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01.

-Mamá, tengo que irme, Cameron me espera.- bese su mejilla y salí de casa.

-Hola enana.- beso mi mejilla y caminamos al instituto.

En camino fue silencioso, pero cómodo de mi parte. Al cruzar las puertas de este, una castaña se abalanzo a los brazos de Cameron y lo beso.

-Hola Melody.- me sonrió y le devolví la sonrisa, pero esta no me llegaba.

-¿Cómo pasaron el fin de semana?- pregunto entusiasmada mientras ella y Cameron juntaban sus manos y caminaban felices.

-Bueno, mamá me obligo a cuidar de mis primos pequeños, ¿los recuerdas?- ella asintió.

-¿Y tu Melody?- me sonrió y levanté la mirada de mis preciadas vans.

-Nada interesante.- sonreí y me encogí de hombros a lo que ella río, Cameron paso su brazo por los hombros de ella acercándola aún más. -Creo que, me voy tengo clase y no debo llegar tarde.- ambos asintieron y sin más, me aleje de ellos caminando.

Llegue a mi clase y me senté al lado de Abigaleth, la rubia.

-Hey Melody.- sonrió y me dio un pequeño abrazo.

-Hola.- sonreí

-¿Qué pasa? No te veo muy feliz.- hice una mueca y suspire.

-Cameron y Andrea, ¿te suena?- deje escapar un leve risa y ella asintió.

-Vamos Melody, eres muy linda como para que estés detrás de un chico, ¡de tu mejor amigo!- me alentó y la obligue a bajar la voz.

-No grites, además, yo lo quiero a el.- me encogí en mi lugar y el profesor llego poniendo el orden.

-Buenos días alumnos, quiero un trabajo en parejas.- todos comenzaron a hacer bulla y los mando callar -pero, yo elegiré las parejas.- todos se quejaron esta vez.

Al final, me toco con Andre, genial nombre ¿no? Sería algo incómodo ya que casi no entablo una conversación con el, solo de vez en cuando.

Salí de clase junto a Abigaleth y caminamos por el pasillo lleno de alumnos apresurados tratando de llegar a tiempo a su clase. Alguien tomo mi brazo y voltee esperanzada de que fuese Cameron, pero era Mandy, mi vecina.

-Melody, llegue tarde y no pude entrar a la primer clase, ¿algún proyecto o algo?- asentí y le dije con quien le había asignado el profesor y seguí con mi camino.

Llegue al aula 37 y me senté el último lugar de la primer fila, desde allí se veía todo.

Espere con ansias que Cameron llegara y se sentará a mi lado, pero no fue así.