Mimosa - Nadie sabe que te quiero

C090 - ¿Te gustan los niños?

Una vez que Ji Xinglan escuchó esto, comenzó a sentirse preocupado. Comenzó a planear cómo llevar a Yan Qiu al hospital para que le hicieran un chequeo después de que terminaran las clases.

Pero antes de obtener una confirmación, decidió no decírselo a Yan Qiu por el momento para no asustarlo por nada. 

Tanto él como Yan Qiu sólo tenían veinte años. Si daba a luz al niño, como mucho, tendrían veintidós. Era un poco temprano, pero no demasiado.

Ji Xinglan siempre había sido una persona bastante leal. Tanto él como Yan Qiu se amaban y su relación tenía chispa. Después de experimentar la separación por muerte, su relación no cambiaría debido a trivialidades en su familia.

Si realmente tuvieran un hijo, él definitivamente querría conservarlo. Pero si Yan Qiu no lo quería, también escucharía a Yan Qiu.

Al principio, Ji Xinglan había mentido para mantener a Yan Qiu a su lado, y también se disculpó por ello. Ahora, se habían sincerado el uno con el otro y estaban saliendo. Ji Xinglan sería cauteloso y cuidaría los sentimientos de Yan Qiu. 

. . .

Yan Qiu tenía la vaga sensación de que Ji Xinglan le estaba ocultando algo. Cuando regresó durante la tarde, había estado actuando de manera extraña.

Pero incluso si se destrozaba el cerebro pensando en ello, no podía entender qué estaba pasando.

No había forma de que Ji Xinglan lo estuviera engañando con Xie Yu.

Pero Yan Qiu no tenía la intención de exigir respuestas. No había necesidad de que se preocupara por nada. Su alfa tenía la capacidad de resolver el problema.

Durante la clase de física, el profesor se ausentó y no vino a clase. Se limitó a enviarles simulacros de examen.

Cuando estaba haciendo una pregunta sobre la mecánica de un tobogán infantil, Ji Xinglan cogió de repente el papel del examen y preguntó de forma indirecta: ―¿Es lindo? 

Yan Qiu miró a los dos niños con cuerpos desproporcionados en el papel de examen. Como la tinta estaba descolorida en el papel de prueba, sus sonrisas eran realmente extrañas. Tenían formas humanas pero no se parecían en nada a los humanos, creando así un fuerte y aterrador efecto de valle misterioso. 

Inmediatamente respondió en estado de shock, ―¡No! 

El dibujo era demasiado feo.

Pero cuando escuchó su respuesta, Ji Xinglan en realidad parecía un poco decepcionado, como si los dos niños fueran de su propia sangre.

Argumentó: ―Sus ojos son grandes y se ven muy lindos con coletas. ¿Realmente no te gustan? 

Yan Qiu miró a Xiao Ming y Xiao Mei tomados de la mano y sonriendo en el papel de prueba, y se veía aún más horrorizado.

¡¿Cómo eran lindos?! ¿Ji Xinglan tenía algunos tornillos sueltos en la cabeza hoy?

―No me gustan. No dejes que los vea.

Le dio a Ji Xinglan una mirada perpleja, y Yan Qiu empujó sin piedad el papel de prueba para evitarlo.

Mientras tanto, se preguntaba qué le pasaba a Ji Xinglan hoy.

Mientras hablaban, la Señora Ji le dijo una vez a Yan Qiu que debido a su familia, Ji Xinglan odiaba a los niños y tampoco le gustaban las criaturas pequeñas como los gatos y los perros.

Entonces, ¿por qué estaba tan interesado en los dos niños del examen hoy? ¿De alguna manera se encariñó con Xiao Ming y Xiao Mei?

Yan Qiu simplemente no podía entenderlo, así que se centró en el papel de prueba y lo ignoró. También apartó a Ji Xinglan y se aseguró de mantenerse a distancia cuando trató de promocionar a los dos niños con él nuevamente por tercera vez. Se sentó con la espalda recta y dijo: ―Ji Xinglan, por favor, no me molestes mientras estoy haciendo el examen.