Do Better (antes Like That) [Jack Gilinsky]

Capítulo cinco

"Come on girl, party with me. You know its gonna be a wild night. Move that body to the melody."

KATIE HOOMES

Mi madre detuvo el carro frente a la casa donde era la fiesta, de donde salía el claro sonido de la música con una canción de moda.
-Gracias, ma. Chau- le dije desabrochándome el cinturón y abriendo la puerta.

-Gracias- dijo Gaby abriendo su puerta y bajando.

-¿A qué hora las busco?- me preguntó mi madre apenas puse un pie en el asfalto.

-¿A las tres?

-2:40. Pásenla bien- bajé completamente del auto, acomodándome el vestido. -Y compórtense- agregó.

-Ajá- asentí y cerré la puerta.
Dándome un último vistazo, pisó el acelerador y se alejó.

Volteamos y comenzamos a avanzar hacia la entrada de la casa gris, donde la puerta nos esperaba abierta. Entramos y me sorprendió la cantidad de gente. Decidimos ir a la cocina para buscar algo de beber, y en el camino, abriéndonos paso entre la gente, encontramos a Tyler.

-Pero, miren quiénes han llegado, y guapísimas- nos recibió. -¿Cerveza?- nos preguntó, y, cuando ambas asentimos, nos agarró a cada una de la muñeca y nos arrastró el resto del camino hasta la cocina, donde se sirvió un vaso para él y uno para cada una.

Gaby se lo terminó de un viaje, a diferencia mía, que decidí beberla de a poco.

-Bueno, las dejo. Me voy a bailar- anunció Tyler. -Hay un chico bien guapo, y se rumorea que es gay.

-Ve, tigre- le dije juguetonamente, y él nos guiñó un ojo antes de irse.

Me llevé el vaso a la boca justo cuando una voz conocida gritó detrás nuestro;
-¡Eh, Gaby!

JACK GILINSKY

Entramos en la casa y, sin siquiera requerir hablarlo, Jack y yo parecimos acordar en ir a buscar a Katie y a Gaby, esta última en la quien mi amigo estaba interesado hace ya bastante.

Al primer lugar al que recurrimos para buscar fue la sala, donde todos bailaban, pero al no encontrarlas, fuimos hacia la cocina, y, para nuestra suerte, fué fácil encontrarlas, paradas junto a la mesa de bebidas.

-¡Gaby!- Jack llamó enseguida, haciendo que ambas voltearan siguiendo su voz, y Gaby le sonrió al verlo.

Mis ojos se pararon en Katie, quien llevaba un vestido corto y ceñido negro. Le quedaba muy bien, pero lástima que no tenía escote.

-¿Ya estás tomando, eh? ¿Alcohólica?- dije bromeando, lo que fue lo primero que se me ocurrió para hablarle, al notar el vaso de cerveza en su mano.

No me miró de la mejor forma. Quizás no había acertado con las palabras.
-No seas tonto. Apenas llevo dos sorbos.

-Dos sorbos, del octavo vaso- agregué con la esperanza de que riera o algo, pero no funcionó. Rodó sus ojos, cosa que parecía hacer bastante.

-¿Vamos a bailar?- preguntó Jack a Gaby, y ella asintió antes de sonreírle a su amiga para salir detrás de él.

-Bueno,- volví mi atención a Katie y su ganada altura gracias a sus tacones, -supongo que entonces nosotros dos también deberíamos bailar- le sonreí, con una sonrisa que ya alguna vez me había funcionado con otras chicas.

Alzó una ceja y apoyó su peso en su pierna derecha.
-¿Supones?

-Vamos, no seas jodida. Baila conmigo- me acerqué pero ella retrocedió.

No estaba funcionando.

-Lo siento, no bailo con gente que cree que soy jodida- se cruzó de brazos y sus tetas se presionaron, resaltando tras la tela y mis ojos no hicieron más que observar. Pero, inmediatamente, aparté la mirada para que no pensara que era un cerdo.

-Eres jodida, y lo sabes. ¿Vamos?

-Yo seré jodida, pero tu eres imbécil.

-Un imbécil orgulloso- le guiñé un ojo y se le escapó una risita, lo que me hizo sonreír. No me gustaba insistir luego de que me hubieran rechazado, pero esta vez decidí aprovechar aquella ocasión para preguntarle una vez más.
-¿Ahora sí bailas conmigo?

Trató de reprimir su sonrisa. Se tomó el resto de su cerveza en un viaje.
-Está bien.

Mi sonrisa creció. La tomé de la muñeca y la guié fuera de la cocina hasta la "pista de baile", en un espacio donde había suficiente lugar como para movernos libres sin chocar con alguien.
Mi mano bajó hasta la suya, y ella no me detuvo.
-A bailar, madame- le dije levantando mi mano y consigo la suya, indicándole que de una vuelta, a lo que me miró algo extrañada, pero divertida.

Cuando volteó, pude ver un enorme escote en la parte trasera de su vestido, que dejaba al descubierto casi toda la piel de su espalda, bronceada y salpicada con unas pocas pecas.
Me gustó aquel detalle de su vestido. Bastante.

Terminada la vuelta, la atraje hacia mí, posicionando su mano libre sobre mi hombro y la mía un poco por sobre su cintura, y comencé a balancearnos de un lado al otro, sin saber muy bien lo que hacía, pero con esperanzas de hacerla reír, y olvidar cuando me había mirado con disgusto antes.
Se rió.

-¿Qué rayos haces?- preguntó con una sonrisa irresistible.

-Tú cállate y baila.
Le hice dar otra vuelta,  lo que la hizo volver a reír, y pude ver de nuevo su espalda, que de alguna forma me provocaba tocarla. Simplemente tocar su piel.
Me alejé, dejando ir su mano, y comencé a hacer absurdos movimientos de baile el estilo disco, y ella me imitó entre risas. Se veía adorable.

Al rato, miró hacia nuestro alrededor, como buscando algo.
-¿Dónde estará Gaby?- preguntó.

-Seguirá con Jack, de seguro- me alcé de hombros.

-Qué raro, no los veo por ningún lado bailando- volvió a mirar hacia los lados.
A nuestra izquierda, unas chicas se movieron, revelando detrás de ellas a Tyler, el amigo de Katie, bailando extravagantemente. Katie rió y negó con la cabeza.

-Pues estarán haciendo otra cosa- dije alsando mis cejas sugestivamente. -¿Vamos también?- bromeé, pero su sonrisa se esfumó y fue remplazada por una mirada de disgusto.

-No seas imbécil.

Alcé ambas manis en defensa.
-Tranquila, solo bromeaba- aclaré, pero no pareció calmarla. Era una persona con mal temperamento.

-Voy a tomar algo- anunció.

Se dió media vuelta para irse, y volví a admirar su piel descubierta, y como el aquel escote bajaba desde los hombros por su espalda y terminaba unos pocos centímetros por sobre su trasero, sobre el cual se ceñía aún más la tela negra mientras caminaba.
Estaba muy buena.

-Eh, ¡Gilinsky!- apareció mi amigo Luke a mi lado, sacándome de mi trance. -¿Qué haces ahí parado? Ven, el resto de los chicos están en la sala de al lado.
Antes de seguirlo, volví la vista hacia donde Katie se había ido, pero ya había desaparecido entre la gente.