimientos al aire libre, para no ser arrastrado hacia atrás y que Huo Ran no se ría de él.
Y no estaba dispuesto a caer en una zanja como Jiang Lei y dislocarse, para que luego Huo Ran le pise el pecho.
El primer día de regreso a la escuela, la administración del dormitorio ya había sido estrictamente verificado. Cuando regresaron al dormitorio, Lao Yuan estaba esperando en la puerta del dormitorio.
—¿Aún no es el momento? —Huo Ran rápidamente sacó su teléfono.
—No —dijo Lao Yuan: —Solo estoy aquí para ver si está todo desempacado.
