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Estaba sentado en mi aula que era construido para mi y hermanos, claro, también un amigo mio llamado "Draken" estaba desde la infancia, el era ya como un hermano para mi.
Note que uno de mis hermanos "Izana" se va del aula eso no me importaba en lo absoluto, seguí prestando atención a las clases aunque era tan aburrido ya me quería largar del lugar.
Pasaron horas ya me iba irritando mas de lo debido jugué con mi cabello plateado aunque no era tan intenso pero sin despegar mi mirada en la pizarra escuchaba como mi hermano y amigo conversaban.
× A cuanto apuestas que lo botara al profesor? se nota que esta irritado- Shinichiro habla en un tono sutil, se podía escuchar esta donde estoy
× 1000$ dólares y callate que nos descubrirá Mikey- Draken responde algo tranquilo al decir verdad no prestaba atención lo que decía a su nuevo profesor.
Todos los profesores que pasaban en mi aula salían despedidos ya que había tantas razones, pero el mas común era de que me irritaba de como daba las clases y le pedía a mi abuelo que los despida.
Si...mi abuelo era director del colegio y empresario muy conocido hasta el mismo decidió construir esta institución educativa para jóvenes ricos teniendo muchos privilegios por ser de mucho dinero.
Suena la campana eso me hace levantar del asiento , camino al "nuevo" profesor, estando ya cerca a su oído digo estas palabras dejándolo helado al pobre hombre que solo podía hacer es cerrar la boca y no decir ninguna palabra.
– Agradece que te salvo la campana...sino ya te hubieras marchado como aquellos profesores repugnantes
En eso me fui del lugar note que Shinichiro y Draken me seguía ya era normal siempre me seguían, eramos tan unidos en algunas ocasiones, Izana llega trotando hacia nosotros fue raro el siempre llega a tiempo...no le tome mucho rollo al asunto y me estaba dirigiendo a nuestra sala de merienda.
Unos guardias abrieron las puertas de una zona del colegio escuchaba como la multitud se acercaba a mi y los que estaban detrás de mi, ellos saben hasta donde tienen que estar les mirada con seriedad a todos. Sus gritos de la gente me irritaba que observe unos chicos mirándome con admiración...mis víctima...
Me acerco a ellos en ese momento se puso en silencio ya sabían lo que pasaría aquellos muchachos les que de bien por unos segundos para alzar mi mano a la altura de mis caderas.
– Pasame tu jugo de tomate
Reaccionaron rápido para entregar su jugo me dispuse a ver el jugo de tomate por un rato seguía en silencio, sin mas que hacer le desparrame en su camisa uno de los chicos algunos miraban con asombro otros reían aquellos débiles que no pudieron hacer nada. Al terminar tira el jugo para caminar hacia mi rumbo.