ABC del MitsuBoru. |Finalizada.

Especial 40k

Y de Yandere.

Es así, cómo Boruto consiguió ganar el corazón de Mitsuki.

Sin errores ni estorbos.

—¿Por qué eres su amiga? Él es un poco raro.

La primera persona que apartó fue a Sumire. Había escuchado de ciertos rumores que ella parecía interesada en Mitsuki.

—¿Uh? Bueno, Mitsuki-kun es así, pero no creo que sea tan malo —Se encogió de hombros—. Quizás Inojin es un poco exagerado y tal vez, por eso piensas que es así..

—Te lo digo por tu bien, Sumire —Sonrió con amabilidad—. Puede que no sea muy conveniente para ti.

Claramente era una mentira y Boruto lo tenía más que claro, sin embargo, Sumire no podía estar cerca de él ni desarrollar ningún sentimiento romántico por Mitsuki.

Boruto lo vio primero y él quería quedárselo.

—Está bien... —aceptó poco convencida—. Si eres tú quién lo dice, entonces será así.

Ya había apartado a la mayoría de chicas de su querido Mitsuki, ahora la única persona que quedaba era su mejor amiga.

Uchiha Sarada.

—¿Te gusta, Mitsuki? —preguntó sin aviso.

Boruto reaccionó un poco ante la pregunta de Sarada. Dejó de stalkear a Mitsuki por Instagram y la miró a los ojos.

¿Tan obvio era?

Uzumaki sólo sonrió con gracia y asintió.

—Así es, ¿por qué la pregunta?

Sarada desvió su mirada y revolvió su helado con la cuchara, éste ya parecía ser una sopa. Desde el momento en que descubrió que todas las chicas que rodeaban a Mitsuki comenzaban a apartarse de él, se sintió incómoda y no lo entendía.

Pero cuando veía a Boruto y a Mitsuki juntos su mente le sugirió una extraña idea.

Una de la que muchos dudarían, después de todo, porque parecía imposible que sucediera en realidad.

—¿Has pensado en confesarte? —preguntó otra vez—. Mitsuki es alguien guapo, ¿sabes?

—¿Acaso estás interesado en él? —Mantuvo su sonrisa y continuó mirando a Sarada—. Tú, más que nadie, nunca hablas de esto.

Sarada dudó un poco, normalmente con Boruto el ambiente siempre era tranquilo y amigable, pero ahora mismo se había vuelto pesado.

Demasiado.

—Él es mi amigo, solamente eso —Intentó actuar con normalidad—. Nunca pensaría en él como una pareja.

—¿De verdad? —Retrocedió y aligeró su semblante—. Me alegra que sea así, pensé que tendría que competir contigo o algo parecido.

Sarada lo miró y rió incómoda.

—Ja, ja... —Dejó de mover la cuchara—. No creo que la competencia sea necesaria. Hablando como personas puedes evitar muchas cosas...

—¿En serio? No lo sabía.

Mientras más lo miraba, menos tranquila se sentía. Boruto parecía distinto en cuanto hablaba o nombraba a Mitsuki, su monótona alegría desaparecía y se transformaba en otra cosa.

Es por eso que, Sarada sospechaba de Boruto.

—He oído de por ahí que Mitsuki tenía un club de fans —compartió otra vez—, ¿no has hecho nada, verdad?

—¿Qué? Claro que no.

Obviamente era una mentira.

—¿Jamás has pensado en lastimar a alguien por Mitsuki, verdad? —preguntó con más sospecha que antes—. Quiero decir, tú nunca has estado enamorado y quiero creer que todo está bien.

Boruto cambió su semblante y frunció el ceño.

—¿Por quién me tomas, eh? —reaccionó con molestia—. Si piensas que he hecho algo así, ¿acaso seguiría siendo yo mismo? Mitsuki jamás me perdonaría algo así.

Según la hermana de Boruto, había algo muy particular en algunas novelas ligeras o animes, algo llamado "yandere".

Obviamente sería una locura pensar que Boruto podía ser así, pero su actuar dejaba mucho que desear.

—Oh, Boruto. Sarada. Por fin los encuentro.

Y justamente cuando Mitsuki‐de quien tanto hablaban– apareció, el semblante de Boruto cambió al de siempre.

Ciertamente, Sarada tenía muy malos presentimientos sobre él. Pero sabía que Mitsuki se encargaría muy bien de ello.

•••

¡Muchas gracias por las 40k leídas!

Jamás pensé que este tipo de historia llegaría a ese nivel de lecturas, aún siendo un reto de escritora, me pareció increíble la cantidad.

Así que hice un pequeño especial (que quizá también sirve como precuela de una próxima historia), para celebrar este momento tan épico.

En fin, feliz año nuevo (muy) atrasado y gracias por las leídas.