LO QUE NOS DICEN LOS PLANETAS

CAPÍTULO 1

SUCESOS DESAFORTUNADOS

febrero 2020

— Hazlo

A pesar de la nieve y el viento helado no temblaba por frio; la adrenalina se había apoderado de mí, la nieve caía sobre mi cuerpo casi desnudo, mis manos temblorosas se encontraban jugando con la pistola que sostenían. Mi corazón latía cada vez más y más rápido, casi podía sentir que quería salir de mi pecho.

Cada segundo que pasaba me llenaba de poder, como si toda esta situación me hiciera mejor, como si lo que acababa de hacer me devolvió a la vida.

Pequeñas manchas de sangre se encontraban salpicadas sobre el fino vestido de seda color verde que cubría mi cuerpo, además de que uno de los tirantes y la parte de abajo del mismo se encontraban rasgados; mis brazos y cara comenzaban a obtener un color morado en diversas partes debido a los golpes que había recibido con anterioridad y mi cabello estaba despeinado, lleno de copos de nieve. Todo con el propósito de tener una perfecta coartada en caso de que la situación no se ejecutara según lo planeado.

Dolor justo y necesario, para hacer válida toda esta farsa.

— ¡Vamos! No tenemos toda la noche, Luar

— Guarda silencio Sinag —mire a mi acompañante que mostraba en su rostro una mueca impaciente, se acercó un poco a mí y su mano tomo la pistola que yo sostenía— Déjame disfrutar este maravilloso momento, mañana lo abre olvidado todo y quiero sentir al máximo cada sensación antes de volver a la realidad

Ahí frente a nosotros se encontraba un cuerpo ya sin vida, que yo contemplaba como si fuera una de las siete maravillas del mundo.

— Nos van a descubrir si seguimos aquí

Levante la mirada al cielo y sonreí mientras sentía lágrimas resbalando por mis mejillas, estaba hecho.
Había algo dentro de mí, algo que no sabría definir que es; es eso que me hace cambiar completamente, que me llena de poder y me hace más fuerte, que me da la esperanza de convertirme en quien siempre deseé. Cada cierto tiempo esto aparece en mí, me llena de deseo; me hace buscar el placer... Y terminamos así, con un cuerpo sin vida, torturado sin piedad alguna, su traje color azul oscuro rasgado y lleno de sangre, su rostro se encontraba lleno de lápiz labial y muchos moretones comenzaban a aparecer en sus extremidades.

— Espero que disfrutes tu estadía en el infierno, Jack

— Ya basta Luar, tu odio hacia el tipo está más que claro, está hecho, debemos irnos —nuevamente mi acompañante se mostraba inquieto, se había negado mil y un veces a realizar esto, pero había logrado convencerlo y terminó ayudándome

— Bien —susurré más para mí misma que para él, giré a mirarlo y lo observé limpiando la pistola que antes estaba en mis manos, no podía haber evidencia alguna.

— Tu hazaña romántica me hace querer vomitar, tal vez a la chica no le parezca tan encantador como a ti

— Sólo cállate y sigamos con el plan —mi acompañante asintió sin decir una sola palabra, mientras se colocaba unos guantes color negro y se acercaba al cuerpo de Jack; movió un poco sus brazos y sus piernas para hacer un poco más creíble que había sido ahí el lugar de su muerte.

Horas atrás estábamos disfrutando de una gran fiesta y ahora nos encontrábamos frente al lago congelado del pueblo, un lugar poco concurrido donde nadie se atrevía a cruzar por las noches. El frio de esta noche era insoportable, todo se encontraba en silencio; era el clima y la noche perfecta para cometer cualquier delito, sobre todo uno así de planeado como el que acababa de ocurrir.

Mis manos seguían temblando, mis piernas comenzaron a actuar por si solas caminando más hacia la orilla del lago. Estaba lista para el siguiente paso; sentí la presencia de mi acompañante tras de mí, tomo mi mano derecha y le dio un leve apretón en forma de disculpa.

Estábamos listos; debíamos continuar con el plan. Con un cuidado innecesario di un paso hacia el río congelado, comenzaba a sentir el frío recorrer mi cuerpo, el vestido estaba a punto de romperse por completo, sin embargo, no deje que ningún pensamiento intrusivo se apoderara de mí, debía seguir como lo había planeado.

Corrí, corrí sobre el hielo sin mirar atrás, no podía negar que sentía miedo que el hielo bajo mis pies comenzara a romperse y todo saliera mal, pero no era así. Corrí tan rápido que el frio viento golpeaba mi rostro haciéndome olvidar por completo al chico a quien minutos atrás le había arrebatado la vida con tanto placer.

Todo salía a la perfección, el cuerpo estaba donde debía estar y ahora yo fingiendo ser perseguida.

De un momento a otro sentí que alguien se lanzaba sobre mi cuerpo, era el último paso; cerré los ojos y aunque comenzaba a sentir mucho dolor, sonreí con satisfacción.

Todo se volvió negro.  Todo era perfecto.

Los planetas se alinearon cuando el plan culminó.

Cumplí mi misión.

🌑

* Luar Luz/Resplandor de luna

*Sinag Rayo de luz