Epílogo

16 6 21
                                    

 Dos meses después...

Por la mañana salimos a misa con Damián agarrados de la mano, luego salimos y conectamos miradas y nos sonreímos en un mutuo sentimiento de cariño. 

 En el estacionamiento me encontré con una billetera y si que estaba gorda de billetes y tarjetas de crédito, pero aprendí a no tomar ventajas vacías y a conseguir lo que deseo mediante mi esfuerzo. La billetera tenía una identificación que pertenecía a Lorenzo Vera. 

 Lo busqué durante cinco minutos por todo el estacionamiento y por fín lo encontré. Era un sujeto de cabello rojizo y ondulado, con una expresión facial intimidante, traje azul y pantalones de jean. Le devolví la billetera y se mostró muy agradecido. Se presentó y terminamos hablando muchísimo. Quién diría que era el director de un programa televisivo de deportes muy conocido a nivel país. Me citó mañana para presentarme ante el en un casting privado para ver si quedaba como panelista nueva del programa. 

 Por la tarde me reuní con Aura y nos sentamos juntas en el banco de una plaza bastante tranquila a esa hora, con pocas personas y un clima soleado que emanaba paz. Le conté de la oportunidad que se me presentó mañana y me dijo:

—Es una oportunidad verdadera, no una ventaja vacía, aférrate a ella y da lo mejor de ti. 

—Gracias Aura. 

 Me siento mejor, en los últimos dos meses retome la universidad con mejores energías y ganas que antes. En la actualidad gracias a mis esfuerzos era la mejor de la clase. Conseguí un nuevo empleo siendo panelista de un programa deportivo más humilde del que estaba antes, pero que me hacía sentir muy bien por el bonito clima de compañerismo que había, y por como tomaban mis ideas con respeto. 

 Deje de lado mi sueño de ser futbolista, me había dado cuenta que no era tan genial como lo imaginaba, ahora mi sueño era dedicarme a ser periodista de fútbol. 

 Damián me apoyo mucho en mis sueños desde que nos deshicimos de El Botines y fue en un novio muy amable, romántico encantador. Fue con el que empecé a ir a la iglesia y había dejado de lado el ateísmo. Aunque cada vez que despertaba con el y lo veía sin remera no podía evitar agradecer no solo a Dios sino que también a la Santa Madre de los abdominales por este divino ser que despertaba siempre conmigo. 

 Mañana tendría la oportunidad de mi vida si, pero me esforzaría por ella dando lo mejor de mí, luchando por mi sueño con confianza y esfuerzo. Aquella noche que me desligue de El Botines confié en mí y luche y lo logré. Ahora tendría que hacer lo mismo y sé que puedo. Tengo fe en Dios y sobre todo también en mí. Pasé lo que pase mañana sé que daré todo de mí y no me rendiré sin antes haber dado lo mejor de mí.

Uno no debe ahogarse solo en sus fracasos, porque una victoria vale más que mil fracasos. 


FIN

Es duro despedir esta historia porque la escribi con mucho cariño. Pensar que iba a ser un cuento corto y miren resulto siendo una noveleta XDDD.

Desde ya graxx a todos los que apoyaron esta historia. Y a vos lector que la va a leer recién después de uno o más años de que este terminada, también te aprecio a pulmón!

Aqui termina este viaje. Espero lo hayan disfrutado así como yo y nos veremos de nuevo en otra historia muy pronto...

UYUY!

BOTINESWhere stories live. Discover now