¿Podemos hacerlo? ^^Chanlix^^

5♡

Interrumpió el rubio quien se encontraba en la puerta.

-Ah, lo lamento, ¿es su novio? No sabía.

- ¿Qué ? No somos...

Susurró el rubio

- Si, es mi novio, así que agradezco tu sinceridad pero, estoy en una relación ahora mismo, quisiera que nos dieras un poco de espacio.

Habló el castaño.

- De qué hablas Chan, yo..

- Lo entiendo, lo lamento, descanse!

Se retiró el enfermero.

El ambiente se volvió por unos segundos, pesado. La confusión y la misma ilusión se hizo presente en aquellos ojos color castaña que tenía el Pecoso. Le rondaban otro monto de preguntas sin respuesta.

-Antes de que preguntes... Lamento decir que eras mi novio, era la unica forma de que se fuera...

-...

- ¿Estás bien?

- ¿Solo lo dijiste por eso? ¿Sin otra intención?

Dijo cabizbajo.

- Que.. De que hablas.

- Sabes que me gustas, lo sabes, y aun así dijiste eso bromeando, ¿soy acaso un juguete para ti?

Decía acercandose a paso lento a la camilla.

- No, no es lo que quise decir, no lo dije...

- Entonces por qué dijiste eso, de esa manera tan indiferente, como si fuera algo sin importancia, ¿crees que el hecho de que me gustes era broma?

Las lágrimas cada vez se hacían más presentes, y amenazaban con salir.

- Escucha, no era mi intención decirlo así, lo prometo, sabes que nunca te haría daño, no de esa manera y mucho menos burlandome de ti. Por favor no lo mal interpretes.

- Olvidalo, sabes que, descansa  y duerme, lamento molestarte con mi presencia, me iré a casa.

-No espera!

- No, está bien... De todos modos, aún que sigamos hablando de esto, nunca vas a entender mis sentimientos.

Decia avanzando hacia la puerta.

- No es verdad, los entiendo, pero tengo miedo, !no te vayas!

Decía bajando de la camilla y caminando en paso apresurado hacia el menor.

- No te vayas...

Agarró del brazo al menor.

-!¿Estas loco?! Vuelve a la cama! Estás enfermo!

- Ya estoy perfectamente bien.

- No es verdad !vuelve a la cama ahora!

- Felix por favor escuchame.

El rubio simplemente bajó la cabeza.

-Primero vuelve a la camilla...entonces hablaremos.

Mientras ambos volvían al centro de aquel cuarto, en donde se recostó el castaño y sentó el rubio. El ambiente era tenso, si bien el rubio sabía soportar los rechazos del castaño, odiaba que jugarán con sus sentimientos, y al bromear con el, sintió un gran dolor en el pecho, un dolor que le impedía pensar bien, un sentimiento que se sentía cada vez más doloroso.

- No debí mentir y jugar con tus sentimientos, lo lamento.

- y?

- Lamento rechazar te tantas veces.

-...y?

-...

-...

-Por favor no te alejes, no se que haría si no estas conmigo, no seria lo mismo y el tiempo pasaría siendo una tortura así que te pido... Por favor perdóname.

Decia sosteniendo las manos del Pecoso.

- ¿Me darás una oportunidad...?

- ¿eh ?

- Dame una oportunidad, seamos una pareja, dejame gustarte.

Después de muchos intentos, después de artos rechazos aquel Pecoso se dispuso a dejar sus miedos de nuevo, si esta vez era rechazado, no volvería a insistir más.

- Está bien.

- Por favor sabes que... Espera !¿dijiste que si?! No estás bromeando verdad? No te puedes retratar!

- Seamos novios, Felix... Seamos felices.

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