T2: Chapter Three

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POV/___:

Dejo caer mi bolso sobre la mesa y me tiro a la cama. Estoy exhausta, hoy atendí demasiados pacientes, fueron muchos para un solo día y los síntomas que estás presentaban eran serios.

La puerta se abre y miró de reojo, Desiree entra a la habitación y Lily viene detrás de ella.

—Hola... —me saluda ella y le sonrío.

—¿Pasa algo?

— No, pero estaba aburrida y no me gustó la cosa que me pusiste en la televisión, sus caras son muy raras y me dan miedo. ¿Puedo estar un rato aquí contigo? Prometo no molestar. — Junta sus manos y me sonríe tiernamente.

Como negarme ante esta carita, le hago señas de que se siente al lado mío. Ella rápido se coloca a mi lado junto con la canina en sus piernas.

&¿Como se llama? —Le acaricia el suave pelaje.

—Lily.

—¿Porque se llama así?

—¿Porque si? — Río. — No lo sé, no se me ocurrió otro nombre.

— Es muy linda... — Solo la miró en silencio. —mi mamá dice que no te caigo bien —me mira a los ojos.

Me quedó callada sin saber que decir —¿Tienes hambre? Yo si, haré pizza.

—¡Si! ¡Pizza! ¿Puedo ayudarte? Siempre he querido hacer pizza.

— Vamos, me ayudarás a preparar la masa.

Baja de la cama y me da la mano, apunto de soltarla veo la enorme sonrisa es su rostro, no puedo comportarme como una niña de cinco años. Después de todo, ella no tiene la culpa de los errores que cometió mi madre. Me agachó y la cargo, salimos de la habitación hasta la cocina. Aún en mis brazos saco los ingredientes.

—¿Tienes hijos?— pregunta mientras observa lo que hago.

—No.

Hace un leve puchero. — Yo quería jugar con alguien.

—¿No tienes amigos?— Niega.

— Tenía amigos antes de venir aquí pero casi no nos veíamos solo cuando íbamos al parque los veía.

—¿De que jugaban?

—La cocinita, muñecas, Barbies y muchas cosas más, era muy divertido. ¿Quieres jugar conmigo? Trataré de no ser molesta.

—¿Molesta? —La dejo sobre la mesa.

— Mi amiga decía que yo era muy molesta cuando jugábamos, yo solo quería jugar lo que ellas también jugaban.

—¿Como se llama tu amiga?

— Clara, tiene... —Cuenta con sus deditos, lo cual se me hace un gesto muy lindo. —Seis o... Siete, no recuerdo pero era más grande que yo, junto con su otra amiga. Nunca entendí porque no me dejaban jugar con ellas y me mandaban al lado donde estaban los niños.

Eso me dio tristeza, me recordó cuando yo era niña. Siempre fuí amable con otros niños, mi madre siempre me daba ese concepto. Me sigue contando más de su amiga mientras sale la pizza, ponemos la mesa y esperamos a que Aidan llegue. Mi madre ya había llegado pero subió directo a su habitación, ya que se sentía algo mal.

—Ve a llamar a tu mamá.

—Tambien es tuya. — Se baja de la silla comiendo un pedazo de pizza.

Ignoro su comentario y me siento a ver mi celular. Le mando un par de mensajes a Aidan avisándole que la cena ya estaba, solo lo estábamos esperando a él. Ambas bajan y se sienta al rededor de la mesa.

Lɑ ex de ɑidɑn GɑllɑgherWhere stories live. Discover now