Afrontando sus problemas universitarios además de tener muchas ganas de conseguir dinero fácil, Gon a sus 18 años se mete al modelaje webcam, esto con el fin de pagar su carrera de manera más sencilla y mucho menos tediosa. Pero lo que en su diminut...
"Ni el primermundismo se salva de esto". Pensé inhalando nuevamente el tabaco para luego dejarlo en un vaso con agua que tenía a mi lado. El semáforo indicó el color verde, así que me puse en marcha.
Faltaba ya muy poco para llegar así que adelantando uno que otro carro me dispuse a acelerar un poco más, ya que dejaría a Gon plantado si no me apuraba.
—Es por aquí —habló.
—Vale. —Aclaré aparcando el auto en el andén. Quedando a la vista un grande edificio de color beige pastel.
—Gracias. —Se bajó del auto y me dejo los 15 dólares con 3 centavos.
—¿Porque las monedas?
—Porque te robe un Lucky mientras estabas distraído, más pendiente a la próxima, o me llevo la caja entera. —Me guiño el ojo y se fue de la zona.
Abrí mis ojos impresionado con la velocidad en que lo hizo, esta chica tiene algo, algo que la hace ser especial. Porque en ningún momento me distraje, siempre le tuve el ojo en todo momento, aunque es mujer, tengo que desconfiar, pero me salió más astuta de lo que esperaba.
Mirando hacía el frente me dispuse finalmente a emprender a mi hogar. No le echaría tanta cabeza a el tema, es decir, por lo menos me pagó el cigarro.
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—Mira Gon, este proceso físico se hace de esta manera. —Explicaba con mucha paciencia el albino de ojos claros a su amigo, que este a su vez, no se dejaba perder, entendiendo todo a la perfección. —Tomaré una ducha, no soporto este maldito calor, si necesitás algo solo dímelo.
—Esta bien Killu. —Prosiguió el oji marron tomando su lápiz mientras anotaba y a la vez tecleaba en la laptop tal cual como el oji zafiros le había explicado proceso a proceso. Escucho el agua caer al suelo, ahí supuso que ya se estaba bañando, no le hecho tanta importancia al tema, porque en realidad, el bochorno que hacía en ese momento era infernal. Hasta a el mismo le provocaba meterse junto al Zoldyck a la bañera.
Se hecho viento con su mano izquierda mientras a su vez escribía en su libro de física guiándose a la par de lo que le explico el albino, dígito unas composiciones químicas en el computador rápidamente, con el fin de hallar el espacio/tiempo que recorría una masa en determinados segundos. Este y otros problemas se lo dejo el profesor con tal de que recuperara su asignatura, era tal el desquicio de este que no sabía que hacer con el joven muchacho. Realmente era muy descuidado.
Gon podía cambiar, sí. Pero no quería, no ponía ese granito de arena para dejar de ir a fiestas a emborracharse o hasta drogarse para prender más el ambiente, si no fuera por Killua el estaría ya en la calle, el peli plateado es el ángel que siempre está detrás de el, salvándolo siempre en todo momento que el pelinegro lo necesitase. Aun no entendía del por qué lo hacía, pero en realidad agradecía, agradecía tanto que siempre le daba dinero a Killua así él no lo tomara. Cuando no estaba pendiente de Gon lo terminaba por esconder en uno de sus pantalones que tenía colgados en el armario o en unas de sus finas chaquetas de potenciales marcas costosas. Esto era porque clases como estas valían demasiado dinero, y el ojiazul de corazón tan bondadoso al ser el mejor amigo de él, lo hacía gratis.
